Los números revelan un creciente acceso a la red en la isla caribeña, pero su contextualización arroja varias aristas polémicas.
Cuba experimenta en los últimos años un creciente acceso a las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (Ntics).
Tanto es así, que algunos informes y líderes políticos lo colocan como el país con mayor penetración registrada en las redes sociales en 2016. Otros criterios y datos informan sobre el desarrollo ostensible en el empleo de Internet y telefonía móvil.
Pero, ¿qué sucede cuando se colocan esas cifras locales en un contexto internacional?
A pesar de que las autoridades nacionales insisten en la voluntad política para incrementar el acceso a la red de redes, Cuba todavía ocupa un lugar rezagado a nivel mundial y regional en ese sentido.
Según datos publicados por la Unión Internacional de Telecomunicaciones, la nación caribeña ocupó en 2017 el lugar 137 en el empleo de nuevas tecnologías. Incluso, bajó un puesto en el escalafón mundial con respecto al año precedente.
Y en el ranking para las Américas, a pesar de los avances, Cuba ocupa el escaño 34.
En esos parámetros inciden las escasas suscripciones a la telefonía fija, de 11,77 por cada 100 habitantes.
También influye que, más allá del crecimiento exponencial del empleo de celulares en la isla caribeña, solo 35,49 por ciento de los ciudadanos pueden costear ese servicio.
Cifras sin descifrar
Las estadísticas recientes sobre el tema son halagüeñas. En los últimos dos años los puntos colectivos de navegación superaron los mil entre zonas wifi en espacios abiertos y las salas de navegación. Y se incrementó el ancho de banda disponible.
No obstante, la conectividad sigue siendo una deficiencia, si bien se incrementó a 38,77 por ciento las personas que usan Internet.
El dato más destacado son los más de 4,5 millones de usuarios en la autopista digital.
Sin embargo, la cifra no especifica si los usuarios acceden a la Red Cuba (intranet) o Internet a plenitud. Tampoco cuántos acceden desde entidades estatales, sector empresarial o cuentas Nautas gestionadas por individuos. Ni precisa la calidad ni cantidad del tiempo de conexión.
¿Qué significa esto? Que en la cantidad puede tenerse en cuenta lo mismo a la persona que emplea Internet con frecuencia, como aquella que apenas se abrió una cuenta Nauta y nunca más la usó.
Los informes no reflejan ni siquiera la distribución de los usuarios por provincias, edades, género, nivel educacional…
Todavía es menos de 20 por ciento la cantidad de casas con computadoras e inferior a un diez las que cuentan con conexión a Internet, a pesar del último paquete comercial implementado por la estatal empresa de telecomunicaciones (Etecsa), denominado Nauta Hogar y disponible en algunos hogares de barrios seleccionados de seis ciudades cubanas.
Sigue significando este servicio uno de los de más elevado costo en un país donde el Estado es el mayor empleador y el salario promedio mensual estatal es el equivalente a 29 dólares.
Algunos ciudadanos y activistas alertan sobre los altos precios y la necesidad de que las autoridades brinden más datos al respecto.
Incluso, algunos opinan que resulta difícil, teniendo una nula penetración de banda ancha móvil y un escueto porcentaje de conexión en los hogares, que el país posea mayor porcentaje de usuarios en Internet que otras naciones que ostentan superiores condiciones infraestructurales que los cubanos.
Boom de las redes sociales o lo que no dicen los números
Un apunte igualmente complejo resulta la penetración cubana en redes sociales.
Como resaltan informes y voces gubernamentales, en el último periodo la isla caribeña aumentó el uso de estas plataformas digitales en 346 por ciento.
Un número exorbitante. Aunque no lo es tanto si se tiene en cuenta que hace tres años en el país apenas se conocían estos entornos de socialización. Así que cualquier incremento a partir de ahí sería evidentemente exponencial.
A ello se suma que tampoco las cifras especifican cuáles son los puntos de acceso a estas redes sociales, sean desde cuentas personales o computadores en centros estatales. De hecho, en algunas instituciones estatales el uso de estos espacios está completamente prohibido.
Por otra parte, servicios de llamadas ofrecidas por Messenger, WhatsApp o Skype suelen estar bloqueados en el país, por lo que las y los usuarios buscan redes alternativas como IMO.
Muchos sitios web de facilitación social, compra venta o informativas están censurados en la navegación nacional.
Y la baja calidad del servicio impide una navegación óptima en redes sociales… tan solo subir un video a YouTube puede demorar más de una hora.
Otro problema reiterado por la población son las malas condiciones del acceso a Internet en espacios públicos: muchos al sol y sin condiciones mínimas como asientos.
Últimos datos sobre conectividad en Cuba
Las estadísticas trascendieron en la XVII edición de la Convención y Feria Internacional Informática 2018, que se desarrolla en la capital cubana del 19 al 23 de marzo.
Existen 1.651 sitios públicos de acceso a Internet en el país, de los cuales son:
-673 sitios WIFI
-207 salas de navegación
-771 áreas de navegación en terceros (Hoteles, Joven Club y Correos de Cuba)
Y el servicio Nauta Hogar registra hasta el momento 27.316 usuarios.
El año en curso, la única y estatal Empresa de Telecomunicaciones de Cuba aspira a:
-Instalar 150 nuevas áreas de navegación alámbrica e inalámbrica para cubrir el 44 % de los Consejos Populares.
-Implementar 52.500 servicios Nauta Hogar
-La apertura del nuevo servicio de Internet en el móvil.