En el año 2003 se firmó un acuerdo sobre los mismos planteamientos que la multinacional BEHR tiene hoy sobre la mesa. Este acuerdo iba enfocado hacia mejorar los costes para poder ser más competitivos dentro de las filiales del propio grupo. Durante estos años los trabajadores hemos estado insistiendo, ante la Generalitat y la propia […]
En el año 2003 se firmó un acuerdo sobre los mismos planteamientos que la multinacional BEHR tiene hoy sobre la mesa. Este acuerdo iba enfocado hacia mejorar los costes para poder ser más competitivos dentro de las filiales del propio grupo.
Durante estos años los trabajadores hemos estado insistiendo, ante la Generalitat y la propia empresa, de que el plan no se estaba desarrollando sobre los compromisos adquiridos, estábamos observando que la empresa no tenía en cuenta la base fundamental del acuerdo.
Que consistía en:
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Preparar la planta y adaptarla con nuevas series de alto valor añadido, para conseguir los objetivos marcados en el plan y abordar con garantías el futuro de la misma más allá del año 2007 y sucesivos.
La dirección en vez de asumir este reto lo que ha hecho durante estos años ha sido todo lo contrario:
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Descapitalizar Zona Franca.
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Anular todas las inversiones en Zona Franca.
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No concretar los productos que deberían suplir a los actuales a la finalización de los mismos.
Por lo tanto interpretábamos que lo que la Gerencia estaba haciendo, más que asegurar el futuro era preparar el siguiente plan, que podría ser perfectamente el cierre de la planta.
Bajo este panorama los trabajadores denunciamos estas actitudes a principios de año a la Generalitat, como parte integrante del acuerdo que se firmo en el año 2003 y que bendijo con su firma. En estas conversaciones ya se pudo observar claramente la actitud de la empresa, en ningún momento se le vio con interés en resolver el problema del incumplimiento del acuerdo firmado en el 2003. Por el contrario se empezó a vislumbrar con total claridad las intenciones de la Multinacional, presionar para conseguir cerrar Zona Franca y encima poder echar la culpa al Comité de empresa (por ser poco dialogante) y a los trabajadores por no aceptar sus condiciones.
Esta es la historia, la historia de una muerte Planificada en diferentes etapas, historias que se vienen repitiendo no solo en Frape, en muchas más empresas y se seguirán repitiendo porque están diseñadas por un guionista que a través de sus actuaciones intenta crear un único debate de opinión, referente a las crisis del sistema y sus soluciones. Este guión lo esta escribiendo el CAPITALISMO GLOBALIZADO.
Estamos como tantas otras empresas de nuestro sector ante una nueva manifestación de terrorismo empresarial, que con el juego de la deslocalización y el discurso de los costes laborales están desertizando el tejido industrial en Catalunya.
El Capitalismo globalizado lo que esta consiguiendo e imponiendo con sus actuaciones es hacer retroceder y anular todas las conquistas y avances sociales conseguidos por el sindicalismo de clase en los últimos tiempos, nos quieren convertir en simples comparsas del sistema.
En estos momentos la voracidad del Capitalismo en su forma global esta desarrollando una estrategia en todas las negociaciones que esta llevando a todos los trabajadores/as a un fuerte retroceso en sus reinvidicaciones y lo que es peor están imponiendo un discurso y llevando un debate a toda la opinión publica de que esto es debido a la poca productividad de los diferentes sectores principalmente creado por los altos costes.
Este guión lo que intenta en definitiva es crear un nuevo marco y potenciar un nuevo tipo de sindicalismo, orientado a sacar la negociación de las empresas y llevarlas a las mesas técnicas en la que los ejecutivos sindicales y los ejecutivos empresariales definen y deciden los destinos de miles de trabajadores en nombre de la democracia neoliberal que nos están imponiendo.
Que duda cabe que dentro de esta estrategia los Sindicatos oficiales y las Administraciones mal llamadas de «izquierdas» están favoreciendo estas tendencias y están perjudicando la defensa de los intereses de forma colectiva y solidaria.
Por una parte los Sindicatos están impidiendo con sus políticas pactictas y su desmovilización permanente la solidaridad obrera sectorial y territorial, dejan a las empresas aisladas eliminando la fuerza que darían las movilizaciones sectoriales para la defensa conjunta de los intereses de los trabajadores. Ante la globalización del capital deberían globalizar la lucha sindical.
Por otra parte las administraciones lo único que hacen es aprobar y firmar sin pestañear los expedientes y cierres de empresa que les plantea la patronal.
Ante esta situación las alternativas que nos quedan a los trabajadores, es recuperar urgentemente las señas de identidad que nos quieren eliminar.
-Recuperar el sindicalismo de clase y combativo
-Recuperar la movilización sectorial y territorial, la unidad es el único camino para defender nuestros intereses de clase contra el Capital.
-Recuperar las decisiones a través de las Asambleas obreras, nadie puede negociar y pactar en nuestro nombre, solo nosotros debemos tomar decisiones sobre nuestro destino.
Por este motivo hacemos un llamamiento a todos los trabajadores y Comités de Empresa que en estos momentos estén padeciendo un proceso de cierre o deslocalización a participar conjuntamente en la preparación de acciones conjuntas en defensa de los puestos de trabajo y por la recuperación del sindicalismo combativo y de clase.