Cuba elabora proyectos y se prepara denodadamente para que la XIV Cumbre del Movimiento de Países No Alineados (NOAL), se convierta en una enorme fuerza que fortalezca la unión de las naciones en desarrollo en contra de las guerras de rapiña y las políticas neoliberales que impulsan Estados Unidos y sus aliados. En la cita, […]
Cuba elabora proyectos y se prepara denodadamente para que la XIV Cumbre del Movimiento de Países No Alineados (NOAL), se convierta en una enorme fuerza que fortalezca la unión de las naciones en desarrollo en contra de las guerras de rapiña y las políticas neoliberales que impulsan Estados Unidos y sus aliados.
En la cita, a efectuarse del 11 al 16 de septiembre próximos en el Palacio de las Convenciones de Ciudad de La Habana, participarán alrededor de 60 jefes de Estado o Gobierno, así como primeros ministros, cancilleres de los países miembros y representantes de organizaciones internacionales invitadas.
Una pléyade de graves problemas recorre actualmente el universo motivado en gran parte por las ansias de dominación de Estados Unidos que intenta adueñarse de los recursos energéticos mundiales, impone guerras de rapiña enarbolando una desacreditada lucha contra el terrorismo, presiona para implantar Tratados de Libre Comercio que coartan la soberanía económica y política de los pueblos y ataca o intenta destruir a gobiernos que no están dispuestos a seguir sus dictados, entre otras muchas violaciones.
El Movimiento No Alineado, con 114 integrantes, es la agrupación más grande de países después de las Naciones Unidas. La Isla del Caribe asumirá su presidencia para un período de tres años, por segunda vez en la historia y relevará a Malasia que desde febrero de 2003 ha sido un magnifico anfitrión.
Innumerables serán los temas que discutirán los representantes de las naciones participantes durante los días 11 y 12 de septiembre, para preparar el terreno a los ministros de Relaciones Exteriores que se reunirán el 13 y 14 y por último se congregarán los Jefes de Estado y Gobierno el 15 y 16 para dejar aprobada la Declaración Final.
Temas como la situación política y militar en el Medio Oriente, principalmente la ocupación de Palestina por Israel y la de Iraq por Estados Unidos estarán desde el primer día en el debate.
También desde el inicio sesionarán las Comisiones Política y Económica y según informó el Presidente Fidel Castro Ruz, Cuba planteará tres importantes propuestas en aras de la mayor unión y del beneficio general de los pueblos del Movimiento que se incluirán en el Plan de Acción del NOAL para el próximo trienio.
El primer ofrecimiento de La Habana es llevar adelante un programa de alfabetización para aplicarlos a todos los países basados en el sistema cubano Yo Si Puedo, mediante el cual ya han dejado de ser iletrados más de un millón de personas en el orbe.
«Enseñemos a leer y escribir a cientos de millones de seres humanos y les aseguro que tendremos cientos de millones de revolucionarios, cientos de millones de luchadores capaces de cambian el mundo», señaló el líder cubano durante el Seminario Internacional Sobre Políticas de Alfabetización y Postalfabetización efectuado a principios de este mes de junio en La Habana.
La segunda iniciativa es la formación masiva de médicos en el Tercer Mundo para que puedan los pueblos tener una asequible y efectiva atención médica a la que hoy acceder las grandes masas desfavorecidas.
«Los médicos del Tercer Mundo se están formando, dijo, y luego podemos ayudar a educar a los del Primer (Mundo) porque allí solo tienen especialistas para ejercer la medicina privada, no para llegar a donde están los más necesitados».
La tercera propuesta cubana será la Revolución Energética, que permitirá a nuestros países ahorrar miles de millones de dólares.
El Movimiento de Países No Alineados nació en Belgrado, antigua Yugoslavia en 1961 y su última Cumbre de mandatarios tuvo como escenario Kuala Lumpur, en el año 2003.
Cuba considera asunto de la mayor prioridad que el Movimiento trabaje de forma unida y solidaria y que de las palabras se pase a la acción política para lograr establecer un orden mundial basado en la paz, la justicia y la igualdad entre las naciones, en el que impere el respeto al Derecho Internacional, y en el que el derecho al desarrollo se convierta en una realidad y no en una utopía.
La Habana laborará junto a la mayoría de sus integrantes para que las Naciones Unidas y su sistema de organizaciones tengan un carácter regulador de las relaciones internacionales y garanticen la igualdad de todos los Estados, independientemente de su tamaño y su poderío, en el que se rechace el uso de la fuerza, donde la solución pacífica de controversias sea la norma y no la excepción, en el que se respeten las funciones y prerrogativas reales de la Asamblea General, y en el que se proscriban el unilateralismo, la coerción y la imposición humillante de la fuerza.
Grandes retos esperan al Movimiento de Países No Alineados pero con disposición a enfrentarlos en estrecha unión y solidaridad humana sus publos podrán salir adelante.