Anoche (27 a 28 de octubre) se inició la avanzada terrestre de Israel a la Franja de Gaza ampliando sus ataques “masivos” de mar y aire. Esto ocurre luego de que durante todo el día se denunció el cierre de cuentas en redes sociales que difunden la masacre producida con los ataques a civiles gazatíes.
Ayer (viernes 27) la Asamblea General de la ONU aprobó por amplia mayoría una resolución que pide «el cese de hostilidades» en la Franja de Gaza, la primera que adopta un organismo de la ONU tras cuatro intentos fallidos del Consejo de Seguridad desde la escalada de violencia, sin embargo Israel continúa con la masacre.
En este marco, las redes sociales vienen cumpliendo un papel clave en la difusión de la violencia e incluso mostrando acciones ilegales en los ataque de Israel, ya que por ejemplo han difundido vídeos donde expertos aseguran que Israel está realizando ataques con fósforo blanco, que tiene prohibido su uso contra población civil. Esta sustancia química se reguló a través del Protocolo III de la Convención sobre Armas Convencionales de 1980 al ser considerada un arma incendiaria y muy dañina para la población ya que la exposición puede causar quemaduras e irritación, y daño al hígado, los riñones, el corazón, los pulmones y los huesos y puede además, causar la muerte.
La libertad de expresión y censura
La vida de los periodistas está en peligro en Gaza, en 20 días de ataques de Israel a Gaza más de 40 periodistas han sido asesinados. Y ahora se suma a que a partir de este viernes se realizó un corte total de todas las comunicaciones telefónicas y de internet en la franja de Gaza, lo que implica que muchos comunicadores deban ir a lugares cerca de la línea fronteriza, zona extremadamente peligrosa en este momento. Así relató la corresponsal de Telesur, Noor Harazeen, en el día de la fecha.
Esta situación vulnera el derecho a la libertad de expresión y a los derechos humanos que está consagrado en el artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos. La información y la expresión o manifestación de las ideas requieren de mecanismos de transparencia que pasan obligadamente por las nuevas tecnologías de la información.
El bloqueo de las telecomunicaciones o de la plataforma de WhatsApp también hace imposible al personal médico ir en rescate de los innumerables civiles heridos por el intenso bombardeo, indicaron representantes de organizaciones supranacionales como UNICEF o la Organización Mundial de la Salud (OMS). Las redes de TikTok, Instagram, Facebook , YouTube y X han eliminado cuentas o contenidos que consideran que desinforman, sin embargo lo que se elimina son vídeos donde se ven imágenes sangrientas, en este caso no serían Fake news, sino que la red social no tolera ese tipo de imágenes, que si son reales y sangrientas.
Ayer Michael Lynk, ex relator especial de las Naciones Unidas (ONU) sobre derechos humanos en los territorios ocupados, advirtió que el objetivo de Israel al imponer un apagón absoluto a los medios de comunicación en la Franja de Gaza es: «Mantener al mundo ciego ante lo que está sucediendo es sin duda el único propósito de acciones como ésta». «Cortar todos los medios de comunicación -incluido el periodismo muy eficaz producido por la red Al Jazeera dentro de Gaza- será aún más difícil con el corte de energía, sin Internet ni contacto con el mundo exterior», denuncio Lynk.
Hace más de una semana también se conoció la noticia de que la totalidad del equipo completo de la BBC en Cisjordania presentó su renuncia debido a su desacuerdo con la forma en que la cadena de noticias ha manejado la difusión de información sobre los acontecimientos en Gaza. Esto se sumó a la renuncia días anteriores del corresponsal de la BBC para el Norte de África, Bassam Bounenni.
La decisión de los periodistas se dio luego de que la cadena, dirigida por el gobierno británico, financiada por capital judío israelí y con los impuestos de los ingleses, ha pedido a sus corresponsales no informar sobre los brutales ataques de Israel contra la población civil en Gaza, sino plegarse a las directrices mediáticas y editoriales emanadas desde el gobierno israelí.
No es la primera vez que la BBC hace presión sobre sus periodistas y corresponsales, obligándolos a llevar al público desinformación. Anteriormente, habían realizado una petición igual sobre el conflicto de Ucrania-Rusia, pidiendo expresamente que «todas las noticias difundidas se ajustarán a favor de Ucrania».
Los países europeos intentaron acallar las voces de sus ciudadanos que a pesar de la desinformación de sus medios, o de las prohibiciones a movilizaciones en apoyo a cese al fuego hacia Palestina se siguen movilizando. Hoy los manifestantes volvieron a tomar las calles de Londres, después de que unas 100.000 personas marcharon por la capital el pasado fin de semana exigiendo el fin de la guerra entre Israel y Hamás.
Israel justifica sus ataques para lograr su objetivo de detener a los combatientes y destruir la infraestructura de Hamas. Pero hasta el momento no hay información que se haya logrado esta operación, sino que lo afectados es la infraestructura y los más de 2 millones de palestinos que ven como su vida se convierte en una tortura.
El asesor estadounidense, general James Glenn, recomendó al ejército israelí no entrar por tierra en la Franja de Gaza. Sin embargo ayer Israel lanzó un amplio bombardeo aéreo sobre Gaza, el más intenso de las últimas tres semanas, y el ejército israelí confirmó que sus fuerzas estaban ampliando sus operaciones terrestres.
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