El 62 % de los israelíes quiere que el Gobierno inste a los ciudadanos árabes a abandonar Israel, según una encuesta publicada el martes. Los ciudadanos «arabes» son aquellos palestinos que no han sido expulsados de sus hogares el año 1948, cuando mas del 75% de la población palestina fue desplazada y hoy viven en […]
El 62 % de los israelíes quiere que el Gobierno inste a los ciudadanos árabes a abandonar Israel, según una encuesta publicada el martes.
Los ciudadanos «arabes» son aquellos palestinos que no han sido expulsados de sus hogares el año 1948, cuando mas del 75% de la población palestina fue desplazada y hoy viven en los campos ferugiados.
Hoy la población israelí está formada por mas de 5 millones de judiós, en su gran mayoría son colonos que provienen de todos los rincones de la tierra, como el caso del mas de un millon de rusos que llegaron a Israel durante la decada de los noventa. Estos colonos recien llegados son los que abogan por la expulsión de los palestinos. El sondeo «Indice de Democracia 2006» del Instituto de Democracia de Israel muestra que el 62 por ciento de los israelíes apoyaría una emigración árabe auspiciada por el Ejecutivo.
Sólo el 14 por ciento de los encuestados considera buenas las relaciones entre árabes y judíos, al tiempo que el 29 por ciento opina que una mayoría judía es necesaria para tomar decisiones de calado nacional.
El Kneset (Parlamento) israelí calificó estos resultados de » racismo», informó el periódico local Yedioth Ahronorth.
«Es desafortunado y alarmante que todavía exista un porcentaje tan amplio entre los judíos que no crean en la asociación entre la mayoría judía y la minoría árabe», citó el diario al presidente del partido árabe United Arab Lista’al.
El gobernante Kadima también expresó su preocupación a través del diputado Menahem Ben-Sasson, quien afirmó que «la actitud hacia las minorías es preocupante y requiere prestar atención e invertir recursos para entender su vida, cultura e historia como paso previo a desarrollar una relación mutua basada en el respeto».
La encuesta se ha elaborado como preparativo de cara a una conferencia que ofrecerá el miércoles el presidente israelí, Moshe Katsav.
Actualmente unos 1,3 millones de árabes, una quinta parte de la población total de Israel, viven en el Estado judío.
Los ciudadanos «arabes» son aquellos palestinos que no han sido expulsados de sus hogares el año 1948, cuando mas del 75% de la población palestina fue desplazada y hoy viven en los campos ferugiados.
Hoy la población israelí está formada por mas de 5 millones de judiós, en su gran mayoría son colonos que provienen de todos los rincones de la tierra, como el caso del mas de un millon de rusos que llegaron a Israel durante la decada de los noventa. Estos colonos recien llegados son los que abogan por la expulsión de los palestinos. El sondeo «Indice de Democracia 2006» del Instituto de Democracia de Israel muestra que el 62 por ciento de los israelíes apoyaría una emigración árabe auspiciada por el Ejecutivo.
Sólo el 14 por ciento de los encuestados considera buenas las relaciones entre árabes y judíos, al tiempo que el 29 por ciento opina que una mayoría judía es necesaria para tomar decisiones de calado nacional.
El Kneset (Parlamento) israelí calificó estos resultados de » racismo», informó el periódico local Yedioth Ahronorth.
«Es desafortunado y alarmante que todavía exista un porcentaje tan amplio entre los judíos que no crean en la asociación entre la mayoría judía y la minoría árabe», citó el diario al presidente del partido árabe United Arab Lista’al.
El gobernante Kadima también expresó su preocupación a través del diputado Menahem Ben-Sasson, quien afirmó que «la actitud hacia las minorías es preocupante y requiere prestar atención e invertir recursos para entender su vida, cultura e historia como paso previo a desarrollar una relación mutua basada en el respeto».
La encuesta se ha elaborado como preparativo de cara a una conferencia que ofrecerá el miércoles el presidente israelí, Moshe Katsav.
Actualmente unos 1,3 millones de árabes, una quinta parte de la población total de Israel, viven en el Estado judío.