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La eficiencia energética del transporte es compatible con la calidad de vida

Fuentes: Europa Press

El Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IADE) defendió el pasado viernes, en el marco de la clausura del curso sobre ‘Movilidad y Consumo de Energías’, que se ha desarrollado a lo largo de toda la semana en los Cursos de El Escorial de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), que […]

El Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IADE) defendió el pasado viernes, en el marco de la clausura del curso sobre ‘Movilidad y Consumo de Energías’, que se ha desarrollado a lo largo de toda la semana en los Cursos de El Escorial de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), que ‘es posible aumentar la eficiencia energética del transporte sin tener que renunciar a las necesidades de movilidad y a la calidad de vida’.

El encargado de esta clausura fue el secretario general del IDAE, José Antonio Sánchez Quintanilla, que señaló que la intención de estos cursos ha sido la de dar respuestas a ‘la creciente preocupación generada en torno a los problemas derivados de la movilidad y su consumo energético y emisiones de CO2’.

Entre los aspectos que se han tratado en este curso destacó el aumento en las emisiones de gases de efecto invernadero, que en el sector del transporte ‘están muy por encima del crecimiento medio de todos los sectores’, así como el dato revelado por el Libro Verde ‘Hacia una estrategia europea de seguridad en el abastecimiento energético’, que prevé que el 90 por ciento del aumento de las emisiones de CO2 en la UE hasta 2010 se deberán al transporte.

Según informa el IDAE, ‘la única forma de disminuir el crecimiento de emisiones de CO2, es aumentar la eficiencia energética, ya que las emisiones están directamente relacionadas con el consumo’. Actualmente, ‘la intensidad energética del transporte está muy por encima en España (cerca de un 50 por ciento superior) que en la UE’, apunta.

En este sentido, el IDAE recuerda que la dependencia energética de los derivados del petróleo, ‘es prácticamente total (99 por ciento) en el transporte’, lo cual, dado el escenario actual de precios, ‘otorga al sector una clara inestabilidad y vulnerabilidad ante los movimientos del mercado petrolífero’.

También apuntó la ‘irracionalidad en el uso de los medios de transporte, especialmente en el medio urbano, donde se consume el 40 por ciento de la energía del transporte, así como la excesiva utilización del vehículo privado, en muchos casos ‘de un modo irracional’, en detrimento de otros medios, siendo responsable del 15 por ciento del consumo energético total del transporte.

Medidas eficientes

Entre las medidas eficientes que propone el IDAE para combatir el problema se encuentra la planificación de infraestructuras, la organización de los servicios del transporte, la promoción de los medios de transporte más eficientes y el cambio de hábitos de consumo, que han de contribuir significativamente al aumento de eficiencia en el sector.

En su opinión, las infraestructuras deben ser cuidadosamente planificadas antes de su ejecución, teniendo en cuenta su contribución al consumo de energía y su impacto ambiental.

‘Es perfectamente posible solucionar los problemas derivados de la movilidad, si se conjugan de forma adecuada las medidas organizativas, legislativas y tecnológicas’, apunta. Ello tendrá como consecuencia la disminución de emisiones de CO2 y el cumplimiento con los compromisos de Kioto, ‘que el Gobierno está dispuesto a cumplir’.

Según señala, los medios de transporte colectivo ‘están llamados a tener mayor participación en la movilidad en general y en la urbana en particular’. Para ello, ‘tendrán que aumentar su calidad en la prestación del servicio’.

El IDAE insta a modificar hábitos de mala utilización del vehículo privado, tanto en la compra como en la utilización, para que así puedan ser efectivas en el consumo global las continuas reducciones de consumo de los coches nuevos introducidas por los fabricantes.

Asimismo, señalan el mayor uso del ferrocarril como ‘una herramienta de eficiencia energética’, pero para ello ‘también tendrá que adaptarse a la demanda social de calidad’. También las redes existentes de alta velocidad son ‘un buen ejemplo de eficiencia energética’, poniendo como ejemplo el AVE Madrid-Sevilla, el medio que desplaza más viajeros con el menor consumo unitario y el menor consumo absoluto en energía final.

Finalmente, el IDAE señala que, enfocado tanto al uso de vehículos privados como de transporte público, ‘el empleo de medios de propulsión renovables, como los biocarburantes, contribuyen a la reducción de la emisión de gases de efecto invernadero y otros contaminantes’.