A pesar de que Hossan Badrawi, secretario general del gobernante Partido Nacional Democrático, había adelantado a la BBC que Mubarak «probablemente» traspasaría el poder a su vice, Omar Suleiman, el presidente egipcio rechazó cualquier injerencia extranjera en la política interna de su país, anunció el levantamiento del estado de excepción y ratificó que no se […]
A pesar de que Hossan Badrawi, secretario general del gobernante Partido Nacional Democrático, había adelantado a la BBC que Mubarak «probablemente» traspasaría el poder a su vice, Omar Suleiman, el presidente egipcio rechazó cualquier injerencia extranjera en la política interna de su país, anunció el levantamiento del estado de excepción y ratificó que no se presentará a las próximas elecciones. Antes de su discurso, el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas expresó su apoyo a «las legítimas demandas del pueblo». Los manifestantes concentrados en la Plaza Tahrir respondieron al grito de «fuera Mubarak, fuera Suleimán, quien poco después del discurso presidencial, exhortó a sus conciudadanos a «no escuchar a los medios extranjeros» que agitan el descontento y que «sólo escuchen al gobierno».
El discurso del presidente Hosni Mubarak dio por tierra con las especulaciones acerca de su inminente alejamiento del gobierno y provocó el desconcierto y la decepción entre los miles de manifestantes concentrados en la plaza Tahrir, quienes por décimooctavo día consecutivo exigen su renuncia y una apertura democrática que les permita desterrar el régimen de 32 años que convirtió a Egipto en uno de los países más inequitativos del mundo. Al grito de «Fuera Mubarak, fuera Suleimán» permanecen en la plaza y exhiben sus zapatos en la mano en señal de protesta.
Horas antes del discurso de Mubarak, transmitido por cadena de radio y televisión, el canal estadounidense ABC dio informaciones en torno a la eventual renuncia de Mubarak. Todo «termina esta noche», afirmó el jefe del Estado Mayor egipcio, Sami Eman, a un reportero de ABC. El canal NBC, por su parte, también atribuyó a dos fuentes del gobierno egipcio declaraciones respecto a la renuncia de Mubarak.
La islamista Hermandad Musulmana reaccionó con críticas a la renuncia incompleta del jefe de Estado. «Su discurso es frustrante e ignora la voluntad popular», señaló Helmi al-Gazzar, alto miembro del movimiento en Egipto. Añadió que Mubarak no se comprometió. «No hay garantía para sus palabras, porque los poderes delegados a Suleiman pueden ser cancelados según los poderes otorgados a él por la Constitución», explicó.
El embajador egipcio en EEUU, por su pàrte, afirmó que el vicepresidente, Omar Suleiman, es el «presidente de facto» después de que Mubarak le transifirera hoy «toda la autoridad». Mubarak ya es sólo presidente «de iure», pero «toda la autoridad» será asumida por Suleiman, incluido el mando sobre las Fuerzas Armadas», subrayó Shoukry en entrevista con la cadena CNN, y agregó haber recibido las aclaraciones del propio Suleiman, después de que el discurso de Mubarak provocara ira en el país árabe, cuyos opositores siguen exigiendo su renuncia inmediata.
Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/ultimas/20-162111-2011-02-10.html