Lo siento, no nos podemos posicionar contra el III Reich, porque hay que respetar las opiniones de aquellas personas que están a favor de lo que la Alemania nacionalsocialista está haciendo. Es difícil, lo sé, pero hay que ser respetuosos con todas las opiniones, porque todas son válidas.
Respiro. No me siento capaz de responderle. Me pregunto: ¿cómo voy a ser respetuosa con Himmler, con Goebbels, con Göring, con Hitler? ¿A qué doxa respetable se refiere
exactamente? Pues bien, aunque parezca una broma de mal gusto, cambien Alemania del III Reich por Israel, y podrán entender mi estupefacción el pasado viernes.
Paso a paso, como diría Susan George, otro mundo es posible si:
- Sabemos de lo que estamos hablando
- Identificamos a los actores
- Nos centramos en los adversarios correctos
Y también otro mundo está a nuestro alcance si
- Incluimos a todas las personas y forjamos alianzas
- Combinamos conocimientos y política
- Los educadores educan
- Practicamos la noviolencia
¿Sabemos de lo que estamos hablando? Es decir, usted que me pide que sea respetuosa con las personas que defienden las acciones de Israel, ¿sabe algo de la historia de Gaza? No me refiero a los libros que están allí, en todas las bibliotecas universitarias, en las bibliotecas públicas, en las librerías y que no creo que haya leído ni uno. Me refiero a algo más. ¿Sabe algo de Khatimah al-Qiram y de su hijo Fayez Abu Fardah? No es un reproche, es una pregunta. ¿Sabe algo de Muhammad al-Sa’afeen o de Ramadan Sha’ban? No pasa nada, yo tampoco. Hace poco descubrí este precioso proyecto de historia oral sobre Palestina que puede hallarse en https://www.palestineremembered.com/
¿Identificamos a los actores? Entiendo que cuando se siente reticente a dar su apoyo a Gaza es porque cree que Gaza es Hamas. Curiosa asociación la de señalar a los grupos de
resistencia como grupos terroristas solo cuando estos son enemigos de la entidad sionista, imperialista y fascista… y como no, de EEUU y la UE. No, hombre no, el fascismo no es terrorismo: el fascismo es una ideología respetable. Y sí, aunque, como señala el historiador Ian Pappé, las atrocidades cometidas por Israel le han hecho perder la “batalla del relato”, aún tenemos personas que justificarán estos actos argumentando que la batalla es Israel contra el terrorismo. Solo como apunte: la capacidad de los Estados para provocar el horror en las guerras y en las dictaduras es superior al de cualquier grupo denominado terrorista.
¿Nos centramos en los adversarios correctos? Es decir, usted que parece tan demócrata y a favor del derecho a decidir, ¿sabe usted que Vox es el partido que está en cabeza en el ranking elaborado por el lobby European Coalition for Israel? Supongo que habrá visto esa famosa imagen de Francisco Franco esperando a Adolf Hitler en la estación de Hendaya. Perdón, me refería a fotografía de Santiago Abascal y Benjamin Netanyahu, ¡menudo despiste el mío! Se lo comento solo porque me parece bastante curioso dos partidos -a priori contrarios- como Junts y Vox… tan poco contrarios en otros asuntos tan transcendentales.
Nada de reproches. Usted me pide que sea respetuosa con todas las opiniones. Bien, entonces incluyamos a todas las personas y forjemos alianzas entre los pueblos. Tenemos un Mediterráneo precioso; un precioso cementerio de miles de personas que se han dejado la vida para llegar a la Europa de Frontex. Sí, el mismo Mediterráneo de los cruceros de lujo.
Fuera pesimismo. Podemos establecer alianzas; de hecho, ya lo estamos haciendo: en todas las ciudades hay asambleas, debates, conferencias en favor de la libertad y la dignidad del pueblo palestino. En todos estos espacios, llenos de ese espíritu del 2011, convergen personas que lucharon en los 60, en los 80, a principios del XXI y ahora en 2024 a favor de Palestina. En esa mezcla de lugar real y lugar 2.0. se combina conocimiento y política; se mezclan activistas y académicos; en este nuevo espacio han entrado las mujeres (niñas, jóvenes y mayores) arabo-musulmanas y nos han dado una hermosa lección de solidaridad entre clases. ¡Gracias, compañeras!
La universidad se despierta… lentamente. Estudiantes y docentes: vuestra labor no es la de conseguir títulos, vuestra labor es otra; es la de aprender desaprendiendo. Algunas personas creen que ciertas y ciertos estudiantes de hoy en día no aprenden como es debido. Sin embargo, no es cierto: ¡claro que aprenden! Aprenden a ser sumisas y sumisos; aprenden a no movilizarse ante un genocidio. Fuera pesimismo. Tenemos ejemplos de movilizaciones estudiantiles potentes, capaces de resistir y exigir responsabilidades a sus rectores sobre las relaciones con esa entidad sionista, imperialista y fascista. Poca broma. ¿Se imaginan ustedes que hiciésemos lo mismo en nuestros trabajos?
Y en eso estamos… en querer avanzar hacia la noviolencia. Se trata de rechazar la violencia con compromiso político, compartir nuestro tiempo en las asambleas, conferencias y acciones, escuchar la multiplicidad de las voces, pero especialmente las silenciadas. Usted, que me pide que sea respetuosa, escuche a Khatimah al-Qiram y su hijo Fayez Abu Fardah; escuche las compañeras y compañeros palestinos que van a las asambleas; escuche a aquel profesor de Gaza… ¿Me entiende?
Para Vicent Martínez Guzman existían dos valores mínimos para una ética planetaria: la justicia y la solidaridad. No se trata solo de una ética individual; estamos hablando de una macroética, de una ética de la corresponsabilidad, puesto que los efectos de nuestras acciones y luchas individuales y colectivas en favor del pueblo palestino son en realidad para el mundo entero.
Ahora sí, me siento capaz de responderle. Disculpe que le contradiga, esa entidad sionista, imperialista y fascista -con EEUU y la UE como amiguitas- que usted quiere que respete son los primeros que, con su falta de valores mínimos éticos, nos conducen a la muerte.
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