Varias veces se ha señalado cómo la guerra sicológica que paga el gobierno norteamericano contra Cuba persigue crear en las audiencias reflejos condicionados que provoquen una reacción automática desvinculada del más mínimo análisis al aproximarse a cualquier información sobre la Isla. Pero he aquí que como un fenómeno de contagio inverso, los propios vehículos que […]
Varias veces se ha señalado cómo la guerra sicológica que paga el gobierno norteamericano contra Cuba persigue crear en las audiencias reflejos condicionados que provoquen una reacción automática desvinculada del más mínimo análisis al aproximarse a cualquier información sobre la Isla.
Pero he aquí que como un fenómeno de contagio inverso, los propios vehículos que sirven de constructores de esos prejuicios terminan reproduciendo el comportamiento que el científico ruso Iván Pávlov observó en sus perros al experimentar con ellos el suministro de alimentos acompañado del sonido de una campanilla para luego hacer sonar el mismo objeto sin darles comida y comprobar que los animales salivaban al igual que antes.
Pues dos medios financiados generosamente por el gobierno norteamericano a través de esa filial de la CIA que es The National Endownment for Democracy –Cubaencuentro y Diario de Cuba– y ese paradigma de la objetividad que es El Nuevo Herald de Miami han escuchado esta vez la campanilla y han empezado a salivar para morder aire.
A partir del anuncio de que la Enciclopedia Colaborativa Cubana EcuRed desarrolla servicios como una sección certificada por doctores en ciencias e instituciones científicas y versiones portátiles para computadoras personales y móviles, los tres propagandistas al servicio de EE.UU. contra Cuba coinciden en presentar ésta como un medio de propaganda política y una prueba del control del gobierno cubano sobre la Internet.
EcuRed, que arribó a dos años de presentada el pasado 14 de diciembre, posee más de cien mil artículos, algo imposible de construir sin que la mayoría de sus doce mil colaboradores cubanos accedan a Internet. De esas páginas sólo una mínima parte aborda temas políticos, siempre con fuentes validadas y lejos de los cánones impuestos por quienes controlan medios como El Herald, Cubaencuentro y Diario de Cuba, que para colmo, ignoran que hasta su venerada Wikipedia posee también versiones portátiles para móviles y PCs porque parece que en el planeta hay miles de millones de personas que usan esos servicios por no poderse pagar un acceso en línea.
Lo más interesante es que la mayoría de los más de noventa mil accesos diarios que tiene EcuRed como promedio vienen desde ese «mundo libre» que según estos medios existe fuera de Cuba y es desde allí donde también se descarga mayoritariamente su versión portátil. Tal vez, gracias a los saliveos de El Herald, Cubaencuentro y Diario de Cuba, a partir de ahora serán aún más lo que lo harán.
Fuente: http://lapupilainsomne.wordpress.com/2012/12/23/los-perros-de-pavlov-le-ladran-a-ecured/