Recomiendo:
0

Rosa Aguilar, la niña que jugaba a ser ministra

Fuentes: Rebelión

Pertenece la flamante ministra de todos los medios a la misma generación que yo. A la del 57. Una que es heredera del mayo francés, ahora que sus nietos le cortan la gasolina a Sarkozy, y es casi la última del tardo franquismo. A caballo pues entre dos mundos, con algo en común: el ansia […]

Pertenece la flamante ministra de todos los medios a la misma generación que yo. A la del 57. Una que es heredera del mayo francés, ahora que sus nietos le cortan la gasolina a Sarkozy, y es casi la última del tardo franquismo. A caballo pues entre dos mundos, con algo en común: el ansia de libertad y de cambio social.

Recuerdo a la ministra cordobesa en las agitadas aulas de la Facultad de Filosofía y Letras, donde ella estudiaba Derecho y yo Historia, a finales de los 70. Ya tenía madera de líder y subida a la tarima trataba de apaciguar los ánimos rebeldes de los universitarios que no queríamos El Pacto de la Moncloa ni la transición Borbónica. Calmaba al auditorio con una dialéctica tan desbordante como hueca. Militaba en el PCE y ya entonces se ganó el apelativo de «revisionista». Es decir aquellos que para hacer posible el tránsito hacia la democracia parlamentaria, renunciaban a los postulados comunistas, más proclives a la llamada ruptura democrática.

Sin querer trazar una exahustiva biografía de la ministra, tiro del baúl de los recuerdos porque en edades tempranas, la ex Consejera de Obras Públicas soñaba con llegar algún día a sentarse en la Moncloa. El resto, sin embargo, imaginábamos otro mundo posible, recogiendo el testigo de nuestros primos más cercanos del 68 y de aquellos más lejanos de Berkeley, Kerouac y Bukowski. Luego, Derecho se marchó de la sede del antiguo Hospital del Cardenal Salazar, que compartía con Historia, y ya le perdí la pista, hasta que me la encontré al cabo de los años de Concejala de Disciplina Urbanística con Anguita.

Hoy día de su nombramiento, he recordado que la ministra ha sido distinguida en dos ocasiones por Ecologistas en Acción con el nada prestigioso premio Atila. Uno en 2006, junto al malayo Sandokán, siendo alcaldesa de Córdoba, por su contribución a la destrucción del medio ambiente, y en 2010, ya como Consejera de Obras Públicas por diseñar y aprobar la ronda norte de Córdoba, al considerar que la vía «es muy costosa, destruye espacios públicos y abre heridas en la ciudad».

La titular de los todos los medios, llega al Ministerio tras haber arruinado una humilde rosaleda de pueblo en un jardín decimonónico cordobés, escenario donde los fotógrafos retratan las poses glamourosas de las novias y la noñez de los novios. Ahí quiso, la entonces alcaldesa, que se levantara una modélica, singular, referente, multitemática, multimoderna, funcional biblioteca, y algunos epítetos más que no recuerdo. Una obra a financiar por el Ministerio de Cultura. Pero como los recortes presupuestarios para reducir el déficit, que exigen los bancos, las bolsas y las empresas, para desmantelar el estado y que sea la cosa privada la que explote la liquidación de lo público, afecta sobremanera a ese Ministerio, pues no habrá biblioteca.

 

Solar donde había una rosaleda en los jardines de la agricultura de Córdoba

Ahora, como te enseño, donde antes había una rosaleda hay escombros, jaramagos y basura. Esa es la herencia que nos deja la Ministra de todos los medios. Su recuerdo en la ciudad que la vio nacer.

Pero además nos lega una fábrica de cementos en pleno casco urbano que ni ella, ni sus antecesores de IU, fueron capaces de exigir su traslado, envenenando durante décadas a los barrios periféricos de la instalación. La elegida por ZP, no ha quitado los coches del casco histórico ni del entorno de la Mezquita, nuestra baza 2016, con permiso de la Santa Madre Iglesia Católica, no ha sustituido ni un sólo autobús de gasoil por eléctricos, no ha colocado ni una sola placa solar en ninguna instalación municipal; bajo su primer mandato municipal como concejala proliferaron las parcelaciones irregulares, la ciudad alcanzó registros peligrosos de contaminación ambiental en 2007, siendo catalogada como una de las 13 ciudades españolas con una mayor tasa de dióxido de nitrógeno, tiene en su núcleo urbano fábricas de cobre que vierten importantes cantidades de metales pesados a la atmósfera, como cadmio, plomo y níquel, nos dejó unas modernas plazas y puentes realizados con granito en la ciudad más calurosa del país, no han crecido las zonas verdes en años, sus sucesores están urbanizando el Parque Cruz Conde, con la oposición de sus vecinos y usuarios, se hizo famosa en el mundo por accionar el interruptor de la portada de feria más contaminante desde el punto de vista lumínico, se pasó por la patilla las críticas de sus propios correligionarios de reducir el idiotizante y despilfarrador alumbrado navideño, no fue capaz de ordenar que se cumpliera la ley y deslindar las vías pecuarias y caminos públicos que reclaman senderistas de la sierra cordobesa desde hace años, se ha ganado las iras de muchos vecinos por la tala de árboles en el acerado, se ha paseado con un contaminante Audi de alta gama por la ciudad de los califas y se ha fotografiado sin rubor en un coche que participaba en un rally. Consintió especuladoras operaciones urbanísticas, fue incapaz de impedir la urbanización de 40 mil metros cuadrados en zona no apta en un megaproyecto, en las conocidas naves de Colecor, del malayo Sandokán, con el que compartió risas, ágapes y corridas de toros, y quien arrasó encinas y alcornoques en la zona conocida como la Carrera del Caballo, en unas obras construidas sin licencia, sin que su policía urbanística se percatara, construyéndose dos de sus efectivos sendas parcelas ilegales en una parcelación clandestina.

 

Todas estas claves domésticas se desconocen más allá de nuestro término. Durante años sus diferentes equipos de prensa, hasta diez periodistas tuvo a su disposición como regidora municipal, se encargaron de difundir la cara amable y simpática de esta mujer que consiguió ser, efectivamente, ser una de las políticas mejor valoradas de Andalucía.

Utilizó tertulias radiofónicas y plataformas televisivas con las que supo vender el humo de una gestión tan estéril como falsa. Por eso la ha fichado ZP porque vende nada, tal como ha remarcado el propio Presidente al subrayar que los nombrados mejorarán la comunicación de su gabinete al que supera con creces los expertos del PP que consiguen colocar sus titulares por encima de los del gobierno. Ahí acierta ZP.

Desconozco los conocimientos de la ministra de Política Agraria Comunitaria, de los problemas de los caladeros de Pesca, de la energía nuclear o la eólica. Lo ignoro. Pero da igual, ella, como aquí, rellenará minutos y huecos tipográficos con palabras, un racimo de ellas con las que ha jugado y tan buen resultado le han ofrecido. «Tenderá la mano, todos y todas, desde el respeto y la tolerancia, de eso no toca, la ministra cree, la ministra no ha dicho». Una antología de palabras y frases construidas en un universo inexistente: en eso se está convirtiendo la política.

Imagino, la cara de póker que se le ha quedado a Griñán, del que dijo la ministra de todos los medios que era su amigo, compartían el mismo proyecto y blablabla. La joya de la corona de IU ha cambiado de dueño y ahora por fin llega al Consejo Ministerial de la Moncloa, cerca de Zarzuela donde vive la familia real. Con todo, sinceramente, felicito a mi paisana porque ha conseguido hacer realidad su sueño, aunque haya dejado un montón de jaramagos donde antes había rosas y porque los otros, los grandes SUEÑOS, sólo hayan sido la argucia para conseguir su fin.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.