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SOS Racismo considera que recurrir al Ejército para blindar Ceuta y Melilla es el «colmo de la desigualdad y la injusticia»

Fuentes: Gara

Esta organización ha advertido que son precisamente las «buenas relaciones» entre los Gobiernos de España y Marruecos las que propician estos intentos masivos de entrada de los inmigrantes. La Federación Estatal de organizaciones SoS Racismo considera que recurrir al Ejército en las fronteras de Ceuta y Melilla con Marruecos para ayudar a repeler intentos de […]

Esta organización ha advertido que son precisamente las «buenas relaciones» entre los Gobiernos de España y Marruecos las que propician estos intentos masivos de entrada de los inmigrantes.

La Federación Estatal de organizaciones SoS Racismo considera que recurrir al Ejército en las fronteras de Ceuta y Melilla con Marruecos para ayudar a repeler intentos de entrada de inmigrantes subsaharianos es «el colmo de la desigualdad y la injusticia» por tratar como una «invasión» lo que en realidad es el intento de personas desesperadas por huir de situaciones de conflicto bélico o extrema pobreza.

El portavoz en Madrid de la Federación, Diego Lorente, ha acusado además a las autoridades de Marruecos de «exagerar» las cifras y de alentar los intentos masivos de entrada.

«Acampados en las inmediaciones de Ceuta no hay un millar de subsaharianos, hay como mucho 300. Otra cosa es que intenten saltar una y otra vez».

Consecuencia de «las buenas relaciones»

Lorente también ha criticado que la única política que el Gobierno español aplique a esta situación sea que «Marruecos se ocupe de ellos», ante las continuas violaciones de derechos humanos que sufren estos inmigrantes en zona marroquí.

De hecho, ha advertido que son precisamente las «buenas relaciones» entre los dos estados las que propician estos intentos masivos de entrada.

«Cuando Marruecos empieza a deportarlos medio muertos al desierto argelino, les deja sin comida, les persigue donde están acompañados, lleva a cabo violaciones en las comisarías, ellos deciden como sea entrar en España, por patera o saltando la valla. Uno de ellos me comentó que prefería morir en el mar que ser capturado por la policía marroquí», ha señalado.