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El cambio climatizado

Fuentes: Rebelión

Claro que la actividad humana está causando daño a los ecosistemas del planeta. Aparte de que se trata del inmoral genocidio de La Vida en general es trágicamente un suicidio para el mismo colectivo humano que lo causa. Está claro que nuestros sistemas de producción, distribución y consumo están diseñados catastróficamente y lo que estamos […]

Claro que la actividad humana está causando daño a los ecosistemas del planeta. Aparte de que se trata del inmoral genocidio de La Vida en general es trágicamente un suicidio para el mismo colectivo humano que lo causa. Está claro que nuestros sistemas de producción, distribución y consumo están diseñados catastróficamente y lo que estamos haciendo con la naturaleza es una estupidez y una barbaridad. Con tan claras evidencias que algo tiene que cambiar, ¿para qué una teoría de un Cambio Climático?

Hasta ahora, los principales propietarios y más económicamente beneficiados de los actuales sistemas siempre insistían que los daños ecológicos eran males necesarios para el progreso. Como las víctimas colaterales de las guerras actuales, los millones de «indios» exterminados que impedían la instalación de los sistemas de producción norte americanos o los Subsaharianos secuestrados y esclavizados, siempre en nombre de «El Progreso». Evidentemente, el genocidio, siquiera humano, nunca ha sido un problema «moral».
Ahora, los propietarios y privilegiados reconocen que algo tiene que cambiar subiéndose al tren de la teoría del Cambio Climático con el único fin de evitar planteamientos en más profundidad sobre las causas de los problemas, sobretodo morales. No importa la barbaridad, la esclavitud de la naturaleza, el genocidio, la deforestación, la guerra, la enfermedad, el hambre, ni la muerte. Lo único que importa es el «Cambio Climático».

Por eso los mega-mangantes de las mega-empresas y sus mega-lobbies y mega-políticos ahora hacen suya La Teoría del Efecto Invernadero. Ecologistas y oenegés ya pueden estar tranquilos; los super-ricos ya son conversos a la causa. Seguro, ¡y los Marines en Iraq están ahí en son de paz!
La Teoría del Cambio Climático ha sido secuestrada y convertida en un cambio de marketing. Sea cierta o no, la teoría es innecesaria e irrelevante a la situación. En fin, no es un medio, sino una distracción.

No es de extrañar que este cambio de actitud de parte del «establishment» coincida con la necesidad de provocar otra Guerra Mundial e iniciar una nueva civilización marcial global. Está diseñada para censurar a los miles de pequeñas empresas e individuos que actualmente están investigando y descubriendo tecnologías que prometen descentralizar y abaratar dramáticamente los sistemas de producción sobretodo de la energía. Las verdaderas energías limpias y renovables no son las de que hablan y ya controlan Al Gore, Tony Blair, Ruiz Gallardón o ACCIONA.

Lo que no te cuentan, los nuevos evangélicos del Efecto Invernadero, es que están perdiendo el control sobre la producción de energía y todos los consumidores ya podríamos ser también productores de energía. La energía ha sido el oro del siglo veinte, pero, en el veintiuno la tendencia es hacia la descentralización absoluta y la autonomía energética de cada vivienda, cada vehículo, cada aparato, cada persona. Los descubrimientos e inventos están saliendo a luz ahora mismo. El establishment desesperadamente intenta controlar la situación con teorías, terrorismo, guerras y policía sabiendo que los días de nuestra dependencia de ello están contados. Consecuentemente, fomentan teorías como la del Efecto Invernadero y «terrorías» como Al Qaeda. Sin embargo, el único cambio climático es cambiar todo para que nada cambie.

De todas maneras, hay una sencilla manera de llegar a una conclusión, de una vez por todas, de que el Calentamiento Global es debido al Efecto Invernadero o a otro efecto «cósmico». Solamente hace falta saber si en los demás planetas del Sistema Solar también aumentan, o no, las temperaturas. Si el aumento de las temperaturas que estamos experimentando en La Tierra coincide con la de nuestros planetas hermanos sería una clara indicación de que El Calentamiento Global es debido a un cambio o ciclo «cósmico» y no por el llamado Efecto Invernadero.

También sería definitivo incluir datos sobre cambios en la fuerza de las magnetosferas de nuestro y demás planetas del Sistema Solar. Ya que la magnetosfera es lo que regula la penetración de las infrarrojas y demás energías solares y cósmicas. El debilitamiento de este escudo magnético sería una causa clara del Calentamiento Global.

Además, se pueden detectar y medir un aumento en rayos cósmicos provenientes del centro de la galaxia que se sabe, entre otras cosas, provocan la formación de nubes, como las que se forman actualmente de las estelas de los aviones y a diario acaban cubriendo nuestros cielos. Y sobretodo, no olvidemos el papel que hace el Sol. ¿Qué hay del Sol? ¿Es que el Sol no influye en la temperatura terrestre? ¿No podría el Sol estar pasando por un ciclo de aumento de emisiónes de fotones, protones, infrarrojas, ondas electromagnéticas, etc..?

Toda esta información está disponible. Los astrofísicos y geólogos tienen acceso a los datos necesarios para poner fin a este debate. Si esta información serviría para explicar científicamente la polémica teórica, ¿por qué está siendo totalmente ignorada?

Es verdaderamente irónico, que tengamos observatorios radiológicos y sondas espaciales midiendo minuciosamente todos los cambios planetarios, solares y galácticos y cuando nos enfrentamos a una crisis terrestre excluimos, ignoramos, hacemos caso omiso al resto del universo. De repente, La Tierra vuelve a ser plana y de nuevo el centro del universo pre-Galiano.

Recordemos, no es necesariamente «La Industria» o «La Economía» las que se resisten al cambio sino que son «Esta Industria» o «Esta Economía» las que cambian la resistencia. Ya está emergiendo una nueva economía. No tiene nada que ver con nada nuevo de que hayamos podido escuchar en los medios, ni de izquierdas ni derechas. Se trata de pequeñas empresas con nuevas y diversas tecnologías energéticas limpias, baratas e inagotables. Pero, que tienden a descentralizar los sistemas de producción y distribución de energía ahora centralizados.

El Nuevo Holocausto

Según Edward M. Kerschner, jefe del departamento de Investigación y responsable de El Estudio de Citigroup Sobre Las Consecuencias Empresariales del Cambio Climático, «son muchas las empresas que se beneficiarán de las tendencias y oportunidades que está creando esta nueva situación». En total, el estudio identifica a 74 mega-compañías de 18 países, entre las que se encuentran varias españolas. Sin embargo, «esto no significa que este país esté tomando responsabilidades, no es una cuestión social. Se trata de negocios, y el objetivo de cualquier empresa es conseguir beneficios», continúa Kerschner. «Como compañías, han de beneficiarse de los cambios que está provocando la percepción de la nueva situación climática por parte de la gente, los inversores y las propias empresas».

Seis empresas españolas aparecen en el informe: Acciona, Aguas de Barcelona, Ebro Puleva, ENCE, Gamesa y Iberdrola, como las mejor posicionadas en la carrera hacia el liderazgo de las nuevas oportunidades de negocio que trae consigo el cambio climático. Según explica Kerschner, «el 59% de los europeos afirman no estar dispuestos a pagar más por energías menos contaminantes. Es una cuestión, por tanto, con importantes implicaciones económicas, no sólo para las empresas, sino también para los ciudadanos. Todo lo no contaminante conlleva un coste extra para las empresas que posteriormente también será trasladado a los ciudadanos.» Lo que Kerschner quiere decir es, para cambiar todo para que nada cambie nos va a costar caro los impuestos para subvencionar a las mega-empresas.

El presidente del Gobierno Español ya anunció que Una Verdad Incómoda lo verá todo escolar español obligatorio e inmediatamente. Faltará poco para que el Rey decrete la necesidad de prohibir, como en el caso del «Holocausto Judío», desestimar la validez del Efecto Invernadero. Los sistemas de producción de los Medios de Comunicación ya estrenan el Nuevo Holocausto del Siglo 21.

Por el momento la producción de biocombustibles aumentará la demanda de cultivos como el maiz, provocando la escalada de precios del alimento básico y la consecuente crisis social en países «sureños». La ya subvencionada energía nuclear será incluso más «favorecida». Las montañas desforestadas servirán de parques eólicos para mega-empresas «verdes». Las selvas tropicales que todavía permanecen serán transformadas en plantaciones de palma de aceite. Todo en nombre de «La Ecología».
Queridos hermanos terrícolas, Izquierdas, Derechas o Verdes, sea lo que sea el resultado de Las Teorías y Terrorías, todo dependerá de nosotros y será lo que merecemos.

Por el momento los mega-monopolios nos van a «desinfotener» con biodieseles, molinos, y esquemas solares. Será un momento muy breve. Pueden detener la revolución pero no la evolución. Eso sí, resulta para el Señor Gore, Una Verdad Incómoda.

Gregory William Grisham Vento
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