Recomiendo:
0

Turquía acepta por primera vez en 30 años un alto el fuego con la guerrilla del PKK

Fuentes: Cuarto Poder

Desde que en agosto de 1984 el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) se levantó en armas contra el Gobierno de Ankara, la guerrilla kurda ha declarado media docena de altos el fuego pero siempre de forma unilateral. En todas estas ocasiones, el PKK anunciaba el cese de su actividad a cambio de iniciar […]

Desde que en agosto de 1984 el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) se levantó en armas contra el Gobierno de Ankara, la guerrilla kurda ha declarado media docena de altos el fuego pero siempre de forma unilateral. En todas estas ocasiones, el PKK anunciaba el cese de su actividad a cambio de iniciar un proceso de diálogo para encontrar una salida pacífica al principal problema político de Turquía. Sin embargo, el Ejército turco no solamente hacía oídos sordos a tales ofertas sino que respondía bombardeando las bases del PKK en el norte de Irak.

Este jueves, 21 de marzo, y con motivo de celebrarse el Newruz -el año nuevo kurdo-, Abdulá Ocalán, máximo e indiscutible líder del PKK, ha declarado solemnemente que «la lucha armada ha concluido» y que, a partir de ahora, las única vías posibles son las «democráticas». Ocalán, que se encuentra encarcelado de por vida en la isla-prisión de Imrali, hace asimismo votos por un nuevo periodo de «convivencia» entre kurdos y turcos, asegurando que el PKK no se levantó en armas contra ningún pueblo sino contra «la desigualdad, la opresión y el subdesarrollo».

Desde que hace meses se hicieran públicas las conversaciones directas entre el Gobierno de Tayip Erdogán y el principal dirigente del PKK, se esperaba una «importante declaración» con motivo del Newruz -literalmente en kurdo «Nuevo Día»- pero no transcendió su contenido hasta que fue leído este jueves ante una impresionante concentración humana de dos millones de personas en la ciudad de Diyarbakir.

La de Diyarbakir ha sido solo una de las muchas demostraciones de fuerza que ha realizado el PKK en el «día nacional» de los kurdos que, a diferencia de otros años, no ha sido obstaculizada por la Policía. En la mayor parte de las ciudades del sureste de Turquía, cientos de miles de simpatizantes se dieron cita la víspera portando retratos de Abdulá Ocalán y banderas del PKK, un grupo armado catalogado por Turquía, la Unión Europea y Estados Unidos como organización terrorista.

Según la tradición, con el Newruz se conmemora el nacimiento mítico del pueblo kurdo aunque, históricamente, este hecho coincide con la sublevación de los medos -antecesores de los kurdos- contra el Imperio Asirio el año 612 antes de Cristo. Por esta razón y aprovechando el inicio de la primavera, los kurdos de Turquía, Irán, Irak y Siria celebran esta fiesta bailando en torno a un fuego que tiene un carácter liberador.

El fuego del Newruz es una de las principales señas de identidad de esta etnia de origen indoeuropeo, considerada, con unos 40 millones de personas, la mayor del planeta sin Estado. Junto a esta fiesta también destacan como elementos identitarios comunes la lengua, el folklore, la forma de vestir, un territorio muy montañoso, numerosas tradiciones y acontecimientos históricos y también un himno y una bandera comunes, creados durante la efímera República de Mahabad, el único estado independiente que han tenido en toda su historia.

Precisamente con motivo de este histórico Newruz y coincidiendo con la declaración de Ocalán, el Ayuntamiento de San Sebastián ha colocado también este jueves en su balcón principal y junto a la enseña donostiarra, la bandera kurda, compuesta por tres franjas horizontales -roja, blanca y verde- con un sol central.

El alcalde, Juan Karlos Izagirre, que pertenece a Bildu, recibió a una delegación que representaba a las cuatro partes en que está dividido el Kurdistán: Rahmi Batur (Turquía), Rahim Kaderi (Irán), Abdulsatar Abed (Irak) y Zinar Alá y Siwar Alá, por Siria. Todos ellos coincidieron durante su encuentro con Izagirre en la histórica trascendencia de la declaración de Ocalán, al considerar que el proceso iniciado en Turquía repercutirá necesariamente en la situación de Siria e Irán, mientras que la actual autonomía de Irak servirá de modelo para las otras tres partes.

Rahmi Batur recordó las otras declaraciones de alto el fuego, destacando que la diferencia entre la actual y las anteriores estriba en que ahora no se trata de una decisión unilateral sino que es el resultado de unas conversaciones reconocidas por el propio Gobierno turco.

De acuerdo con las palabras del líder del PKK, sus guerrillas deberán replegarse hacia las montañas de Irak pero, a diferencia de lo que había ocurrido hasta ahora, el Ejército turco se compromete a facilitar esta retirada, lo cual supone un implícito reconocimiento de las conversaciones por parte de los militares.

A Rahmi Batur no le cabe duda de que este cambio de actitud se debe a que el Gobierno de Tayip Erdogán se siente con la fuerza suficiente frente al poder fáctico del Ejército, que siempre se ha negado a una salida negociada al conflicto.

También considera que dentro de los acuerdos figuraría el reconocimiento de la lengua kurda, la eliminación del carácter turco que la Constitución da a la ciudadanía, una auténtica autonomía local y, en una fase posterior, la excarcelación de Ocalán, que pasaría a una situación de prisión domiciliaria.

Zinar Ala y Siwar Ala, del Kurdistán sirio, esperan, por su parte, que, tras los acuerdos, también cambie la actitud de Turquía hacia el incipiente autogobierno de los kurdos sirios, mientras que Rahim Kaderi, en representación del Kurdistán iraní, se mostró convencido de que, si estos cambios se consolidan en las otras partes -Siria, Turquía e Irak-, la República Islámica de Irán no tendrá más remedio que reconocer la autonomía para los casi diez millones de kurdos que viven en la antigua Persia.

Fuente original: http://www.cuartopoder.es/terramedia/turquia-acepta-por-primera-vez-en-30-anos-un-alto-el-fuego-con-la-guerrilla-del-pkk/4825