Después de tres días de intensas negociaciones en la localidad egipcia de Sharm el-Sheikh, en el mar Rojo, Israel y el movimiento de resistencia palestino Hamás han llegado a un acuerdo sobre la primera fase de un plan negociado por Estados Unidos para poner fin a la guerra genocida que lleva dos años asolando la Franja de Gaza.
El acuerdo, calificado por el presidente estadounidense Donald Trump como «un gran día para el mundo árabe e islámico, Israel y Estados Unidos», representa el avance diplomático más significativo desde que comenzó la guerra de Israel contra Gaza en octubre de 2023, en la que han muerto más de 67.000 palestinos y millones de personas han sido desplazadas.
Las disposiciones clave
La primera fase del acuerdo incluye un alto el fuego —cuya fecha de aplicación aún no se ha determinado oficialmente— y la liberación de todos los prisioneros israelíes vivos en Gaza a más tardar el lunes.
Un líder de Hamás declaró a la Agencia France-Presse que el grupo liberará «de inmediato» a 20 prisioneros israelíes a cambio de la liberación de más de 2.000 detenidos palestinos, entre ellos 250 condenados a cadena perpetua y 1.700 arrestados desde el inicio de la guerra.
Una fuente palestina cercana a las negociaciones afirmó que el intercambio se llevará a cabo en un plazo de 72 horas desde la aplicación del acuerdo, y subrayó que «el acuerdo se alcanzó con la aprobación de las facciones palestinas».
La misma fuente confirmó que el acuerdo estipula la entrada de al menos 400 camiones de ayuda al día en Gaza durante los primeros cinco días del alto el fuego, con un aumento progresivo del número, y el regreso inmediato de los palestinos desplazados del sur a la ciudad de Gaza y al norte.
Citando a un funcionario de la Casa Blanca, ABC News informó de que se espera que la retirada militar de Israel a la línea de separación se produzca en menos de 24 horas una vez que el Gobierno israelí apruebe el acuerdo.
El retorno de los restos de aproximadamente 28 cautivos israelíes fallecidos se producirá de forma gradual, ya que algunos aún no han sido localizados.
El anuncio y la posición de Hamás
Trump anunció el acuerdo el jueves por la mañana en Truth Social, escribiendo que «todos los rehenes serán liberados muy pronto, e Israel retirará sus tropas a una línea acordada como primer paso hacia una paz fuerte, duradera y eterna». Agradeció a los mediadores de Catar, Egipto y Turquía, calificando el acontecimiento de «histórico y sin precedentes».
Hamas, por su parte, confirmó que había aceptado la propuesta tras lo que describió como «negociaciones responsables y serias llevadas a cabo por el movimiento y las facciones de la resistencia palestina en relación con la propuesta del presidente Trump en Sharm el-Sheikh».
En su detallada declaración, Hamas afirmó que las negociaciones tenían como objetivo «alcanzar un alto el fuego para detener la guerra genocida contra nuestro pueblo palestino y la retirada de la ocupación de la Franja de Gaza».
Declaró que el movimiento «anuncia el acuerdo alcanzado para poner fin a la guerra en Gaza, la retirada de las fuerzas de ocupación israelíes, la entrada de ayuda humanitaria y el intercambio de prisioneros».
El movimiento también expresó su gratitud hacia los mediadores —«los países hermanos de Catar, Egipto y Turquía»— y añadió que «valora los esfuerzos del presidente estadounidense Donald Trump por poner fin de forma permanente a la guerra y lograr la retirada total del ejército israelí de Gaza».
Al mismo tiempo, Hamás advirtió contra cualquier intento de Israel de eludir sus compromisos.
El grupo «pide al presidente Trump, a los países garantes del acuerdo y a las distintas partes árabes, islámicas e internacionales que obliguen al gobierno de ocupación (Israel) a aplicar plenamente las cláusulas del acuerdo y que no le permitan incumplir sus promesas o retrasar la aplicación de lo acordado hoy».
Al concluir su declaración, Hamás saludó «a nuestro gran pueblo en la Franja de Gaza, Jerusalén, Cisjordania, dentro y fuera de la patria, que ha mostrado una dignidad, un heroísmo y un honor sin precedentes», y afirmó que «los sacrificios de nuestro pueblo no serán en vano, y que seguiremos comprometidos con nuestra promesa y no abandonaremos los derechos nacionales de nuestro pueblo hasta que se logren la libertad, la independencia y la autodeterminación».
Mediadores y reacciones políticas
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Catar, Majed Al-Ansari, confirmó que ambas partes habían acordado «todas las disposiciones y mecanismos para aplicar la primera fase del acuerdo de alto el fuego en Gaza, que conducirá al fin de la guerra, la liberación de los detenidos israelíes y los prisioneros palestinos y la entrada de ayuda». Añadió que los detalles completos se darían a conocer más adelante.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, calificó el acuerdo como «un gran día para Israel» y agradeció a Estados Unidos «su compromiso con esta misión sagrada de liberar a nuestros rehenes». Dijo que el Gobierno y el gabinete de seguridad de Israel se reunirían hoy jueves por la tarde para ratificar el acuerdo, que se espera que se firme formalmente más tarde ese mismo día en Egipto.
Netanyahu también invitó a Trump a dirigirse al Parlamento israelí, una propuesta que el presidente estadounidense dijo estar «dispuesto a aceptar».
La noticia del alto el fuego provocó júbilo en Gaza, donde los residentes salieron a las calles en medio de escenas de alivio e incredulidad.
Reacción internacional y cuestiones sin resolver
El secretario general de la ONU, António Guterres, acogió con satisfacción el acuerdo y pidió a todas las partes que «cumplan plenamente» sus términos. Desde la India, el primer ministro británico, Keir Starmer, lo describió como un momento de «profundo alivio» e instó al «levantamiento inmediato de todas las restricciones a la ayuda humanitaria vital para Gaza».
A pesar del avance, siguen sin resolverse cuestiones clave, entre las que destaca quién gobernará Gaza después de la guerra. El plan más amplio de 20 puntos de Trump insinúa que una Autoridad Palestina reformada asumirá finalmente el control administrativo, mientras que las fases posteriores prevén el desarme de Hamás y la formación de un gobierno tecnocrático bajo la supervisión internacional de un Consejo de Paz propuesto y liderado por Estados Unidos.
En una declaración del 4 de octubre, aunque afirmaba «su disposición a entablar negociaciones de inmediato», Hamás afirmó que «las demás cuestiones mencionadas en la propuesta del presidente Trump sobre el futuro de la Franja de Gaza y los derechos inherentes del pueblo palestino están vinculadas a una posición nacional global y se basan en las leyes y resoluciones internacionales pertinentes».
«Deben debatirse en un marco nacional palestino global. Hamás formará parte de él y contribuirá a él con plena responsabilidad», añadía la declaración.
El coste de la guerra y el camino a seguir
Desde octubre de 2023, la guerra de Israel contra Gaza ha causado la muerte de más de 67.000 palestinos, la mayoría de ellos civiles, y ha dejado más de 170.000 heridos, entre ellos unos 20.000 niños. Barrios enteros han quedado reducidos a escombros, con miles de personas aún desaparecidas bajo los escombros.
La guerra se desencadenó tras la operación de resistencia palestina del 7 de octubre de 2023, que causó la muerte de unos 1.200 israelíes y provocó la captura de 251 rehenes en Gaza. Cientos de soldados israelíes también han muerto en los combates posteriores.
A petición de Trump, Israel ha reducido la intensidad de sus bombardeos, aunque continúan los ataques aéreos limitados. Las autoridades sanitarias de Gaza informaron de ocho muertos en las últimas 24 horas, la cifra más baja en semanas.
Texto en inglés: The Palestine Chronicle, traducido por Sinfo Fernández.