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Ideología sionista, fundamentalismo e intolerancia religiosa

Fuentes: lanacion.com

«Si son insultados a causa del nombre de Cristo, felices ustedes, porque la gloria y el Espíritu de Dios descansa sobre ustedes. Sería una lástima que alguno tuviera que sufrir por asesino, ladrón, malhechor o delator; pero si sufre por ser cristiano, no tiene por qué avergonzarse, sino que más bien debe dar gracias a […]

«Si son insultados a causa del nombre de Cristo, felices ustedes, porque la gloria y el Espíritu de Dios descansa sobre ustedes. Sería una lástima que alguno tuviera que sufrir por asesino, ladrón, malhechor o delator; pero si sufre por ser cristiano, no tiene por qué avergonzarse, sino que más bien debe dar gracias a Dios por llevar ese nombre» Pedro 4:14 Consuelo a los perseguidos. Nuevo Testamento.

Estadísticas recientes revelan que los palestinos de religión cristiana constituyen aproximadamente el 2,4% de la población total. Se trata de un descenso significativo respecto de 1948. Los palestinos de religión cristiana se dividen en católicos apostólicos ortodoxos, que es el grupo mayor, y en católicos apostólicos romanos.

Este descenso demográfico general condujo a importantes cambios geopolíticos. Hasta 1948, los palestinos de religión cristiana eran mayoría en Belén. Actualmente, quedan pocos cristianos, y quienes pueden emigrar debido a la limpieza étnica y al acoso israelí, suelen hacerlo. Así este decremento se considera como resultado de la persecución institucionalizada y de la política discriminatoria y de intolerancia religiosa del ente sionista de Israel al prohibir la libertad de culto de todas las religiones.

El Papa Juan Pablo II demostró ser consciente de estos hechos. En un acto significativo en su visita a Belén-Palestina en marzo de 2000, instó a los palestinos de religión cristiana a permanecer en la ciudad, cuna del cristianismo, cuando dijo: «No temáis conservar vuestro patrimonio cristiano y la presencia cristiana en Belén»¡No temáis!’. Son las mismas palabras que la Iglesia os dirige hoy. No temáis preservar vuestra presencia y vuestro patrimonio cristiano en el lugar mismo en el que ha nacido el Salvador». El Estado oficial Palestino, que se desea re-establecer es un Estado Democrático con libertad de culto de las tres grandes religiones, cristiana, judía y musulmana. Cabe hacer notar, como siempre y una vez más, que el actual Gobierno, democráticamente elegido por el pueblo palestino: representado por el Movimiento de Resistencia Palestina a la Ocupación Militar Extranjera Israelí, Hamas, que entre otras cosas se destaca por su labor de apoyo de red social, ha mantenido un lenguaje y accionar congruente con sus principios y convicciones ideológicas. Donde, ha realizado la dolorosa concesión del reconocimiento y coexistencia junto a la entidad sionista, Israel, creada artificialmente como cuña del Imperialismo desde 1948, sobre suelo palestino.

Los avances hacia una «solución pacífica a la Ocupación israelí», (una curiosa situación la del deseo de paz palestina coexistente con una invasión militar extranjera) se ha debido a la rígida insistencia israelí en el no retiro a las fronteras de 1967 y en el tema de los refugiados, dos puntos que constituyen condiciones centrales, de algún tipo y grado de conducta de reparación de la invasión israelí y el consecuente Holocausto palestino. Un regreso a las fronteras de 1967 y el abandono real y auténtico de los asentamientos ilegales sobre suelo palestino, han sido constantes negativas que han impedido una coexistencia pacífica entre los nuevos inmigrantes a Palestina y el pueblo palestino autóctono.

Ahora bien, al realizar un planteamiento de un Estado con religión oficial consistente en el Islam, obedece única y exclusivamente a la realidad de que el pueblo palestino, mayoritariamente practica esa religión, pero nunca ha sido en desmedro del respeto, tolerancia y sana convivencia social hacia sus hermanos palestinos cristianos, ni tampoco hacia la comunidad religiosa judía. Los palestinos musulmanes nunca en la Historia intentaron desplazar a las otras minorías religiosas, prueba de ellos es que antes de la creación del ente sionista, las tres religiones abrahámicas convivían en paz y armonía, existiendo solo un pueblo palestino unificado, en la Palestina Histórica.

Pruebas actualizadas de esta actitud eran las permanentes asistencias del difunto Presidente de Palestina Excelentísimo Señor Yasser Arafat, (musulmán que contrajo nupcias con una palestina cristiana) a las Tradicionales Misas de Gallo en la ciudad palestina de Belén. El tradicional ritual concluye con la colocación de una escultura del niño en la aledaña Basílica de la Natividad, que contiene la gruta donde nació el palestino Jesús.

El Patriarca arriba a Belén precedido por boy- scouts de distintas agrupaciones de palestinos cristianos que, o bien tocaban gaitas o portaban banderas de colores, entre ellas la palestina e insignias de la Tierra Santa. Decenas de monaguillos que portan cruces también flanquean la llegada a los recintos religiosos de Michel Sabbah, quien denuncia la ocupación israelí y el muro de separación que el ente sionista levanta en tierras de la Ribera Occidental. «Nuestra situación es de conflicto y violencia, de inseguridad y de miedo, de ocupación militar, de muro de separación, de ciudades hechas grandes cárceles y de humillaciones», declaró el máximo representante de la Iglesia Católica Apostólica Romana en Tierra Santa.

Este muro además imposibilita que los feligreses palestinos cristianos y musulmanes puedan asistir a orar en los recintos sagrados de Jerusalén, o a los jerosolimitanos acudir a Belén, separadas por escasos ocho kilómetros. Históricamente las dos ciudades tenían estrechos lazos y el intercambio comercial. También estaban autorizados las visitas a los santuarios más importantes tanto para el Islam -Explanada de las Mezquitas de Jerusalén- como el cristianismo -Santo Sepulcro de Jerusalén o Basílica de la Natividad en Belén-. Pero hoy en día la libertad de movimientos queda supeditada a la decisión de las autoridades militares, de la ocupación extranjera israelí, encargadas de otorgar los permisos tanto de entrada como de salida de la ciudad de Belén.

En cambio, y en contraste con la actitud basada en el respeto, tolerancia, sana y milenaria pacífica convivencia social, proveniente del Islam en Palestina, la ideología sionista mantiene una actitud fundamentalista. Y la retórica anticristiana y antimusulmana es algo común en las emisiones oficiales del ente sionista de Israel. Fue un emigrante estadounidense quien perpetró una masacre entre fieles musulmanes al interior de la Mezquita, ¿Que nos revela esto? ¿que hubiese sucedido si hubiese sido perpetrado lo mismo en una sinagoga?…pues bien, el recurso estratégico, la invención sionista del mal llamado «Antisemitismo», hubiese reaparecido una vez más, como medida de amedrentamiento y adoctrinamiento mental mundial.

Esta actitud de la entidad sionista hacia los Santos Lugares del cristianismo, hace que de regreso de Tierra Santa, «pocos días antes de la Navidad» 2004, los Presidentes de las Conferencias de los religiosos y de las religiosas de los Estados Unidos, Inglaterra y Gales, subrayan que «la paz podrá llegar sólo cuando termine la injusticia de la ocupación y cuando el pueblo palestino pueda vivir seguro en su propia Nación».

Belén es un ghetto para cada Navidad y Pascua de Resurrección cristiana. Mientras continúa la ocupación militar israelí de Belén, las Misioneras del Caritas Baby Hospital, lanzaron un llamado urgente a todo el mundo denunciando la desidia general frente a una «ciudad-jaula» para sus habitantes.

«Belén muere entre la indiferencia de todo el mundo cristiano -advierten en su llamado-. El destino de esta ciudad es el de pagar, y pagar siempre por los que siembran la muerte: condenados todos a un castigo masivo, vivimos como presos, como animales enjaulados, y comemos gracias a las organizaciones humanitarias». Así, las campañas organizadas de desprestigio (estrategia comúnmente utilizada por el sionismo) hacia la Iglesia católica, ha alcanzado solo un efecto limitado en su intento de limitar y regular la realidad palpable acerca del sufrimiento palestino y la extinción del cristianismo en su Tierra Original: Palestina, hoy Ocupada.

Existen numerosos sitios de importancia histórica y religiosa para la cristiandad. Muchos se han convertido en un grave problema, ya que soldados de la ocupación israelí, han abusado de su santidad, llevando a cabo en ellos asesinatos, tomas, profanaciones, etc. Ejemplos son la Iglesia de Santa Catalina y el acoso de la Basílica de la Natividad; este es el ejemplo más flagrante del desprecio por la Santidad de templos cristianos, que tuvo lugar curiosamente en una primavera, cuando las fuerzas de ocupación israelí se apoderaron de la Iglesia de la Natividad en Belén. Los soldados de la Ocupación israelí, tomaron como rehenes a más de 40 clérigos y monjas cristianos; no se trataba de un acto de «seguridad y defensa de la entidad», argumento utilizado para ejecutar y dar crédito moral a la limpieza étnica del pueblo palestino, sino simplemente de un poderoso ejército extranjero de ocupación, terrorista armado, que deliberadamente sitió el santo lugar cristiano profanándolo y mancillándolo con su sola presencia.

La solución basada en una paz real será entonces el retorno a la convivencia de las tres religiones abrahámicas, la restitución del respeto, tolerancia y sana interrelación humana… especialmente, en la diferencia y divergencia.

Recomendaciones Bibliográficas:

Corbí, Joan Miguel. «Los cristianos de Palestina pueden ser extinguidos si sigue la política israelí de ocupación» Diario Digital. Laico-Católico. ForumLibertas.com 14/ 04/2005 ForumLibertas

Efe. Noticias. Artículo «Miles de personas festejan la Navidad en secreto en Israel». 25/12/2002.

www.lanacion.com.ar/Viernes 7 de abril de 2006.