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Sabe lo que hay que hacer

Fuentes: Rebelión

“Solo el 6% de los europeos ve a EEUU como un garante “muy fiable” de la seguridad europea durante la próxima década.”

“El 6% de los alemanes se opone a la conducta israelí en la guerra en Gaza, (encuesta de la revista Stern).”

“Nueva masacre israelí en Gaza: Las fuerzas israelíes bombardean una escuela de la UNRWA y asesinan al menos a 30 Palestinos desplazados.”

Tres pequeñas noticias llegadas por el canal https://espanol.almayadeen.net/

En EEUU y Europa, todos los gobiernos entregan al ente colonial sionazi bombas, balas y todo tipo de armamento recién hecho, fabricado expresamente, para que asesine a las niñas y los niños de Gaza, y al conjunto del pueblo palestino. Asesinar a niños hambrientos, a mujeres hambrientas, a hombres hambrientos y todos ellos indefensos, abrasarlos bajo las llamas como han hecho en el campo de refugiados de Rafah, quieren que sea una muestra ejemplar para el resto del mundo, así dicen furiosos de odio lo que son desde la raíz de su ideología hasta el último suspiro de su existencia. ¿Van a encontrar los pueblos y los gobiernos en desacuerdo con los genocidas una solución?

El “orden basado en reglas” del imperialismo es el “orden” de la UE.

La ONU ha colocado al ejército sionazi en el apartado de “Organizaciones-estados y entidades que han cometido crímenes contra los niños”, y por los asesinatos, declaraciones y gestos los criminales sionazis todavía dicen que lo que es vergonzoso es no asesinar niños; el representante sionazi que destruyó la Carta de la ONU ante las cámaras, ha dicho ahora que el que se incluya a la entidad colonial en la lista de asesinos, es una decisión “vergonzosa”. ¿No cree usted que a ese terrorista se le debía expulsar de la ONU? Ese inductor de crímenes de lesa humanidad llamado Erdan, ha declarado que la banda terrorista colonial de la que forma parte “es el más ejemplar del mundo y quien entra en la “lista negra” es Antonio Guterres, Secretario General de la ONU, que fomenta el terrorismo y el odio a “Israel”.

Después de semejante soberbia del criminal ¿el mundo de los pueblos y los gobiernos libres de imperio se va a quedar en silencio? ¿El insulto del criminal encontrará respuesta justa?, ¿dirá algo algún gobierno del “occidente global”? Palabras muy semejantes y despreciables han vertido otros dos seres sionazis, Netanyahu ha escupido: “La ONU (quiere decir la mayoría mundial habiendo descartado a sus alimentadores imperiales) se ha puesto a sí misma en la lista negra de la historia”. Es evidente que su intención es asustar, amordazar, hacer que el mundo libre se encoja, y como el matón que es se autodeclara que su banda terrorista es “el más moral del mundo”. Ya lo ven ustedes, hace una gran burla de cualquier signo de humanidad, lo mismo en empatía, en justicia, en ética, …

Más noticias de criminales: el sionazi que lleva las relaciones con el exterior del ente colonial también ha amenazado diciendo: “Este paso (inclusión del ente colonial en la lista de criminales de niños) tendrá consecuencias en las relaciones de “Israel” con la ONU”. Queda meridianamente claro que los representantes del artefacto incendiario colonial odian infinitamente a los seres humanos. Aquí hay que cambiar algo, ¿lo harán las potencias que pueden y trabajan para organizar el mundo económicamente? Hace falta con la máxima urgencia una transformación o de lo contrario esas gentes supremacistas y genocidas llevarán al mundo a su fin, que es a lo que los nazis, sus educadores, llamaban “la solución final”.

¿Hubo, o creen que existen, “Leyes de la guerra”, Derechos, obligaciones de socorro que todos los países firmaron? Están escritas, pero “el orden basado en reglas”, el imperialismo y su servicio de guerra con sus lacayos europeos las desprecian. Esa es la “democracia del occidente global”: Quemar a los refugiados, hornos crematorios en Rafah, a la vista de todo el mundo, así paralizan, insensibilizan, convierten humanos en inhumanos, en sumisos e incapaces, esclavos y gente vil, ¿qué clase de regímenes son esos ?, ¿qué nivel de perversión han alcanzado los gobernantes? La Historia señalará a todos los que se esconden en sus casas con cualquier excusa, hace mucho que estamos en la hora en que debemos llevarnos la mano al corazón pensando en los nuestros, en el mundo trabajador, abrir la puerta a la conciencia y mirar, ver lo que los que quieren colonias, esclavos, materias primas, mano de obra para matar a los que no se dejan esclavizar, hace tiempo que ha llegado la hora de no dejar que impongan “la solución final” de los nazis sobre el mundo.

Estamos a las puertas de una gran guerra, una guerra generalizada, una guerra abierta en la que millones de seres humanos acabarían su existencia. ¿Quién no ve que los imperialistas lo están buscando?

En Gaza los sionazis llevan ya 245 días de exterminio, los últimos 3 días no han parado de bombardear ni un instante sobre zonas pobladas y campos de refugiados. ¿Quién contempla o sabe lo que hacen sin indignarse? Si los organismos multinacionales no organizan una fuerza que intervenga, ¿qué debemos hacer la ciudadanía del mundo que no quiere ser aplastada, humillada y esclavizada?, ¿por qué creen que los gobiernos del “occidente global”, EEUU y la UE, no han cortado el envío de armas para el ente colonial?, ¿por qué no cortan relaciones con su ejército colonial? Usted sabe la respuesta, y también sabe lo que hay que hacer para acabar con esa situación.

Ramón Pedregal Casanova es autor de los libros: Gaza 51 días; Palestina. Crónicas de vida y Resistencia; Dietario de Crisis; Belver Yin en la perspectiva de género y Jesús Ferrero; y, Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios. Presidente de AMANE. Miembro de la Asociación Europea de Apoyo a los Detenidos Palestinos. Miembro de la Red de Artistas, Intelectuales y Comunicadores Solidarios con Nicaragua y el FSLN. Colaborador del canal Antiimperialistas.com, de la Red en Defensa de la Humanidad.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.