Desde que el General de Ejército Raúl Castro proclamara el 26 de julio de 2007 en Camagüey la necesidad de realizar «cambios estructurales y de concepto» en el funcionamiento de la economía cubana, buena parte de la prensa internacional se entretuvo en encontrar supuestas diferencias de esos análisis con el pensamiento del líder histórico de […]
Desde que el General de Ejército Raúl Castro proclamara el 26 de julio de 2007 en Camagüey la necesidad de realizar «cambios estructurales y de concepto» en el funcionamiento de la economía cubana, buena parte de la prensa internacional se entretuvo en encontrar supuestas diferencias de esos análisis con el pensamiento del líder histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro.
Por más que Raúl ha insistido en la coherencia de las transformaciones a acometer con el ideario fidelista, algunos «analistas» de la realidad cubana gastaron ríos de tinta y miles de millones de bits en intentar convencer al mundo de lo contrario. Necesitados de noticias, si no existen las inventan y ahora, a raíz del mensaje de Fidel a los estudiantes universitarios, han caído en cuenta de la coincidencia de los análisis realizados por el Comandante en Jefe hace cinco años con lo planteado en los Lineamientos para el desarrollo de la política económica y social a debatir en toda Cuba, previo al Sexto Congreso del Partido Comunista que acaba de convocarse.
Aquella intervención de Fidel en la Universidad de La Habana, el 17 de noviembre de 2005, por su radicalidad revolucionaria, carácter antidogmático y proyección universal, todavía tiene mucho que aportar en Cuba y en el mundo. La consecuencia que lo recorre de principio a fin, en su preocupación por la justicia social y el destino de la humanidad no debe dejar de estar presente en los análisis que ahora comenzamos los cubanos. Al invocarlo en su reciente «mensaje a los estudiantes universitarios«, el autor de La historia me absolverá ha colocado un prólogo ético al documento que definirá nuestro futuro.
Fuente: http://lapupilainsomne.wordpress.com/2010/11/23/un-prologo-etico-a-los-lineamientos/