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Huida hacia adelante del ente israelí junto al imperio

El robo de Palestina o la nada

Fuentes: Rebelión

En éstos tiempos en que el jefe del régimen imperial es caracterizado como un enfermo mentiroso por psicólogos, psiquiatras y analistas políticos (se le han llegado a contar una media de 6 mentiras diarias), ha perdido interés la localización de personajes con el mismo diagnóstico, a sabiendas de la imposibilidad de encontrar casos semejantes. Los […]

En éstos tiempos en que el jefe del régimen imperial es caracterizado como un enfermo mentiroso por psicólogos, psiquiatras y analistas políticos (se le han llegado a contar una media de 6 mentiras diarias), ha perdido interés la localización de personajes con el mismo diagnóstico, a sabiendas de la imposibilidad de encontrar casos semejantes. Los mismos miembros de su parlamento le declaran mentiroso sin remedio, el último en decirlo ha sido el gobernador de California, Jerry Brown, que ha dejado su afirmación por escrito: «Trump está mintiendo sobre la inmigración, mintiendo sobre el crimen, mintiendo sobre las leyes de California.»

Hay que ir a la Historia para localizar a mentirosos e hipócritas de dimensiones tan grandes, Hitler, Mussolini, Franco, Churchill, Pinochet, Videla, Ríos Montt, … Theodor Helzr, Ben Gurion, … Netanyahu, y es que los mentirosos y cínicos políticos en la historia de EEUU y su extensión del ente sionazi forman reguero, nadie llega a la cumbre de Trump y Netanyahu hoy. Esa podredumbre que corre por la sangre del imperio, transmitida en la creación de las dictaduras como se transmite a la descendencia, toma cuerpo público en sus representantes.

Si el caso de Trump es ejemplo de engaño e hipocresía política que ha pasado a los estudios avanzados para el conocimiento universal, su descendencia corre tras él: Niki Haley, la trumpista empleada en la ONU, miente al estilo mafioso y amenaza como una mafiosa, y lo hace delante de la representación de los gobiernos del mundo entero, y los miembros de todas las delegaciones se quedan perplejos: declara que es el Derecho Internacional el que permite a los sionistas matar a la población palestina indefensa, niñas, niños, mujeres, hombres, gentes que se manifiestan sin causar ningún riesgo para el ente neocolonial, y lo hacen en Defensa de un derecho de todos los pueblos: volver a su hogar. Y la tal Niki declara que si en Naciones Unidas se pone obstáculos legales a la actuación de sus tropas o las de su criatura monstruosa, su régimen acabará por deshacer la ONU, y la legalidad será, a partir de entonces, la que ellos dos, las dos dictaduras en una sola, impongan a los 7.000 millones de habitantes del planeta Tierra.

La banda dice tales cosas porque sienten el peligro de que la desobediencia que empieza a marcar estos tiempos se acabe consolidando, y EEUU-Israel no pueda mantenerse como el imperio del mal. Y no sólo eso, sino que detrás viene el juicio que se les haría, porque Nuremberg 2.0 les espera; los dos en uno conforman el aparato más terrorista que ha existido. Si EEUU en su historia de 240 años tan sólo ha tenido ¡2! años de paz, la criatura monstruosa que alimenta, en sus 70 años no ha tenido ni un minuto de paz.

¡Qué burguesía imperial tan bárbara, tan vieja, tan sin civilizar, tan terrorista que comete genocidios, crímenes de Lesa Humanidad, que impone regímenes xenófobos, …!

Ahora es Mike Pompeo, empresario, jefe de la CIA, esa organización especializada en mentir, elegido por Trump para que ejerza de secretario de Estado, quien además de amenazar a los antiimperialistas de Sudamérica, Venezuela, Bolivia, Cuba, … ya ha hecho pública una de esas especialidades de la CIA, la mentira, pero ha resultado increíble: ha dicho a Corea del Norte que se desarme y EEUU respetará y protegerá el país, y para empezar lo sacará de su lista de países que propagan el terrorismo. Como de todos es sabido el problema de EEUU no es Corea sino China, y mientras Corea esté en medio le va a ser difícil bloquear y acceder a China.

Pompeo busca la jugada maestra, pero Corea del Norte sabe lo que le está esperando, porque conoce al régimen imperial, ya sufrió en la guerra los crímenes y el genocidio a que fue sometida por EEUU, y aprendió. La carta siguiente a la que ahora enseña el secretario de Trump y agente de la CIA, contiene la esencia natural del imperio.

Es muy llamativa la reunión de un equipo tan uniforme de mentirosos políticos, tan agresivos, en un espacio tan pequeño como el de la Casa Blanca, donde otro destacado en esas lides entra viviendo de las mentiras en la ONU, de allí poco menos que fue echado por mentiroso, y de las falsedades distribuidas para emprender la guerra contra Iraq, es el tal Borton, nazi confeso y denunciado por estafador, apostador de guerras eternas, ahora grita que se bombardee Oriente Medio, y en su punto de mira aparece Irán, y que se bombardee Corea del Norte. A sus crímenes les llama «guerras preventivas», y con esa modalidad tiene la intención de enterrar a quienes no besan las botas de los mercenarios que comanda. El imperio se les cuartea y les causa pavor su posible derrumbe. Nuremberg 2.0.

A todo ésto, aún en el aire el revuelo internacional por los últimos 62 asesinatos y 3.000 heridos palestinos, entre los asesinados se incluyen un niño de 8 meses y otros niños y niñas de muy corta edad, -62 y 3.000 el último día de la Gran Marcha del Retorno, elevando las dos cifras a más de 110 y más de 11.000- por lo que el Portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas en Ginebra, Rupert Colville, dijo estar en shok al ver las grabaciones de la matanza causada por el ejército sionazi que coloniza Palestina, habiendo empleado munición de guerra que incluye proyectiles prohibidos como las balas mariposa y las balas explosivas. No hay más que oír la entrevista en la radio pública belga RTBF a la embajadora sionazi: le pregunta el locutor: «Considera que los ocho niños y el bebé de 8 meses que han matado eran terroristas? Respuesta de la sionazi Simona Frankel: «Sí, todos lo son».

El primer ministro belga y el ministro de Asuntos Exteriores de Belgica se han escandalizado por semejante declaración y han pedido una investigación internacional de la ONU. El ministro de Exteriores además acertó a decirle: «Le recordamos a la embajadora la necesidad de que respete las normas internacionales».

Como el ente sionazi tiene miedo a la justicia, mata y lloriquea, y desde el día 14 bombardea con la aviación y la artillería tanquista poblaciones de Gaza. En la noche del 16 al 17 los sionazis han bombardeado el este y el occidente de la cárcel de Gaza, han dirigido los proyectiles contra las poblaciones de Beit Lahiya y de Yabalía, ¿y algún representante político caerá en shok al ver o saber de las víctimas?

Los desprecios al Derecho Internacional y a la prohibición expresa por ilegal del traslado de embajada a Jerusalén que declaran es la capital de Israel, esos desprecios, esos desafíos, aparecen en los gobiernos más miserables y serviles que el imperio ha encontrado: Guatemala, Paraguay, Chequia, Bulgaria, Rumanía y Austria; en algún caso con oposición de miembros de esos gobiernos por verse metidos de hoz y coz por su jefe, como es el caso de Guatemala en la que la Corte Suprema de Justicia declara la suspensión del traslado de embajada. Pero, ¿puede decirse algo de la influencia política de esos esbirros? La presencia de semejantes gobernantes nos dice el nivel de confianza que el imperio y su hijo adoptivo encuentran en el conjunto de la humanidad, luego las amenazas y las mentiras flagrantes del trumpismo sólo manifiestan su debilidad. Aunque los grandes sólo alzan la voz y sí comercian con ellos, ninguno se atreve a acompañarlos. El bloque imperial tiene los dientes romos.

Cuando, a pesar de todo, no se disponen a llevar sus embajadas a Jerusalén, a repetir los insultos del régimen estadounidense, y además dicen protestar por los crímenes de guerra en Gaza, es que prefieren la imagen de seres considerados, puesto que otean los crímenes pueden ser mayores y verse en la misma condena histórica a la que van aquellos. Si llegase a hacerse mayor la distancia entre el imperio y su monstruo con los demás occidentales, europeos sobre todo, veríamos más cercano el empequeñecimiento del imperio. Tenemos delante una prueba que nos dará la medida del momento, el llamado «Acuerdo del siglo», por el que Jerusalén ha sido presentada como la capital de Israel, y se ha estrenado asesinando a sangre fría, como si fuese un sacrificio genocida a su dios. El «Acuerdo del siglo» no ha dado resultado, el frente occidental se ha quebrado, la causa ha sido la Gran Marcha del Retorno a Palestina de los refugiados, la capacidad de lucha y resistencia de la población palestina ha cuestionado el proyecto sionazi, y ha conmovido a los pueblos del mundo, que a pesar de las ocultaciones del ejército encargado de la información del imperio, no ha podido evitar que se les oiga su voz y se vea como los colonialistas asesinan.

Ha sido el pueblo palestino quien ha hecho fracasar la operación imperial sionazi. Ha sido el pueblo palestino el que ha conseguido que las fuerzas del gran capital no estadounidense tomen precauciones, aun habiendo premiado días antes al monstruo israelí en un festival de música comercial.

Cuanto más empuja el pueblo palestino más avanza y su siembra produce. El «Acuerdo del siglo», la semilla del diablo, la mayor de las mentiras del momento, se ha empezado a secar, no puede crecer.

Si las fuerzas populares palestinas en resistencia viesen crecer a sus aliados, notasen los apoyos, si se derrotase el bloqueo sionazi a Gaza, si … , aumentaría la fuerza de ese pueblo tan sacrificado, y lograría los objetivos con los que nos viene llamando desde hace 70 años.

Eso le da tanto miedo al ente israelí que huye hacia adelante junto al imperio. Evitando esa derrota y sus consecuencias buscan el dominio de Oriente Medio, es por lo que se empeñan en robar Palestina primero, tener un terreno donde sentirse seguros, para después continuar la conquista y volver a ser el imperio que ven que pierden. De no conquistar Palestina saben que estarán condenados porque, entre otras cosas, sus mentiras habrán muerto secas.

Ramón Pedregal Casanova es autor de los libros: «Gaza 51 días», «Palestina. Crónicas de vida y Resistencia», «Dietario de Crisis», «Belver Yin en la perspectiva de género y Jesús Ferrero», y «Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios». Presidente de la Asociación Europea de Cooperación Internacional y Estudios Sociales AMANE. Miembro de la Comisión Europea de Apoyo a los Prisioneros Palestinos.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.