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Muchos niños palestinos padecen síndrome de estrés postraumático

Según un informe reciente, 8.000 niños cisjordanos han sido encarcelados desde el año 2000

Fuentes: The Electronic Intifada

Traducido del inglés para Rebelión por Beatriz Morales Bastos

Hamza tiene unos recuerdos que no debería tener ningún chico de 17 años.

El año pasado fue detenido en medio de la noche bajo la sospecha de haber arrojado piedras a los colonos israelíes cerca de su escuela en Cisjordania. Lo esposaron, le vendaron los ojos y le golpearon durante el traslado al lugar donde fue interrogado.

«Me preguntaron cuándo había tirado las piedras y cómo, en qué momento exacto, de día o de noche, y quién estaba conmigo», afirmó. «Cuando me llevaron a la cárcel, me pusieron en una celda pequeña. Me tiraban la comida por el espacio que quedaba entre la puerta y el suelo. Teníamos que comer en el mismo sitio que orinábamos. A veces nos desnudaban; nos desnudaban y se burlaban de nosotros al tiempo que nos pegaban».

Hamza pasó cinco meses en la prisión militar de Ofer. No tuvo contacto alguno con sus padres o con su familia, a los que les denegaron el derecho a visitarlo.

Tres meses después de salir de la cárcel entró en el programa de rehabilitación del YMCA en Beit Sahour, cerca de su casa en el pueblo cisjordano de Takoua. El cambio fue casi inmediato, afirmó.

«Me sentía a gusto con las sesiones [de orientación psicológica] y notaba que estaba mejor, mejor incluso que antes de ir a la cárcel», señaló Hamza, que ahora estudia para ser carpintero. «Después de empezar a trabajar en la carpintería, me hice más fuerte, nada me asustaba ya. Empecé a mirar el futuro de forma positiva».

Según cálculos recientes, los israelíes encarcelan a unos setecientos niños palestinos al año. Esta realidad ha obligado a los palestinos de Cisjordania, incluyendo Jerusalén Oriental, a desarrollar programas para hacer frente al trauma generalizado que padecen estos niños cuando salen de la cárcel.

Fundado en 1989, poco después de que empezara la primera Intifada palestina, el programa de rehabilitación del YMCA de Jerusalén Oriental es uno de ellos. Se basa en tres apartados: apoyo psicosocial, empoderamiento e integración. Su objetivo es conseguir que los niños ex presos vuelvan a la escuela o entren en programas de formación profesional.

Según el director del programa, Nader Abu Amsha, un objetivo fundamental es dar a los niños mecanismos de enfrentamiento necesarios para evitar revivir constantemente su trauma una vez que salen de la cárcel. «Estamos haciendo todo lo posible para ayudar no solo con la terapia, sino construyendo los mecanismos de enfrentamiento y ayudando a mantener su capacidad de recuperación de estas experiencias traumáticas».

Desencadenantes de trauma

«Un trauma puede aparecer una vez en la vida», señala Abu Amsha. «Pero aquí, cuando a diario hay que pasar por experiencias duras como los checkpoints, tener a los soldados alrededor y a los colonos atacando a la gente, etc, todo lo que hay alrededor de una persona puede ser un desencadenante de un acontecimiento traumático aun cuando esta persona lo haya superado».

Save the Children y el Programa de Rehabilitación del YMCA de Jerusalén Oriental publicaron un informe el 11 de marzo acerca del impacto de las detenciones y encarcelamiento por parte de Israel de niños palestinos que viven bajo la ocupación. Estas organizaciones calculan que desde 2000 Israel ha detenido y encarcelado a más de 8.000 niños palestinos en Cisjordania y Jerusalén Oriental, incluyendo algunos de solo 12 años.

Esposados y con los ojos vendados, los niños (la mayoría de ellos detenidos bajo la sospecha de haber arrojado piedras) son trasladados o bien a cárceles israelíes o a colonias en Cisjordania para ser interrogados, lo que casi siempre tiene lugar sin que estén presentes sus padres o sus abogados, según afirma el informe.

Todos los palestinos de Cisjordania están sujetos al sistema de tribunales militares de Israel, que se estableció poco después de que Israel empezara a ocupar el territorio en 1967. Según el informe, el objetivo de estos tribunales «no es funcionar como un sistema legal global» sino que «hay que entenderlos como el ‘brazo judicial’ del poder ocupante, lo que significa que se pone más énfasis en la seguridad que la justicia».

Pesadillas

El informe también concluye que casi todos los niños (98%) fueron sometidos a violencia física o psicológica durante su detención y encarcelamiento, y que el 90% de los niños padecía síndrome de estrés postraumático y una vez liberados padecían pesadillas, incontinencia nocturna, ansiedad y otros signos del trauma.

«No se pueden ignorar todos estos síntomas; nuestro interés fundamental es ayudarles a librarse del impacto psicológico del encarcelamiento y de la dura experiencia por la que han pasado», afirmó Abu Amsha. «Tienen derecho a rehabilitarse».

Para el joven de 19 años Mouath, otro joven palestino que pasó ocho meses en la prisión militar israelí de Ofer acusado de arrojar piedras, el proceso de rehabilitación ha sido beneficioso no solo para él, sino también para su familia y sus amigos, que han percibido un cambio positivo.

«[Cuando salí en libertad] fui a la escuela, pero no m quisieron readmitir. Me quedé en casa sin nada que hacer. Todo el tiempo tenía problemas con mis padres y mis amigos. Tenía el ánimo por los suelos, estaba hundido. Pensaba a menudo en la cárcel. Tenía mucho miedo», dijo Mouath.

Hoy, después de las sesiones de orientación psicológica, ya no siente miedo. «La ocupación todavía está ahí, pero ahora los soldados no me molestan, estoy mucho más tranquilo», afirmó Mouath, que ahora trabaja en electrónica del automóvil. «Mis problemas han disminuido. Ahora han desaparecido los problemas psicológicos y los pensamientos negativos».

Fuente: http://electronicintifada.net/content/8000-west-bank-children-arrested-2000-says-new-report/11100