Los avances y retrocesos en ese sentido salen a la luz gracias a una encuesta sobre el tema
Especialistas y activistas identifican brechas de inequidades y piensan nuevas estrategias en la atención a la violencia hacia las mujeres con base en los datos preliminares de la Encuesta Nacional de Igualdad de Género, que trascendieron durante la Jornada por la No Violencia hacia Mujeres y Niñas.
El último espacio donde se proporcionaron datos de la encuesta, que no se realizaba desde 1989, fue un coloquio organizado por los no gubernamentales Centro Oscar Arnulfo Romero (Ceoar) y la Sociedad Cubana de Estudios Multidisciplinarios sobre Sexualidad.
«El gran reto que tenemos sobre el problema de la violencia radica en aportar nuevos elementos que posibiliten una comprensión más compleja y esperanzadora», destacó Gabriel Coderch, el coordinador general de Ceoar.
Un mensaje de la Federación de Mujeres Cubanas resaltó que el trabajo en estos temas no es patrimonio de ninguna organización en particular, sino un asunto «que tenemos que encarar y trabajar todas y todos en conjunto».
Nuevos datos
Uno de los paneles del encuentro, realizado el 15 de diciembre, sacó a la luz nuevos elementos de la Encuesta Nacional sobre Igualdad de Género, un esfuerzo conjunto entre varias instituciones cubanas y con apoyo de organizaciones del Sistema de Naciones Unidas.
Según Mayda Álvarez, directora del Centro de Estudios de la Mujer, los resultados preliminares del estudio arrojan que se ha «avanzado positivamente en términos de concepciones, aunque persisten estereotipos y prejuicios», en temas como los celos y la distribución de tareas en el hogar, que se convierten en causa de discusiones de pareja.
«El primer asunto a tratar para combatir la violencia es deconstruir las construcciones socioculturales de género que existen en las personas y que en su subjetividad hacen que de alguna manera consideren que pueden ejercer violencia sobre otras en el reparto del poder», insistió.
El estudio arroja que menos de 10,5 por ciento de las 19.189 personas encuestadas identifica la violencia entre los tres principales problemas de hombres y mujeres en la Cuba de hoy.
Se registran avances en estereotipos y prejuicios como: mujeres y hombres son iguales para tomar decisiones, las mujeres pueden sentirse bien aunque no hayan tenido hijos, las mujeres consideran que los hombres no son mejores para negociar que ellas ni para tomar decisiones y que ellas no siempre tienen que complacer sexualmente a su pareja. No obstante, la mayoría piensa todavía que tiene que complacer siempre a su pareja.
De acuerdo con las cifras preliminares, 89,4 por ciento de los encuestados considera que en Cuba se aplican leyes que protegen a las mujeres y 86 por ciento opina que existen lugares y servicios que dan atención a las mujeres víctimas de la violencia.
En relación con los derechos de las personas no heterosexuales, el 76,9 por ciento entiende que deben tener iguales derechos. En similar encuesta anterior, en 1989, entonces solo lo consideraba así el 23,3 por ciento.
Los datos revelan que se mantienen concepciones arraigadas en mujeres y hombres como que las mujeres no deben realizar actividades que impliquen esfuerzo físico.
Por ello, varias expertas consideran que las acciones educativas deben estar dirigidas a ir eliminando esos estereotipos que se repiten y reproducen, incluso en las generaciones más jóvenes.
Los resultados obtenidos hasta el momento ratifican que las mujeres mantienen en predominio en el trabajo renumerado, tendencia que se acentúa en el ámbito rural y en el oriente del país.
Y sobre ellas continúa recayendo el peso de las labores domésticas, el cuidado de personas dependientes y que dedican a ello diez horas más que los hombres.
En el intercambio, participantes reconocieron la importancia de contar de la manera más rápida con los resultados definitivos de la Encuesta Nacional de Igualdad de Género, desagregados por edades y regiones.
Y llamaron a continuar visibilizando y estudiando la violencia existente en el ámbito escolar y sensibilizando al profesorado, decisores y policías.
También se abogó por fomentar el conocimiento en la población sobre las diferentes manifestaciones de violencia, un fenómeno que al estar tan naturalizado no se concibe como un maltrato.
Fuente: http://www.ipscuba.net/genero/sociedad-cubana-supera-estereotipos-de-genero-pero-mantiene-otros/