La deuda de las familias pasó del 70,7 por ciento de su renta disponible en 2000 al 115 por ciento en 2006, según publica Caixa Catalunya en su último ‘Informe sobre el consumo y la economía familiar’. Además, la riqueza financiera de las familias se redujo desde el 146 por ciento de su renta en […]
La deuda de las familias pasó del 70,7 por ciento de su renta disponible en 2000 al 115 por ciento en 2006, según publica Caixa Catalunya en su último ‘Informe sobre el consumo y la economía familiar’. Además, la riqueza financiera de las familias se redujo desde el 146 por ciento de su renta en 2000 al 127,8 por ciento en 2006.
En el periodo 2000-2006, el informe descubre que la deuda familiar avanzó a un promedio anual cercano al 16 por ciento, con un incremento de la ratio de endeudamiento sobre el Producto Interior Bruto (PIB) desde el 54,3 por ciento de 2000 al 85,6 por ciento de 2006.
El informe señala también que la riqueza financiera neta de las familias (medida como la diferencia entre los activos financieros en manos de los hogares y su endeudamiento) perdió importancia relativa entre los años 2000 y 2006 y pasó de representar el 146 por ciento de la RFBDA al 127,8 por ciento, a pesar del ligero repunte de tres puntos de este último año.
Entre 2000 y 2006, el incremento sostenido del endeudamiento familiar contrasta con una ralentización de la tasa de aumento de los activos financieros en 2000-2002, afectados por la caída bursátil de esos años y el consiguiente efecto sobre la riqueza financiera neta de los hogares. En valores absolutos, ésta pasó de 706.165 millones de euros en 2000 a 928.260 millones en 2006, lo que implica una tasa de aumento medio anual en torno al cuatro por ciento durante los últimos siete años.
A pesar de los pocos cambios producidos en la estructura del balance financiero de las familias españolas a finales de 2006, Caixa Catalunya destaca el «aumento de la importancia relativa de los activos en renta fija en detrimento de los seguros». El grupo de acciones y participaciones mantuvo en 2006 el 42 por ciento de su peso sobre el total, incluyendo revalorizaciones de importe elevado (en torno a 95.000 millones de euros), que «reflejan el momento alcista de los mercados bursátiles y los beneficios corporativos».
El grupo de efectivo y depósitos conservó también su peso sobre el total en el 38,2 por ciento, mientras los títulos de renta fija pasaron del 2,2 al 2,3 por ciento sobre el total. En cambio, la importancia relativa del grupo de reservas técnicas de seguros disminuyó el pasado año hasta el 14,1 por ciento, desde el 14,8 por ciento de 2005.