Una de las promesas de campaña del Presidente Barack Obama fue la de proteger la libertad de Internet. Dijo en noviembre de 2007: «Asumiré personalmente el compromiso con la neutralidad de la red, porque cuando los proveedores comienzan a privilegiar algunas aplicaciones o sitios web por encima de otros, las voces más pequeñas son silenciadas […]
Una de las promesas de campaña del Presidente Barack Obama fue la de proteger la libertad de Internet. Dijo en noviembre de 2007: «Asumiré personalmente el compromiso con la neutralidad de la red, porque cuando los proveedores comienzan a privilegiar algunas aplicaciones o sitios web por encima de otros, las voces más pequeñas son silenciadas y todos perdemos. Internet es posiblemente la red más abierta de la historia y debemos mantenerla así».
Volvamos a diciembre de 2010, momento en el que Obama claramente no está asumiendo ese compromiso, motivado por gigantes como AT&T, Verizon y Comcast. Junto a él se encuentra el presidente de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus siglas en inglés), Julius Genachowski, compañero en la Facultad de Derecho de Harvard y compañero de baloncesto, que acaba de lograr que se apruebe una norma sobre neutralidad de la red que los activistas de Internet consideran desastrosa.
El director de la revista Free Press, Craig Aaron, expresó: «Esta propuesta parece estar repleta de vacíos legales que dejarían la puerta abierta a todo tipo de abusos en el futuro, lo que permitiría que empresas como AT&T, Comcast, Verizon y las grandes proveedoras de servicios de Internet decidan qué sitios web funcionarán, cuáles no y cuáles podrán recibir trato especial».
Para el comediante devenido senador Al Franken, demócrata por Minnesotta, las nuevas normas sobre neutralidad de la red no deben tomarse en broma, ya que las mismas permitirían a redes móviles como AT&T y Verizon Wireless bloquear por completo ciertos contenidos y aplicaciones cuando quisieran. Franken dio el siguiente ejemplo: «Permítanme citar un ejemplo. Quizá le guste Google Maps. Bueno, es una lástima. Si la FCC aprueba esta norma, Verizon podrá cortar el acceso a la aplicación Google Maps en su teléfono y obligarla a utilizar su propio programa de mapeo, Verizon Navigator, aunque no sea tan bueno, aunque haya que pagar para utilizarlo, mientras que Google Maps es gratis. Si se permite a las empresas priorizar contenido en Internet, o si se les permite bloquear aplicaciones a las que se accede en el iPhone, no hay nada que impida a las mismas empresas censurar el discurso político».
AT&T es uno de los conglomerados que, según los activistas, prácticamente ha redactado las normas de la FCC promovidas por Genachowski. Ya hemos sido testigos de cambios radicales de este tipo. Semanas antes de su promesa de neutralidad en la red realizada en 2007, el entonces senador Obama contrató a AT&T, que fue denunciada por participar en las escuchas telefónicas sin orden judicial a ciudadanos estadounidenses a pedido del gobierno de Bush. AT&T quería inmunidad judicial retroactiva. El portavoz de la campaña de Obama Bill Burton dijo a Talking Points Memo: «Para ser claros: Barack apoyará la obstrucción de cualquier proyecto de ley que incluya la inmunidad retroactiva a las empresas de telecomunicaciones».
Pero en julio de 2008, un mes antes de la Convención Nacional Demócrata, cuando Obama era el posible candidato a la presidencia, no solamente no obstruyó, sino que votó a favor del proyecto de ley que otorgó inmunidad judicial retroactiva a las empresas de telecomunicaciones. AT&T logró lo que quería, y rápidamente mostró su agradecimiento. La bolsa oficial entregada a cada delegado de la Convención Nacional Demócrata tenía estampado un gran logo de AT&T. Ésta organizó una fiesta para los delegados, a la que la prensa no tuvo acceso, para festejar que el Partido Demócrata había firmado su libertad.
AT&T, Verizon, la gigante de televisión por cable Comcast y otras empresas expresaron su apoyo a la nueva norma de la FCC. Los aliados demócratas de Genachowski en la comisión son Michael Copps y Mignon Clyburn (hija del líder de la mayoría de la Cámara de Representantes James Clyburn). Nuevamente Criag Aaron, de Free Press, dijo: «Tenemos entendido que los comisionados Copps y Clyburn intentaron mejorar estas normas, pero Genachowski se negó a ceder, aparentemente debido a que ya había logrado un acuerdo con AT&T y los lobbies del cable acerca del alcance de las normas.»
La comisionada Clyburn advirtió de que las normas podían permitir que los proveedores de Internet móvil discriminen y que las comunidades pobres, en particular afroestadounidenses y latinas, usen los servicios de Internet móvil más que las conexiones cableadas.
Craig Aaron considera lamentable el poder que detentan los lobbies de la industria de telecomunicaciones y del cable en Washington D.C.: «En los últimos años desplegaron a 500 «lobbistas», básicamente uno por cada miembro del Congreso, y eso es solamente lo que declaran. AT&T es la empresa que más dinero ha aportado a las campañas políticas en la historia, desde que llevamos un registro. De modo que realmente se ha consolidado. Y Comcast, Verizon y las otras grandes empresas no se quedan atrás. Y estamos realmente viendo este juego aquí, una vez más los grandes intereses empresariales están utilizando su influencia de lobby, sus contribuciones a las campañas para eliminar cualquier amenaza a su poder, a sus planes de lo que quieren hacer para el futuro de Internet… Cuando AT&T quiere reunir a todos sus «lobbistas», no hay sala en la que entren todos. Tuvieron que alquilar una sala de cine. La gente que representa el interés público y que lucha por Internet libre y abierto aquí en D.C. aún puede compartir un mismo taxi».
El dinero de campaña ahora más que nunca es lo que mantiene vivos a los políticos estadounidenses, y pueden estar seguros de que Obama y sus asesores están pensando en la elección de 2012, que probablemente será la más costosa de la historia de Estados Unidos. Se cree que el uso enérgico e innovador de Internet y las tecnologías móviles ayudaron a Obama a asegurar su victoria en 2008. A medida que la Internet abierta se restringe cada vez más en Estados Unidos, y las empresas que controlan Internet se vuelven más poderosas, es posible que no exista esa participación democrática por mucho más tiempo.
Amy Goodman es la conductora de Democracy Now!, un noticiero internacional que se emite diariamente en más de 650 emisoras de radio y televisión en inglés y en más de 250 en español. Es coautora del libro «Los que luchan contra el sistema: Héroes ordinarios en tiempos extraordinarios en Estados Unidos«, editado por Le Monde Diplomatique Cono Sur.
Denis Moynihan colaboró en la producción periodística de esta columna.
Texto en inglés traducción: Mercedes Camps, Edición: Gabriela Díaz Cortez y Democracy Now! en español, [email protected]
rCR