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Ocupación militar israelí con financiamiento palestino

Fuentes: Comité Democrático Palestino - Chile

Luchar en contra de la ocupación militar extranjera es un derecho sagrado de todos los pueblos oprimidos y sometidos a esta nefasta práctica. Una de estas formas de lucha es boicotear los productos y servicios de la potencia militar ocupante. Durante la primera Intifada, el levantamiento palestino en contra la ocupación israelí fue total y […]

Luchar en contra de la ocupación militar extranjera es un derecho sagrado de todos los pueblos oprimidos y sometidos a esta nefasta práctica. Una de estas formas de lucha es boicotear los productos y servicios de la potencia militar ocupante.

Durante la primera Intifada, el levantamiento palestino en contra la ocupación israelí fue total y absoluto. Bajo la consigna «NO podemos financiar la ocupación», todo, absolutamente todo el pueblo palestino boicoteó los productos israelíes. El resultado fue excepcional: Una fuerte depresión en la economía de Israel y un florecimiento de la industria nacional palestina. Los consumidores y dueñas de casa verificaban rigurosamente el origen de los productos. Solo se compraban las mercaderías nacionales.

Lamentablemente, esta sana y eficaz consigna «No se puede financiar la Ocupación», es totalmente ignorada por la Autoridad Nacional Palestina -ANP-.

En un informe preparado por la Unión de Cámaras de Comercio israelíes y publicado por el diario israelí Yedioth Ahronoth (27-04-2005), señalaba que intercambio comercial entre Israel y la ANP, alcanzó en 2004 la suma de 1.900 millones de dólares, registrando un aumento del 37% con relación al año anterior 2003. Obviamente la gran proporción de este intercambio corresponde a exportaciones israelíes a los mercados palestinos que alcanzaron la suma de 1.600 millones de dólares. Esta situación genera en parte la muy elevada cesantía que azota a la población palestina y que en algunas zonas supera el 50%.

De esta forma la ANP es considerada el segundo comprador de productos israelíes detrás de Estados Unidos. De esta forma, para Israel la situación es muy cómoda y favorable: ¡se mantiene la ocupación con financiamiento palestino!.