Recomiendo:
0

El hielo del casquete polar ártico tiene una grieta del tamaño del Reino Unido

Fuentes: www.archipielagonoticias.com

Unas imágenes tomadas por satélite revelado la existencia de grietas en el casquete polar ártico de una superficie superior a la de Reino Unido, según ha informado la Agencia Espacial Europea (ESA). «Esta situación es diferente a todo lo visto en las anteriores estaciones de máximo deshielo» de finales de verano, señaló Mark Drinkwater, de […]

Unas imágenes tomadas por satélite revelado la existencia de grietas en el casquete polar ártico de una superficie superior a la de Reino Unido, según ha informado la Agencia Espacial Europea (ESA).

«Esta situación es diferente a todo lo visto en las anteriores estaciones de máximo deshielo» de finales de verano, señaló Mark Drinkwater, de la Unidad de Océanos y Hielos de la ESA.

Las imágenes, tomadas entre el 23 y el 25 del mes de agosto, revelan que la falla se extiende desde el archipiélago noruego de Spitzberg hasta el Polo Norte a través del Artico ruso.

Además, «confirman» que las concentraciones de hielo registradas en la superficie comprendida entre Spitzberg, el Polo Norte y las islas más septentrionales de Rusia, las Sévernaya Zemlya, son «mucho menores» que las observadas en los últimos años, subrayó la ESA.

«Es fácilmente imaginable que un barco pudiera haber alcanzado sin dificultad el Polo Norte» desde Spitzberg o desde el norte de Siberia «a través de lo que normalmente es una capa de hielo», dijo Drinkwater.

Entre un 5 y un 10% de los hielos árticos perennes se fracturaron a causa de las últimas tormentas estivales ya que tenían un menor espesor y por eso eran más frágiles, según la ESA.

La agencia recordó que la extensión mínima de hielo en el Artico, que se registra al fin del verano, alcanzó en 2005 un «mínimo histórico» de 5,5 millones de kilómetros cuadrados, frente a los aproximadamente ocho millones de kilómetros de inicios de los ochenta.

Estos cambios son atribuidos generalmente al efecto invernadero, añadió.

«Si continúa esta tendencia anómala», el paso por la ruta marítima del norte entre Europa y Asia «se abrirá durante mayores intervalos de tiempo, y se puede pensar que veremos intentos de navegar alrededor del mundo en barco por el Océano Artico en verano en los próximos diez a veinte años», según Drinkwater.