Hace algunos días publiqué un artículo bajo el título «Periodismo de Barrio»: Una idea muy buena y fructifera, a primera vista», con la intención de dar mi opinión acerca de una actividad pública realizada en Berlín con diez periodistas cubanos que habían participado en un Workshop organizado por la Fundación Panter del periódico TAZ. Antes […]
Hace algunos días publiqué un artículo bajo el título «Periodismo de Barrio»: Una idea muy buena y fructifera, a primera vista», con la intención de dar mi opinión acerca de una actividad pública realizada en Berlín con diez periodistas cubanos que habían participado en un Workshop organizado por la Fundación Panter del periódico TAZ.
Antes de hacerlo público se lo envié a la responsable del proyecto «Periodismo de Barrio«, Elaine Díaz Rodriguez, que había participado en el panel en representación de ese grupo de cubanos, y a quien había conocido en Berlín. Mi objetivo era intercambiar opiniones y esclarecer algunos puntos. En mi intervención en la actividad había manifestado mi preocupación por el hecho de que los jóvenes periodistas regresaran a Cuba con una idea edulcorada de lo que es el periodismo no solo en Alemania sino también en Europa. Quería evitar al mismo tiempo cualquier tipo de mal entendido.
No fue jamás mi intención trasmitir una una imagen negativa del trabajo realizado en Berlín por parte de esos cubanos. No obstante, me daba la impresión de que no tenían idea de las verdaderas intenciones de ese Workshop, al que sus anfritiones habían difrazado de «intercambio».
Elaine no respondió a mi llamado. Esperé cuatro días antes de publicarlo. Lo que vino después es ya conocido. A través de su perfil de Facebook y otros sitios se desató una campana de injurias y calumnias, contra mí persona por haber escrito el artículo y contra Iroel Sanchez por haberlo publicado en su blog. Elaine me acusó practicamente de mentiroso, tergiversador y calumniador.
No me explico cómo fue capáz de hacerlo si ella sabía que yo no había mentido, sobre todo lo que respecta a la entrevista que ella había dado al periódico Taz. Como se lo demostré en detalle en uno de mis mensajes a Elaine que ella no ha publicado.
Tanto Elaine como sus anfritiones en Berlín han tratado de negar desde un inicio todo tipo de vínculo entre Reporteros Sin Fronteras y el Workshop.
Por esta razón pongo a consideración de ustedes el Informe de rendición de cuentas de la Fundación Panter a sus miembros que se puede ver en internet en formato PDF. En el mismo se aclaran en detalles las verdaderas intenciones de la Fundación Panter y el periódico TAZ.
Bajo el título «Con poco dinero, lograr mucho: Ahora Cuba» la señora Konny Gellenbeck, miembro de la directiva de la Fundación nos explica claramente cuál es el objetivo de ese tipo de Workshop y cuáles instituciones cooperan para lograr los mismos.
Fíjense, por favor, en los países a los que están dirigidos este tipo de proyectos. El texto se puede encontrar en la página 37 y 38 de dicho documento:
http://download.taz.de/Mitgliederinfo25_web.pdf
«Con poco dinero, lograr mucho-ahora Cuba»
En la la foto que lo acompaña se puede ver al presidente Raúl Castro y Barack Obama dándose la mano en la VII Cumbre de las Américas en Panamá.
El texto dice:
«Una foto recorre el mundo y a nosotros nos electrificó, porque la Fundación Panter está por el diálogo y el entendimiento, y si el presidente de Cuba y el de Estados Unidos se dan la mano, eso constituye para los periodistas cubanos, una señal para arrancar.
«Para dar inicio a un proyecto en ese sentido la Fundación Panter invitó a diez periodistas cubanos para participar en un Worshop en Berlín.
«Además de representantes de los medios tradicionales pudimos lograr invitar a representantes del «periodismo emergente. Periodistas que con sus proyectos sociales lograron desarrollarse dentro del marco político de las las leyes que controlan los medios de comunicación en Cuba.
«Desde el 2013 nuestra fundación ha desarrollado este tipo de proyecto con mucho éxito. Cerca de 150 periodistas de Rusia, Ucrania, República de Moldavia, Georgia, Armenia, Azherbaizhan y Mianmar han participado como invitados.
«El objetivo del Workshop es el de trasmitirles a los invitados, que provienen de países donde la diversidad periodística y la libertad de prensa se encuentran amenazadas, los conocimientos acerca del funcionamiento de los medios de difusión y las condiciones de trabajo del periodismo en Alemania».
Después la señora Gellenbeck se refiere a Reporteros sin Fronteras: «En Reporteros Sin Fronteras tenemos un socio de gran experiencia». Luego hace un llamado para recaudar fondos.
En la página 38 de ese informe se detallan los proyectos que han sido financiados por la Fundación Panter: Dos Workshops de ONGs, tres Workshops para jóvenes interesados en el periodismo, una pasantía, un Club de los miércoles mensual, un Workshop Armenia/Turquía, dos Workshops con países de Europa del Este, el Premio Taz, un Cuba Workshop y el proyecto Refugium.
Según este documento los proyectos internacionales se realizan en cooperación con: «El Ministerio de Relaciones Exteriores (Auswärtigen Amt), la Fundación Zeit, la Fundación Marion Dönhoff, el German Marshall Fond y Reporteros Sin Fronteras.»
Resulta increíble que un periódico que se presenta a sí mismo como de izquierda liberal coopere con Reporteros Sin Fronteras, una organización de difusa reputación a la que diversos medios y organizaciones acusan de estar a sueldo de la CIA. Uno de sus fundadores, Robert Menard, acusado de ser agente de la CIA, es actualmente el alcalde de la localidad de Béziers por el partido nacionalista conservador Frente Nacional, comandado por Jean Marine Le Pen.
Saque usted sus propias conclusiones.