Recomiendo:
5

¿Se marcharán de Irak las tropas estadounidenses?

Fuentes: Al Mayadeen

Traducido del inglés para Rebelión por Beatriz Morales Bastos

A medida que se acerca la fecha de la retirada de las tropas estadounidenses de Irak no se observa ningún cambio fundamental respecto a la cantidad de tropas, solamente respecto a su estatus. ¿Se trata simplemente de otra treta de Estados Unidos para someter a Irak?

La “retirada” de las tropas estadounidenses de Irak será otra vez noticia de portada de los periódicos al acercarnos al final del año, puesto que la fecha fijada para esta retirada es el 31 de diciembre. No obstante, en realidad no se retirará tropa alguna, simplemente se dará otro nombre a las fuerzas de ocupación. Se otorgará a estas mismas tropas de combate un papel “consultivo” y no se retirará a ningún soldado. Ya se lo han confirmado al New York Times los responsables del Pentágono, que declararon que en esencial sería una retirada sobre el papel. Si recordamos que las tropas estadounidense volvieron a Irak en 2014 tras haber sido expulsadas en 2011 por la resistencia iraquí veremos que realmente nunca ha habido intención de retirar la tropas de Irak.

En 2011 la resistencia iraquí obligó a las fuerzas de ocupación estadounidenses a abandonar Irak. Estados unidos fue vencido militarmente en una guerra prolongada. El hecho de que el gobierno estadounidense no lograra llegar a un acuerdo con el gobierno iraquí de Maliki para mantener a los soldados estadounidenses en Irak es otro factor que legitimó a la resistencia y debilitó aún más la posición de Estados Unidos.

La situación cambió rápidamente en 2014 cuando muchas provincias iraquíes cayeron en manos de la organización transnacional y apoyada por la comunidad internacional Estado Islámico de Siria e Irak (ISIS, por sus siglas en inglés). A pesar de que Bagdad corría peligro de ser invadido por el ISIS, Estados Unidos se negó a proporcionar armas a Irak para defenderse (unas armas que el gobierno iraquí ya había pagado). Se utilizó caos que reinaba en Irak para presionar al gobierno iraquí para que “invitara” a las tropas estadounidenses a proporcionar una cobertura aérea al tiempo que las tropas de tierra entraban en el país con la función de adiestrar y asesorar. La presencia de las tropas estadounidenses carecía de fundamento jurídico al no existir un acuerdo sobre el estatuto de las fuerzas (SOFA, por sus siglas en inglés). Tras múltiples crímenes de guerra, violaciones de la soberanía iraquí y ataques a las fuerzas de seguridad iraquí que culminaron con las ejecuciones extrajudiciales de Abu Mahdi Al Muhandis y de Qasem Soleimani, el primer ministro iraquí Adel Abdel Mahdi rescindió esa invitación y pidió oficialmente la retirada de todas las tropas extranjeras del territorio iraquí. Para reforzar esta postura la mayoría del Parlamento iraquí aprobó una moción que pedía a las tropas estadounidenses abandonar Irak.

La autorización de la presencia estadounidense en Irak es informal y, de hecho, el gobierno iraquí la puede anular en cualquier momento.

Estados Unidos se ha negado a retirar sus tropas y ha llegado incluso a amenazara Irak con imponerle sanciones. Cuando Donal Trump era todavía presidente de Estados Unidos declaró que iban a imponer a Irak “unas sanciones que nunca han visto. Las sanciones impuestas a Irán parecerán débiles”. Estas declaraciones hay que entenderlas en el contexto del precedente histórico de la década de 1990, en la que Estados Unidos impuso a Irak unas sanciones extremadamente duras que causaron la muerte de un millón de personas en Irak. La imposición de sanciones significaría además que Irak perdería en acceso a la Cuenta de Ingresos del Petróleo de Irak en el Banco de la Reserva Federal de Nueva York, donde se guardan todos los ingresos de las ventas del petróleo iraquí. Estas amenazas no se quedan cortas al amenazar a Irak de hambruna.

Marketing

La negativa a acabar con la ocupación de Irak es una postura apoyada por ambos partidos que quedó demostrada una vez más con las últimas declaraciones del general estadounidense Frank Mackenzie, el cual afirmó en una entrevista concedida a Associated Press el 10 de diciembre de 2021 que en un futuro previsible Estados Unidos mantendrá los 2.500 soldados que mantiene actualmente en Irak, lo que significaría que la retirada de tropas a finales de este año se “completará” sin retirar un solo soldado. Como hemos mencionado antes, la ocupación solo replegará sus fuerzas después del 31 de diciembre. El general McKenzie declaraba más adelante en la entrevista que creía que los militantes del ISIS seguían suponiendo una amenaza en Irak y que el grupo “se iba a rehacer, quizá con otro nombre”. Estas declaraciones sirvieron para profetizar o, más bien, anunciar (dada la relación ambivalente entre Estados Unidos y los grupos terroristas wahhabíes financiados por el Golfo) que se aplicaría al ISIS la misma estrategia (1) de cambio de denominación.

El cambio de nombre de una fuerza militar es un viejo truco de propaganda que suelen utilizar Estados Unidos y sus intermediarios en los conflictos de la zona. Quizá el ejemplo histórico más conocido es entrar en Vietnam en calidad de “asesores” para después desencadena una guerra a gran escala. Más recientemente, en 2017, el general estadounidense Raymond Thomas afirmó lo siguiente acerca del hecho de que las YPG (siglas en kurdo de Unidades de Protección Popular) hubieran cambiado de nombre para convertirse en Fuerzas Democráticas Sirias: “Les contestamos literalmente: ‘Debéis cambiar de nombre. ¿Cómo queréis llamaros que no sea YPG?’ Aproximadamente un día después afirmaron que eran las Fuerzas Democráticas Sirias”. Y continuó. “Me pareció que era un golpe genial introducir en alguna parte el término democracia, les daba una cierta credibilidad” (1).

Esta estrategia se ha extendido a otros grupos terroristas, como la rama del ISIS Jabhat al-Nusrah, cuyo nombre se ha modificado en varias ocasiones en función de la evolución de los objetivos estratégicos. Había que cambiar el nombre de Jabhat al-Nusra para permitir a Turquía, miembro de la OTAN, seguir apoyando a este grupo en su lucha contra el gobierno sirio. Esta nuevo nombre era necesario porque Jabhat al-Nusrah está calificado oficialmente de grupo terrorista. Recientemente el jefe de este grupo terrorista, Abu Mohammed Al-Jolani, fue entrevistado por PBS vestido con un elegante traje de chaqueta con el fin de cambiar su imagen pública. Más o menos en el mismo momento el exenviado especial de Estados Unidos a Siria, James Jeffry, declaró que la organización de Jolani era una “baza” para la estrategia estadounidense en Idlib (2).

CENTCOM

Hay que analizar los comentarios del general McKenzie y darles la importancia adecuada. El hecho de estar al frente del Mando Central de Estados Unidos (CENTCOM, por sus siglas en inglés) convierte a este general en el principal mando estadounidense para Asia Occidental. Aunque Estados Unidos redujera de forma significativa o totalmente sus fuerzas en Irak, eso no significaría necesariamente reducir su capacidad de ocupación en Irak puesto que las tropas estadounidenses en este país forman parte del Mando Central de Estados Unidos, por el que son administradas. El CENTCOM tiene su base en Tampa, Florida, dispone de un cuartel general de vanguardia en la base aérea de Al Udeid, en Qatar, y dirige al ejército estadounidense en toda la zona. Cuando se creó en 1983, asumió las responsabilidades de la Fuerza Conjunta de Despliegue Rápido (RDJTF, por sus siglas en inglés). Esta fuerza se creó en el contexto de las “amenazas” contra intereses vitales relacionadas con la Guerra Fría. Se consideraba que esos intereses vitales de Estados Unidos eran un proceso que “contribuye a mantener la estabilidad regional y el flujo de petróleo del Golfo hacia el oeste” (3), lo que significa controlar el petróleo y los mercados, y proteger a los regímenes proestadounidenses. La RDJTF fue creada como una fuerza dotada de mucha movilidad. “No se creó para disponer de fuerzas específicas, sino para recurrir en tiempos de crisis a un conjunto central de recursos en función de la naturaleza de la amenaza, la ubicación geográfica y el tiempo disponible para el despliegue” (4).

Esto significa que incluso después de que se reduzcan las tropas en Irak, las tropas dentro de las fronteras de Irak podrían servir de base de avanzada para que el CENTCOM también pueda desplegar rápidamente sus fuerzas. Cada vez que Estados Unidos vea amenazados sus intereses en Irak podrá desplegar sus fuerzas desde las bases de los países vecinos hacia Irak y viceversa. El gobierno estadounidense afirma que mantiene en Irak unos 2.500 soldados estadounidenses, pero el despliegue de tropas se podría ampliar fácilmente trayendo tropas de cualquiera de los países vecinos que albergan bases estadounidenses, como Qatar, que acoge a más de 11.000 soldados, o Kuwait, que acoge a 13.000.

El Panorama del Presupuesto de Defensa de 2020, publicado por el Departamento de Defensa de los Estados Unidos en el marco del Presupuesto Anual de Defensa del Presidente, demuestra lo primero. En este informe se calculaba que en 2019 se iban a desplegar en Siria/Irak unos 5.765 soldados estadounidenses. Conviene destacar que el informe no diferencia entre Siria e Irak, ambos se consideran un solo y mismo despliegue. Y más sorprendente todavía, el informe calculaba el apoyo “sobre el terreno” en 59.463 soldados.

El informe concreta más adelante el término “sobre el terreno”: “Los fondos solicitados en esta categoría proporcionan refuerzos en caso de combate crítico y otras formas de apoyo al personal en Afganistán, Irak y Siria que provienen de unidades y fuerzas que operan fuera del campo de batalla. Esta categoría comprende también unos fondos destinados a apoyar otras operaciones realizadas fuera de Afganistán, Irak y Siria” (5). Esto significa que unos 60.000 soldados participaron en las operaciones en Afganistán (actualmente los 15.000 soldados que estaban en Afganistán está estacionados en otra parte), Irak y Siria.

Dado que Irak es una zona que está bajo la responsabilidad del CENTCOM, ni la cantidad de tropas ni su calificación reflejan la verdadera magnitud de la ocupación en Irak ni su capacidad. El CENTCOM ignora las fronteras de la naciones, y desplaza tropas y material dentro y fuera de los países sin consultar a los gobiernos correspondientes, por lo que el Eje de la Resistencia tenía razón al establecer el objetivo de expulsar a Estados Unidos de Asia Occidental.

Conclusión

Los objetivos estratégicos de Estados Unidos a día de hoy siguen siendo controlar el petróleo, los mercados y las rutas comerciales en Asia Occidental, pero los retos son ahora diferentes: la irrupción de China y Rusia en la zona como socios económicos y militares de los países del entorno ha cambiado la naturaleza del conflicto. La Estrategia de Defensa Nacional (NDS, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos de 2018 señalaba que su principal objetivo militar era la rivalidad de las grandes potencias con China y Rusia. Por consiguiente, la Iniciativa del Cinturón y de la Ruta (BRI, por sus siglas en inglés) de China se considera una amenaza estratégica. Eso explica por qué Estados Unidos está centrado en el control de las zonas fronterizas entre Irak y Siria, porque esta zona es una parte importante del BRI y sería indispensable en un Asia Occidental libre del dominio estadounidense.

El hecho de que Estados Unidos permanezca o sea expulsado de Irak no será el resultado de las conversaciones diplomáticas entre el gobierno iraquí y Estados Unidos. La Resistencia iraquí y sus socios regionales del Eje de la Resistencia expulsarán a Estados Unidos de Irak. Durante la primera fase de la ocupación estadounidense, de 2003 a 2011, una joven e inexperta Resistencia iraquí consiguió infligir fuertes pérdidas a la ocupación estadounidense y le obligó a retirase del país. Si actualmente Estados Unidos se niega a abandonar Irak, tendrá que hacer frente a una resistencia más experimentada y mejor equipada.

Notas:

(1) https://www.reuters.com/article/us-mideast-crisis-usa-ypg-idUSKBN1A62SS

(2) https://www.pbs.org/wgbh/frontline/article/abu-mohammad-al-jolani-interview-hayat-tahrir-al-sham-syria-al-qaeda/

(3) John Clementson, Mission Imperative: The Rapid Deployment Joint Task Force, Armed Forces, julio de 1983, pp. 260 – 265 y agosto de 1983, pp. 304 – 308

(4) Antill, P., Central Command, United States: CENTCOM (PETER ANTILL) http://www.historyofwar.org/articles/conceptscentcomlong.html

(5) https://comptroller.defense.gov/Portals/45/Documents/defbudget/fy2020/fy2020_Budget_Request_Overview_Book.pdf

Fuente: https://english.almayadeen.net/articles/analysis/will-us-troops-leave-iraq

Esta traducción se puede reproducir libremente a condición de respetar su integridad y mencionar al autor, a la traductora y Rebelión como fuente de la traducción.