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El refugiado eritreo Dawit Demoz obtiene la residencia en Canadá, pero pide ayuda para los solicitantes de asilo que viven en condiciones extremas en Israel

Un refugiado empuja a Canadá a ayudar a los solicitantes de asilo en Israel

Fuentes: Middle East Eye

Traducido del inglés para Rebelión por J. M.

Solicitantes de asilo africanos, en su mayoría procedentes de Eritrea, toman parte en la protesta contra la política de deportación de Israel frente a la Knesset el 26 de enero (AFP)

TORONTO, Canadá.- «No más cárcel !Somos refugiados!», coreaba la multitud fuera del Parlamento israelí en Jerusalén esta semana, ya que más de 1.000 solicitantes de asilo africanos se unieron para exigir que sus solicitudes de asilo sean atendidas.

Los refugiados, en su mayoría procedentes de Eritrea y Sudán, han estado luchando durante años para que Israel alivie sus restricciones severas en su vida cotidiana y ponga fin a la detención indefinida y a las amenazas de expulsión.

«Ustedes, los jueces del Tribunal Supremo, son los únicos que tienen la autoridad para salvar a Israel de cometer la injusticia de la deportación de los vulnerables solicitantes de asilo, en violación de todos los acuerdos internacionales,» dijo en un comunicado al periódico Jerusalem Post el grupo que organizó esta semana la protesta «Marcha por la Libertad».

«Nuestro destino está completamente en sus manos», dijo el grupo.

La protesta se produjo tan sólo unas semanas después de que un refugiado de Eritrea, que está ahora a miles de kilómetros de distancia viviendo en Canadá, comenzó a trabajar una vez más para exponer el trato duro al que están sometidos en Israel los solicitantes de asilo africanos.

Dawit Demoz dejó Israel en marzo pasado, después de más de seis años en Tel Aviv, donde se convirtió en una activista en la lucha para proteger los derechos de los solicitantes de asilo africanos marginados y difamados del país.

Ahora, a sus 30 años, es un residente permanente de Canadá, estudia psicología en la Universidad de York en Toronto y trabaja a tiempo parcial en una tienda de comestibles.

Pero no puede olvidar a las decenas de miles de solicitantes de asilo africanos que aún permanecen en Israel.

«No puedo venir aquí y olvidar todo lo que dejé atrás. Es difícil. Pienso en ellos todo el tiempo», dijo Demoz a Middle East Eye en un café en el extremo oeste de Toronto, a principios de este mes.

«No puedo olvidar a la gente que he dejado atrás. La situación es cada vez peor allí, no hay esperanza de que la situación en Israel vaya a cambiar. Me dije, ‘tengo que hacer algo’ «.

Abusos de derechos humanos

Las duras condiciones de vida de los solicitantes de asilo africanos en Israel han sido ampliamente reportadas desde que decenas de miles de refugiados, principalmente eritreos y sudaneses, comenzaron a hacer el viaje a Israel en la última década.

Más de 40.000 solicitantes de asilo viven actualmente en Israel, la gran mayoría de ellos son originarios de Eritrea y Sudán. Muchos refugiados llegaron a Israel después de un peligroso viaje a través del desierto del Sinaí egipcio.

En su historia Israel ha reconocido menos del uno por ciento de todas las solicitudes de asilo. El año pasado se concedió la condición de refugiado por primera vez a Mutasim Ali, líder nacional del Sudán, joven activista y líder de la protesta.

Durante años el Gobierno dio a los solicitantes de asilo procedentes de Eritrea y Sudán «protección temporal» en forma de visados ​​de corta duración, lo que le permitió al Gobierno evitar efectivamente la tramitación de sus solicitudes de asilo.

Hoy la mayoría de los solicitantes de asilo africanos debe renovar visas temporales de estancia en el país y viven bajo el riesgo de ser convocados a Holot, un centro de detención construido en el sur del desierto del Negev.

Israel también firmó un acuerdo secreto para deportar a los solicitantes de asilo a terceros países. El Gobierno israelí dice que el acuerdo no supone ningún riesgo para los deportados; un representante del ministerio de Justicia de Israel dijo el año pasado que al menos 3.000 personas habían sido enviadas a Ruanda y Uganda.

Pero es una política que, según dicen defensores de los refugiados, pone a los solicitantes de asilo en peligro y los deja en un limbo legal. Algunos solicitantes de asilo han informado de que Israel los repatrió a sus países de origen donde pueden sufrir el encarcelamiento, la tortura y otros abusos.

Proceso de inmigración ‘urgente’

Demoz, que recientemente organizó la proyección de una película y la recaudación de fondos en Toronto en beneficio del Centro de Mujeres de Eritrea en Tel Aviv, dijo que se siente alentado por el deseo de los canadienses de ayudar a los eritreos.

El primer objetivo del evento fue sensibilizar y proporcionar información de cómo los eritreos pueden ser patrocinados para venir a Canadá, dijo.

«Quiero que se enteren de la situación de los eritreos, pero al mismo tiempo, hay cosas que se pueden hacer ahora. Si usted está listo o si le interesa ayudar, usted puede patrocinar a eritreos», dijo Demoz, que fue patrocinado privadamente por un grupo canadiense.

El único programa de patrocinio privado de Canadá permite a los grupos comunitarios (conocidos como patrocinadores privados) patrocinar a las personas en necesidad de reubicación. Estos grupos son, entonces, responsables financieramente del primer año de los refugiados en Canadá.

 Oficialmente la División de Protección de los refugiados dentro de la Junta de Inmigración y Refugiados de Canadá (IRB) se encarga de la realización de audiencias y tramitación de las solicitudes de los refugiados con necesidad de protección en el país.

Recientemente se dio a los eritreos acceso a un «proceso acelerado» para atender sus reclamos. Los ciudadanos sirios e iraquíes son los únicos otros que tienen acceso a este proceso en Canadá.

Esto significa que el IRB ha reconocido un «patrón de violaciones de los derechos humanos» y se puede conceder la condición de refugiadas a las personas de estos países con mayor rapidez, dijo Janet Dench, directora ejecutiva del Consejo Canadiense para los Refugiados.

«Un proceso acelerado es bueno para ellos para tratar de mover [a través de] reclamaciones evidentes rápidamente», dijo Dench a Middle East Eye. «Desde el punto de vista de los demandantes se puede [entender] que se sientan a salvo durante lo que puede ser un proceso de audiencia muy traumatizante. Esto hace que sea una más fácil, más amable y, potencialmente, un proceso un poco más rápido».

Entre enero y agosto del año pasado 3.081 eritreos recibieron la residencia permanente en Canadá: 2.773 refugiados fueron con patrocinadores privados, mientras las 308 personas restantes fueron patrocinadas por el Gobierno. Eso es un aumento a partir de 2015, durante el cual 1.648 eritreos recibieron residencia permanente canadiense.

Pero Dench dijo que Canadá también debe actuar para poner una suspensión de las deportaciones de sus connacionales de Eritrea, dada la grave situación de los derechos humanos en su país de origen.

En 2015 las Naciones Unidas dijeron que el Gobierno de Eritrea era responsable de «violaciones sistemáticas, generalizadas y graves de los derechos humanos» que pueden constituir crímenes contra la humanidad.

Los eritreos se ven obligados en su país a un servicio militar indefinido donde son sometidos a trabajos forzados, la tortura, el abuso físico y sexual. La disidencia es sofocada, el encarcelamiento y las desapariciones forzadas están muy extendidos y cientos de miles de personas han huido del país.

«No es la ley quien gobierna a los eritreos, sino el miedo», informó la ONU.

Tener una política clara que bloquee las deportaciones a Eritrea permitiría a los refugiados obtener permisos de trabajo y estar en una mejor posición que simplemente estar esperando la deportación a Ottawa.

«Está comprobado que hay abusos masivos contra los derechos humanos y sin embargo hay muy poca cobertura internacional de ello», dijo Dench. «Creo que esa es una de las razones por las que no tenemos una suspensión temporal. Si la gente hubiera prestado más atención habría salido hace mucho tiempo».

¿Puede Canadá ayudar a los eritreos en Israel?

Los individuos no pueden llegar directamente al reasentamiento en Canadá, deben tener una referencia, ya sea de la agencia de refugiados de las Naciones Unidas (ACNUR) u otra organización o de un patrocinador privado, explicó Rémi Larivière, portavoz de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía de Canadá (IRCC).

En el caso de los eritreos que viven en Israel Larivière dijo que Canadá no tiene ningún acuerdo específico con Israel para reubicarlos y el departamento de IRCC no ha pedido referencias a ACNUR de los refugiados en Israel.

«Sin embargo Canadá permanece siempre abierto a considerar casos urgentes o vulnerables que el ACNUR puede identificar, como estar en necesidad de reasentamiento en cualquier lugar en el mundo», dijo Larivière.

Desde 2012 Canadá ha establecido límites en el número de nuevas aplicaciones que aceptará cada año a los usuarios con acuerdo de patrocinio.

El año pasado se puso en marcha un tope de 350 nuevas aplicaciones en Tel Aviv, «debido a una acumulación creciente de aplicaciones y asuntos de largos tiempos de espera,» dijo.

Este año, el cupo de aplicaciones de patrocinio privado se ha fijado en 7.500 personas en todo el mundo y Canadá espera reasentar a 40.000 refugiados en situación de personas protegidas.

Larivière añadió que Canadá se ha comprometido a dar la bienvenida a 4.000 refugiados eritreos patrocinados por el Gobierno, que se encuentran actualmente en Sudán y Etiopía, antes de finales de 2018.

Según Dench hay consideraciones políticas involucradas en cómo Canadá se aproxima a la posible reubicación de los eritreos que viven actualmente en Israel.

«Si al reasentar a alguien fuera de su país se está reconociendo indirectamente que el país donde se encuentra no está proporcionando una protección adecuada y una solución duradera a los refugiados allí, un país como Israel podría no tomar a bien a eso», dijo.

Mientras tanto Demoz dijo que su nueva vida en Canadá le ha mostrado cuán injusta es la situación en Israel en realidad.

«Canadá es un país de inmigrantes y tanto el Gobierno canadiense como el público canadiense verán esto como un beneficio… Dicen que la diversidad es nuestra fuerza», dijo.

«En Israel es completamente diferente. [Ellos dicen] «no eres parte de nosotros, eres de un color diferente, eres de un origen étnico diferente, eres de una cultura diferente por lo que no formas parte de nosotros. Nosotros os queremos».

«Olvídate de la condición de refugiado… ¿dónde está la humanidad?»

Fuente: http://www.middleeasteye.net/news/refugee-pushes-canada-help-asylum-seekers-israel-821337504

Esta traducción se puede reproducir libremente a condición de respetar su integridad y mencionar a la autora, a la traductora y Rebelión como fuente de la traducción.