Israel comenzó ayer a liberar a 87 presos palestinos en una medida que fue presentada como una «muestra de apoyo» al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, con motivo del Ramadan y que se enmarca en los preparativos de la conferencia internacional organizada por George W. Bush. Sin embargo, esta medida únicamente afecta a […]
Israel comenzó ayer a liberar a 87 presos palestinos en una medida que fue presentada como una «muestra de apoyo» al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, con motivo del Ramadan y que se enmarca en los preparativos de la conferencia internacional organizada por George W. Bush.
Sin embargo, esta medida únicamente afecta a una parte ínfima de los 11.000 presos políticos que se encuentran en las cárceles sionistas. La mayor parte de los liberados son miembros de al-Fatah, el partido de Abbas, aunque también hay algunos integrantes del Frente Popular de Liberación de Palestina (FPLP) y del Frente Democrático de Liberación de Palestina (FDLP). Todos ellos tenían condenas de cortas duración, ya que ninguno había sido condenado por acciones armadas y se encontraban en la cárcel de Ketziot, situada en el desierto del Neguev, en el extremo sur de Palestina.
Durante la jornada de ayer, Israel liberó a los 57 presos originarios de Cisjordania, pero no a los de 30 de Gaza, ya que el presidente Shimon Peres -ganador del premio Nobel de la Paz- rechazó firmar hasta la noche la ratificación de las órdenes de libertad con el argumento de que estaba muy ocupado porque tenía que recibir a una delegación india, según informó la agencia palestina Ma’an. Peres justificó este retardo señalando que en el caso de los presos de Gaza hay «cuestiones legales más complicadas» que las de los cisjordanos. Los presos saldrán hoy.
Al conocerse esta noticia, el pesar se adueñó de los familiares de los presos que se encontraban esperando en el paso fronterizo de Erez desde primera hora de la mañana. En este checkpoint un soldado sionista disparó contra un adolescente de 14 años, provocándole heridas de gravedad.
El pasado mes de julio, Israel liberó a otros 250 presos con condenas menores, en otra aparente maniobra de apoyo a Abbas, pero en las semanas siguientes detuvo a un número superior de personas, por lo que el número de presos políticos aumentó.