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Unión Europea: nueva arma para preservar los mares

Fuentes: IPS

La histórica vocación marítima de Portugal fue reconocida por los demás países de la Unión Europea (UE), al ser inaugurada este jueves en su capital la sede de la agencia especializada en la defensa ambiental de las aguas en jurisdicción del bloque. La Agencia Europea de Seguridad Marítima (AESM) tendrá a su cargo la prevención […]

La histórica vocación marítima de Portugal fue reconocida por los demás países de la Unión Europea (UE), al ser inaugurada este jueves en su capital la sede de la agencia especializada en la defensa ambiental de las aguas en jurisdicción del bloque.

La Agencia Europea de Seguridad Marítima (AESM) tendrá a su cargo la prevención y el combate contra la polución oceánica, establecer garantías para las rutas navales, procesar la información y legislación sobre seguridad en el mar y en los puertos, por lo cual se puede convertir en el embrión de una futura guardia costera de la UE.

La sede de Lisboa de la AESM, cuya apertura estuvo a cargo del presidente de la Comisión Europea (órgano ejecutivo de la UE), José Manuel Durão Barroso, deberá ocuparse del territorio de 3,9 millones de kilómetros cuadrados con 457 millones de habitantes, distribuidos en los 25 países miembro del bloque, cuyas costas son bañadas por el océano Atlántico y el mar Mediterráneo.

Durão Barroso no explicó su presencia en el acto por su nacionalidad portuguesa, sino por la enorme importancia que representa para la UE lanzar un claro mensaje a favor de la preservación de los mares y océanos.

La creación de la AESM surgió en 2003, como parte de las medidas decididas tras los accidentes de derramamiento de crudo de los petroleros «Erika», en diciembre de 1999 en el golfo francés de Vizcaya, y del «Prestige», en noviembre de 2002 en Galicia, España.

El 12 de diciembre de 1999 el buque francés «Erika» se partió en dos frente a la costa de la occidental provincia francesa de Bretaña y derramó casi 20.000 de las aproximadamente 30.000 toneladas de crudo que transportaba.

El «Prestige», un petrolero con bandera de Bahamas procedente de Letonia y cargado con 77.000 toneladas de crudo, se partió en dos y se fue a pique el 19 de noviembre de 2002, produciendo una inmensa marea negra que se extendió desde la costa de Portugal hasta la de Francia, con especial incidencia en Galicia.

Los dos accidentes, son considerados por los expertos como las mayores catástrofes ecológicas registradas en aguas comunitarias y que hasta hoy hacen sentir sus nefastas consecuencias para el ambiente marino.

Durão Barroso dejó en claro que la UE deplora y pretende evitar «a este tipo de catástrofes ambientales, para las cuales no tenía medios de combate» hasta ahora.

«La creación de esta agencia, tuvo que ver con este problema» de la preservación de los mares y océanos y para contribuir «a mejorar el sistema general de seguridad marítima en la UE», apuntó el presidente de la Comisión.

La relevancia del acto inaugural se vio reforzada por las presencias del primer ministro luso, José Sócrates, del holandés Willem de Ruiter, director ejecutivo de la AESM, del griego Efthimios Mitropoulos, secretario general de la Organización Marítima Internacional, y del francés Jacques Barrot, vicepresidente de la Comisión y comisario de la UE para Transportes. La decisión de que sea Portugal el país anfitrión para una agencia de protección de los medios marinos y de la orla costera de la UE, dirigida por un holandés, se explica en la tradición comunitaria, basada en que la sede y la dirección nunca son del mismo país.

La agencia comenzó a funcionar a medio gas en Bruselas en 2003, cuando Lisboa fue formalmente indicada por los primeros ministros de la UE para ser la sede definitiva este jueves inaugurada, pero que ya estaba en funciones provisorias en la capital portuguesa desde mayo de este año.

En tanto, en el período desde la creación en 2003 y su formalización este año, el Consejo de Ministros Europeos de Transportes fue otorgándole más importancia, al atribuirle nuevas competencias, en especial respecto del terrorismo, la implementación de medidas de mayor seguridad para la navegación costera y la identificación de zonas de refugio para navíos accidentados.

Asimismo, los titulares de Transportes de la UE, invistieron con poderes a la agencia en la monitorización de las sociedades de clasificación e intervención fiscalizadora en asuntos que digan respecto a descargas ilegales de navíos.

Para cumplir estos cometidos, la AESM cuenta con dos áreas de actuación. Una a nivel de implementación y control de instrumentos legales, y la segunda en el marco de la cooperación técnica destinada a prevenir futuros accidentes.

Los principales instrumentos de trabajo en este último caso, son sus cuatro buques para combate contra la polución, atracados en Brest, en el noroeste de Francia, en el océano Atlántico, en Copenhague y en Helsinki, en el Mar Báltico, y en La Valletta, capital de la isla-Estado de Malta, en el centro del mar Mediterráneo.

Los cuatro navíos, que cuentan con bombas extractoras y mangueras trasportadoras de crudo, están permanentemente preparados para zarpar de inmediato en caso de desastre ambiental.

Los barcos y su mantenimiento representan la mitad del presupuesto del organismo, de 44,6 millones de euros (unos 57 millones de dólares), y la AESM prevé reforzar su flota en el Atlántico y en el Mediterráneo, la que actuará a pedido de los países miembro en caso de derrame de petróleo cuando estos consideren que su buques no son suficientes.

«Todo esto demuestra que la Agencia Europea de Seguridad Marítima invierte en el Ambiente», dijo a IPS el español Emilio Martín Bauzá, jefe de la Unidad de Cooperación Técnica y Desarrollo de la organización comunitaria.

Reveló que otros navíos, además de los cuatro propios, serán fletados este año en el Atlántico y el Mediterráneo, lo que revela que «sólo estas atribuciones contra la polución, gastan más de la mitad del presupuesto de la agencia», que cuenta con 120 funcionarios.

Según Tiago Pitta e Cunha, coordinador de la Comisión Estratégica de los Océanos durante el gobierno conservador de Durão Barroso (2002-2004), la elección de Lisboa como sede tiene «sentido» porque Portugal «tiene la más vasta zona económica exclusiva de la UE», debido a sus archipiélagos atlánticos de Azores y de Madeira.

Hélder Spínola, presidente de Quercus, la principal organización no gubernamental ambientalista del país manifestó su esperanza en que el nacimiento de la AESM acarree una mayor seguridad costera y que Portugal comience por dar el ejemplo y «mejore la protección de su litoral, que deja mucho que desear».

http://www.ipsnoticias.net/nota.asp?idnews=3875