Un grupo de contrarrevolucionarios radicados en Miami y en varias ciudades de Europa, dirigidos por Luis Posada Carriles, Santiago Álvarez y la dirección de Alpha 66, el Consejo por la Libertad de Cuba, el Directorio Democrático y la FNCA, entre los que se encuentran Jorge Luis LLanes Naranjo, Aldo Rosado-Tuero, Esmeralda Rodríguez, Dionisio de la […]
Un grupo de contrarrevolucionarios radicados en Miami y en varias ciudades de Europa, dirigidos por Luis Posada Carriles, Santiago Álvarez y la dirección de Alpha 66, el Consejo por la Libertad de Cuba, el Directorio Democrático y la FNCA, entre los que se encuentran Jorge Luis LLanes Naranjo, Aldo Rosado-Tuero, Esmeralda Rodríguez, Dionisio de la Torre Jr., Sebastián C Cano, Miguel Estrada, Olga Sánchez, Nancy Calzadilla, Damián González, Alfredo Viso, Pablo Pacheco Ávila, Jorge T. Díaz, entre otros, han desatado una desenfrenada oleada de ataques, ofensas y amenazas de muerte contra diversos periodistas radicados en Cuba y otros países y ciudades, incluida Miami.
La irrespetuosa campaña se apoya principalmente en la blogósfera anticubana, Facebook y Twitter, aunque utilizando el viejo estilo de la Cosa Nostra -que en poco se diferencia de los mafiosos floridanos-, se ha volcado también al empleo de mensajes SMS y llamadas telefónicas, en donde se trata de intimidar a aquellos que se oponen valientemente a su enfermiza y difamatoria campaña contra Cuba.
Hace algunas horas han amenazado al colega Miguel Fernández, cubano residente en Miami y administrador del blog Cuba: La Isla Infinita. La agresión verbal le profetiza una muerte inmediata. Todo ello nos hace pensar que, desde la absolución bochornosa de Luis Posada Carriles, se trata de revivir el criminal y lejano momento de las décadas de los 70 y los 80, del pasado siglo, donde Omega 7 y otras organizaciones violentas, acudían al asesinato impune, a la amenza vil y al hostigamiento contra quienes disentían de ellos o procuraban un sano acercamiento hacia su Patria. Todavía se recuerda con dolor y repudio las muertes de Luciano Nieves Mestre, Carlos Muñiz Varela, Eulalio José Negrín Santos, Orlando Letelier y Félix García Rodríguez.
Hacia los periodistas cubanos el hostigamiento ha sido sin parangones. Varios colegas como Norelys Morales, Lagarde, Rosa Báez Báez, Aixa Hevia, Yohandry, Iroel Sánhez, Enrique Ubieta, entre otros, y particularmente el que escribe esta nota, hemos sido asediados sin contemplaciones por los mafiosos intolerantes. Epítetos de todo tipo, ofensas a nuestra integridad y a nuestras familias, amenazas de muerte y golpeaduras, son parte de la irrisoria -aunque no condenable-, atención de nuestros enemigos. Para citar un ejemplo, he recibido casi 300 twetts en apenas dos días. En Facebook es permanente el asedio, y en los blogs más reaccionarios como Superpolítico, Nueva Acción, Secretos de Cuba y otros, se ha llegado a amenazarme con agresiones físicas y se han divulgado los teléfonos de mi familia más cercana, como una forma de deliberada amenaza.
Uno de los principales agresores ha empleado el teléfono 1 (305) 721 5114, ubicado en Miami, para enviar sus amenazas. Otros lo han hecho verbalmente.
Ante esta oleada de agresión verbal y de evidentes amenazas contra periodistas cubanos y de otras naciones, simpatizantes con Cuba, me preguntó: ¿Qué han hecho la Policía del Condado Miami-Dade y el FBI? ¿Qué han hecho Amnistía Internacional o Reporteros sin Fronteras? ¿Qué ha hecho la Sociedad Interamericana de Prensa?
¡Qué poco conocen a nuestros periodistas, cubanos y revolucionarios!
Por nuestra parte nos mantendremos firmes en nuestras trincheras a favor de la verdad y la justicia.
Llevamos en el alma a Martí, en la mente a nuestro invencible Fidel y en los puños la fuerza de Maceo.
Le corresponde al gobierno de Obama, a las autoridades estatales de La Florida y a las respectivas policías de las capitales europeas, detener esta farsa. Nos mantendremos denunciando hechos de este tipo sin amilanarnos.
Hemos sido, somos y seguiremos siendo, hombres y mujeres de ¡Patria o Muerte!