Recomiendo:
0

Otra red es posible

Fuentes: Rebelión

No es un secreto que el servicio de internet en Cuba es malo. El bloqueo norteamericano es en buena medida responsable de esta situación y así nuestro país lo ha denunciado en numerosos foros internacionales. Pero pocos creen que ETECSA, la empresa responsable de las telecomunicaciones en el país, está excenta de culpas. Sea esta […]

No es un secreto que el servicio de internet en Cuba es malo. El bloqueo norteamericano es en buena medida responsable de esta situación y así nuestro país lo ha denunciado en numerosos foros internacionales. Pero pocos creen que ETECSA, la empresa responsable de las telecomunicaciones en el país, está excenta de culpas. Sea esta percepción correcta o no, nada parece indicar que la empresa será capaz de cerrar la brecha digital que separa a nuestro país del resto del continente en poco tiempo. Cuando pensamos en regiones lejanas de los centros urbanos más importantes, ni siquiera los más optimistas apostarían porque sea posible en menos de lustros. La empresa se abstiene de hacer previsiones públicas al respecto.

Quizás sería una buena idea comenzar a plantearse soluciones alternativas. Por ejemplo impulsar de manera inteligente lo que en el mundo se conoce como «Mesh Network», Este tipo de red, si la comparamos con la internet tradicional, en vez de basarse en la existencia de unos pocos proveedores del servicio, está compuesta por computadoras que se conectan unas con otras directamente. Ciertamente, el desarrollo de este tipo de sistema posee dificultades técnicas que aún esperan por una solución definitiva, especialmente cuando se piensa en grandes escalas. Pero en el mundo son cada vez más comunes y su importancia no pasa inadvertida para los expertos. Cuba podría ser un excelente banco de prueba para su desarrollo.

Su descentralización las hace más robustas a ataques externos, insostituibles en caso de desastres naturales. Son económicas y eficientes. Practicamente garantizan la privacidad y anonimidad de los usuarios, ideal para esta época marcada por el espionaje. Su localidad las convierte en semilla para el desarrollo de otros proyectos comunitarios. Todos estos, principios defendidos históricamente por nuestro país.

¿Por qué entonces no atreverse y apostar también por ellas? Su diseño, desarrollo y mantenimiento generará fuente de empleo calificado, pero también de innovación. Acelerará seguramente la conexión de los lugares más intrincados y vulnerables económicamente del país. Lugares a los que ETECSA tardaría décadas en llegar. Pero no solo. Ocuparíamos de golpe un espacio que en este momento el imperialismo usa para atacarnos. Se haría más fácil burlar el bloqueo, pués el equipamiento necesario para mantener estas redes es económico y estandard. En un momento en que el país apuesta por el desarrollo de cooperativas es difícil imaginarse una oportunidad más clara para impulsarlas.

Una experiencia parecida ya triunfó en nuestro país, recordemos la agricultura urbana y la expansión de los organopónicos. Si se piensa dos veces, se descubrirá que ese modelo no es muy diferente al que proponemos. La idea es apostar por el desarrollo local de manera flexible y sostenible. Un concepto que podría extenderse luego a otras áreas de la economía y la tecnología. Por ejemplo, en aras de aprovechar a plenitud la energía solar, tarde o temprano se impondrá involucrar al sector residencial en el esfuerzo, este mecanismo de desarrollo podría ser ideal para lograrlo.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.