Activistas de Arizona aseguraron hoy que lucharán para proteger los derechos de los hijos de inmigrantes indocumentados, ante la posibilidad de que se presente el próximo año una iniciativa de ley que busca negarles la ciudadanía. «Haremos todo lo que tengamos que hacer para asegurarnos de proteger los derechos de todos los niños nacidos en […]
Activistas de Arizona aseguraron hoy que lucharán para proteger los derechos de los hijos de inmigrantes indocumentados, ante la posibilidad de que se presente el próximo año una iniciativa de ley que busca negarles la ciudadanía.
«Haremos todo lo que tengamos que hacer para asegurarnos de proteger los derechos de todos los niños nacidos en Estados Unidos, sin importar el estatus migratorio de sus padres», aseguró hoy a Efe Olga Aros, represente del grupo e-Latina Voices, que representa a más de 400 mujeres profesionales con base en Arizona.
El senador estatal republicano Russell Pearce informó ayer que trabaja con un grupo de legisladores de 14 estados una legislación a nivel estatal que pretende negar la ciudadanía a los hijos de padres «sin papeles».
La enmienda 14 de la Constitución otorga la ciudadanía inmediata a todas aquellas personas que nazcan dentro del territorio estadounidense, sin importar el estatus migratorio de sus progenitores.
«Los niños no tienen voz, así que nosotros nos vamos a convertir en su voz», aseguró Aros.
Pearce señaló que aunque la propuesta de ley aún no está redactada, tiene el propósito de presentarla al inicio de la próxima sesión legislativa, en enero.
«Durante las próximas semanas planeamos reunirnos con legisladores en Arizona para saber cuál es su postura al respecto, queremos que cada legislador estatal y cada funcionario electo en el estado conozca nuestra postura», aseguró Aros.
Junto a Pearce trabajan legisladores de Pensilvania, Alabama, Delaware, Idaho, Indiana, Michigan, Misisipi, Montana, Nebraska, Nuevo Hampshire, Oklahoma, Texas y Utah.
Aros dijo que no le sorprende la iniciativa porque considera que actualmente existe una ola de «odio» que está recorriendo el país.
«Consideramos que nadie tiene el derecho de atacar a un niño, no importa quienes sean sus padres, por lo que tenemos que unirnos y luchar por sus derechos», enfatizó la activista.
Por su parte, Carlos Galindo Elvira, vicepresidente de la organización Valle del Son de Phoenix, dijo que su organización se opone a cualquier cambio a la enmienda 14.
«Consideramos que no es necesario», dijo a Efe Galindo Elvira, al tiempo que destacó que una reforma de este tipo es muy difícil de conseguir y que en su opinión no cambiará el debate sobre el tema migratorio.
El activista consideró que los políticos en Arizona deben enfocarse en otros temas como la economía y el desarrollo de empleos, que, a su entender, son los temas «más graves» que afectan al estado.
«Nosotros defendemos a los niños que son inocentes y los seres más vulnerables de nuestra sociedad», dijo el vicepresidente de Valle del Sol.
En su opinión es muy temprano para poder especular si este tipo de iniciativa podría ser aprobada o no en Arizona.
Ambos activistas afirmaron que por ideas como ésta es necesario que la comunidad hispana se una en Arizona y salga a votar el 2 de noviembre.
«Debemos de asegurarnos elegir a personas que realmente representen nuestras ideas y nuestros valores», dijo Galindo Elvira.
La gobernadora de Arizona, Jan Brewer, quien firmó la polémica ley antiinmigrante SB1070 se abstuvo de comentar sobre la nueva iniciativa porque considera que es aún «muy pronto».