Naturei Karta es un movimiento judío que existe en Jerusalén desde antes de la creación de Israel. Fundado en 1935 por rabinos ultraortodoxos, se opone a la idea del sionismo, al que acusan de «no representar al pueblo judío», de declarar un Estado hebreo. Su padre, Moshe Hirsh, fue ministro de Asuntos Judíos en la […]
Naturei Karta es un movimiento judío que existe en Jerusalén desde antes de la creación de Israel. Fundado en 1935 por rabinos ultraortodoxos, se opone a la idea del sionismo, al que acusan de «no representar al pueblo judío», de declarar un Estado hebreo. Su padre, Moshe Hirsh, fue ministro de Asuntos Judíos en la Autoridad Palestina de Yasser Arafat y hoy él mismo asesora a Mahmud Abbas sobre la misma cuestión.
Al rabino Meir Hirsh nadie le puede decir que es un «judío que se odia a sí mismo», que es como el establishment israelí suele descalificar a quienes se oponen a la ocupación de Palestina. Nacido en Brooklyn pero emigrado a Jerusalén con tan sólo un año, Hirsh es un rabino ultraortodoxo que se define como representante del «verdadero judaísmo». Para él, un judío es «aquel que sigue las reglas de la Torah que nos fueron entregadas en el Sinaí hace 3.000 años». Todo lo que se salga de eso, está fuera.
Vestido completamente de negro, barba gris y un pin con la bandera palestina en la solapa, reside en Mea Shearim, un barrio sucio y empobrecido que se asemeja a los guetos judíos de las capitales europeas del siglo XIX. Paradójicamente, sus calles, empapeladas con mensajes rabínicos, se han convertido en uno de los feudos del fundamentalismo hebreo pero, también, de la oposición al Estado.
Su posicionamiento a favor de un Estado único palestino en el que puedan convivir todas las comunidades resulta incómodo para las élites políticas israelíes, que defienden el Estado hebreo como único escudo posible frente al antisemitismo. Meir Hirsh se muestra escéptico ante el inicio de las conversaciones directas entre Benjamin Netanyahu y Mahmud Abbas, que hoy volverán a reunirse en Sharm el-Sheij (Egipto), donde se toparán con el primer gran escollo, la continuidad o no de la expansión de las colonias judías en Cisjordania.
¿Qué es Naturei Karta?
Naturei Karta significa `los guardianes de la ciudad’ en arameo. Nosotros guardamos la ciudad, no con armas, claro, pero sí contra el sionismo, para que no penetre en el judaísmo. No es un movimiento con miembros, sino ideológico, y en él se incluyen todos aquellos que se oponen al sionismo. Incluso en partidos como Agudat Israel (ultraderecha religiosa israelí) hay antisionistas, porque tienen miembros que no fueron al Ejército, que se niegan a servirle.
¿Se trata de una oposición al sionismo o también tiene sus características propias en el modo de entender la religión?
Desde 1922, la comunidad ultraortodoxa de Jerusalén, dirigida por el rabino Yosef Sonnenfeld, se opuso a la declaración Balfour. En 1924, llegó al país Jakob De Haan, un judío no religioso que retomó su judaísmo y, tras entrar en contacto con rabino Sonnenfeld, se convirtió en propagandista contra el sionismo. Llegó a encontrarse con la dirección política de los británicos y casi logró que Gran Bretaña cancelase la declaración. En ese momento, los sionistas vieron su influencia y decidieron matarlo. Tras su asesinato en Jerusalén, se creó la Sociedad por la Vida, que seguía el mismo camino contra el sionismo y que, en 1935, se convirtió en Naturei Karta. Desde entonces se mantiene viva la lucha contra el sionismo.
¿Qué significa para ustedes el sionismo?
Su objetivo es cambiar al pueblo judío. De ser un pueblo que vive de acuerdo con las reglas del Señor y la Biblia a ser un pueblo como el resto.
Los sionistas dicen que crear el Estado de Israel era la manera de salvar al pueblo judío.
El sionismo es la negación del pueblo judío. Han establecido un pueblo en base al Ejército, la lengua y el territorio. No tienen derecho para hablar en nombre de los judíos. Ni siquiera pertenecen al judaísmo, que está formado por quienes tienen su fe en la religión judía. Los sionistas vienen a extirpar al judaísmo de sus raíces, por lo tanto no puede decirse que sean judíos.
Pero los creadores del Estado de Israel lo fundaron en base a planteamientos religiosos.
Eso es solamente para dar un barniz judío al Estado sionista, pero no más que eso.
No se puede obviar que existen muchas otras corrientes del judaísmo que apoyan a Israel.
Los rabinos colaboracionistas forman parte del Estado sionista. Hace 80 años, cuando se estableció el rabinato sionista, se declaró un día de ayuno en Jerusa- lén y se dio la orden de no seguir ningún tipo de instrucción religiosa procedente de ellos. Nada de lo que dicen tiene un valor teológico. No mantenemos ninguna relación con ellos, ni con el Estado sionista. El sionismo es una fuerza de ocupación, que nos ha ocupado a nosotros, el pueblo palestino. Somos sus rehenes.
Su posición contraria al sionismo, ¿se basa únicamente en planteamientos teológicos o también tienen en cuenta los derechos humanos?
Los judíos condenamos el asesinato y la masacre sionista contra el pueblo palestino que, de por sí, va en contra de la Biblia. Estamos en contra de los asesinatos que llevan cometiéndose 62 años contra el pueblo palestino.
Pero viven en Israel. ¿Cómo se puede vivir dentro de un Estado al que no reconocen?
No tenemos ningún tipo de relación. No votamos a su Parlamento, no recibimos su dinero. Simplemente vivimos en nuestros guetos, gracias a contribuciones que llegan de EEUU y Europa, esperando el día que el sionismo desaparezca del mapa.
¿Cree posible que eso ocurra algún día? Tiene el apoyo de las grandes potencias y actúa con impunidad…
Es normal que esto no se pueda ver con los ojos. Nosotros creemos en lo que dice el profeta Hass, que Dios va a destruir el reino del pecado. Y no hay reino más pecador que el Estado sionista. No somos profetas, pero creemos que sus palabras se cumplirán y el Estado será destruido. No sabemos cómo ocurrirá. No tratamos de saber qué es lo que piensa Dios ni entenderlo.
¿Qué aporta Naturei Karta en su oposición al Estado?
No tenemos ningún Ejército para oponernos al Estado sionista, pero creemos que Dios todopoderoso podría hacerlo mejor que cualquier hombre. Esperamos el momento en el que caiga el Estado sionista y que judíos y árabes podamos vivir en paz dentro de un Estado palestino.
¿Cómo cree que recibe el Estado sus opiniones?
A los sionistas no les gusta nada nuestro mensaje, pero no nos importa. Estamos aquí antes que el sionismo y esperemos estar cuando los sionistas se vayan.
Si el estado de Israel desaparece, ¿qué fórmula propondrían para organizar el territorio?
Los palestinos son los únicos dueños legítimos de esta tierra y ésta tiene que volver a estar bajo su control total.
¿Qué relación mantiene con los palestinos?
Tenemos muy buenas relaciones con Al-Fatah y con Hamas. Aunque no somos un movimiento político y no entramos en la política palestina.
Su movimiento estuvo representado por un ministro en la Autoridad Palestina cuando la lideraba Yasser Arafat.
Mi padre fue ministro de Asuntos Judíos en la Autoridad Palestina y yo, de forma informal, sigo encargado de esta cuestión.
¿Qué opinión le merecen las conversaciones directas que se retomaron el 2 de setiembre?
Estamos totalmente en contra de esas negociaciones, ya que no creemos que se vaya a lograr nada, porque los palestinos entraron a ellas bajo presión. Esta tierra es del pueblo palestino, por lo que rechazamos la idea de dos estados. Nosotros apoyamos un único Estado palestino donde puedan convivir los dos pueblos. El que quiera vivir aquí, está invitado, y el que lo rechace, puede volver al lugar de donde vino. Ellos (los palestinos) dicen lo que dicen porque están bajo la presión internacional. Pero eso no significa que se termine el conflicto en el futuro.
La élite israelí descalifica a sus opositores con la frase «judío que se odia a sí mismo». Es difícil achacársela a usted.
No se puede hablar así. Ellos utilizan estos términos, pero Naturei Karta representa el verdadero judaísmo frente a lo que significa el sionismo, que niega sus raíces judías.
Israel se define a sí mismo como «Estado judío», pero usted rechaza esta calificación. ¿Qué es para usted ser judío?
Ser judío es ser fiel a la Torah que recibimos en el Sinaí hace 3.000 años.Cuando alguien no lo es o niega su fidelidad a la Torah, se saca a sí mismo del pueblo judío. Para los sionistas, tener el carné azul (identificación israelí) es lo que te hace ser judío. Eso está en contradicción con la Biblia que nos dio el Señor.
Pero figuras como Theodor Herzl o David Ben Gurion, históricos líderes sionistas, se definieron como judíos laicos.
No existe tal cosa. O se es judío o se es laico. Ben Gurion fue un rebelde contra el pueblo del Señor, no pertenece a la categoría del pueblo judío.
¿Cree que la visión que tiene el mundo de los judíos ha empeorado en los últimos años por a las actuaciones de Israel?
Hasta ahora, parte del mundo pensaba que los sionistas representaban al pueblo judío. Pero eso está cambiando. Incluso gente del Departamento de Estado de EEUU ya empieza a reconocer que es absurdo que los sionistas representen a los judíos.
Los líderes israelíes siempre hablan del riesgo de un nuevo Holocausto.
El sionismo utiliza el Holocausto de forma cínica para lograr sus objetivos. Incluso Eichmann vino en 1934 para encontrarse con la dirección sionista y planificar la solución final, de modo que llegasen aquí los jóvenes fuertes y el resto fuese asesinado.
Tras la masacre del Ejército israelí en Gaza, miembros de Naturei Karta visitaron la Franja para mostrar su solidaridad a sus habitantes.
Intentamos explicar que el sionismo no representa al pueblo judío y por eso viajamos por diferentes lugares.
¿Qué aprendieron en esa visita?
Fuimos a Gaza con ayuda humanitaria y tratamos de participar también en la Flotilla de la Libertad, aunque finalmente no llegamos a subir a bordo. Formamos parte de la lucha contra el bloqueo sionista a Gaza.
Además de Gaza, han visitado otros países árabes, como Líbano, donde se entrevistaron con miembros de Hizbulah. ¿Qué acogida reciben en los países árabes que visitan?
Sentimos una reacción de apoyo y de respeto. Por ejemplo, en Gaza nos dijeron que ellos no tienen ningún problema con los judíos, pero sí con los sionistas y con la ocupación. Antes del sionismo, judíos y no judíos vivían aquí en fraternidad. Eran vecinos, compartían negocios… fue el sionismo, sus crímenes, lo que creó esta ola antijudía en el mundo musulmán. ¡Los sionistas llegaron a poner bombas en sinagogas para que los judíos pensasen que estaban siendo perseguidos! Esto demuestra que fue el sionismo el que inventó el antisemitismo.
Esta visión choca con la imagen que se vende a la comunidad internacional de que los judíos están amenazados por el mundo árabe.
El antisemitismo es un producto de Israel. Ellos lo provocaron. Y es utilizado por los sionistas para castigar a aquellos que se oponen al Estado.
No se puede negar que los judíos han sufrido persecuciones a lo largo de su historia.
Eso fue una cosa de cristianos, no de musulmanes, que protegieron a los judíos incluso durante el Holocausto. Ahora se habla tanto de Ahmaninejad, pero los judíos, en Irán, tienen igualdad de derechos. E incluso pueden comprar vino, que está prohibido por la ley islámica, porque saben que los judíos necesitan vino para la celebración del shabat.
¿Usted ha sentido antisemitismo en alguno de sus viajes?
No.. A.P.