Tres mil trabajadores se concentraron en la mañana del viernes 29 de febrero en la plaza de Cibeles de Madrid para reclamar ante la nueva sede del gobierno municipal un convenio justo y la defensa del transporte público. La asistencia no deja de ser sorprendente si se tiene en cuenta que la totalidad de empleados […]
Tres mil trabajadores se concentraron en la mañana del viernes 29 de febrero en la plaza de Cibeles de Madrid para reclamar ante la nueva sede del gobierno municipal un convenio justo y la defensa del transporte público. La asistencia no deja de ser sorprendente si se tiene en cuenta que la totalidad de empleados es de 7500 y la dirección de la empresa ha decretado unos servicios mínimos del 60%.
Minutos antes de las 11 de la mañana ya se coreaban consignas delante del Ayuntamiento presidido por Alberto Ruiz Gallardón referentes a la poca voluntad negociadora del Convenio Colectivo y a la cerrazón para salir del conflicto. La concentración de trabajadores fue aumentando con el paso de los minutos y el espacio destinado fue quedándose cada vez más pequeño hasta ocupar parte de la plaza de Cibeles. Todo un aviso para la manifestación que está convocada para el próximo lunes a las seis de la tarde y que transitará desde Atocha hasta la propia plaza de Cibeles.
No son solo los reclamos económicos los que han motivado la huelga de estos trabajadores. También la defensa del transporte público como derecho universal del que exigen la calidad necesaria y la defensa de sus puestos de trabajo así como de sus condiciones laborales.
El ambiente fue festivo durante todo el acto en el que se pudieron ver banderas y pancartas de todos los sindicatos miembros del Comité de Empresa que, esta vez, han hecho causa común para negociar el convenio colectivo.
La dirección de la empresa, en esta ocasión el Ayuntamiento de Madrid, calificó en su momento de política a esta huelga por desarrollarse en período electoral. Algo que también es criticado por los miembros del Comité de Huelga que aseguran que desde hace meses están intentando llegar a un acuerdo para la firma del Convenio. Y que ha sido precisamente el Ayuntamiento de Madrid quien ha ido demorando el acuerdo hasta llegar a estas fechas en las que la movilización de los trabajadores era la última instancia a la que han tenido que recurrir.
El próximo lunes está convocada una manifestación con los mismos lemas a las seis de la tarde que partirá de la glorieta de Atocha hasta la plaza de Cibeles.
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