Allí donde comienza la vida, el arte, la cultura, los pueblos, la historia; allí donde los seres humanos nos conjugamos con la naturaleza y logramos con ella una unión de futuro, nace la esperanza. De esa esperanza surge Ecoperiodismo ( www.ecoperiodismo.com ), del anhelo de que aun no es tarde para el planeta Tierra, ni […]
Allí donde comienza la vida, el arte, la cultura, los pueblos, la historia; allí donde los seres humanos nos conjugamos con la naturaleza y logramos con ella una unión de futuro, nace la esperanza.
De esa esperanza surge Ecoperiodismo ( www.ecoperiodismo.com ), del anhelo de que aun no es tarde para el planeta Tierra, ni para los seres que lo habitan, ni para los humanos que lo protegemos o destruimos, según posibilidades y aspiraciones.
No es misterio para nadie el uso indiscriminado que hacemos los hombres de los recursos limitados de los cuales disponemos. Los bienes que eran considerados renovables, ya ostentan muchos la categoría de no renovables. Todos aquellos que parecía que nunca se iban a terminar, hoy se ven acosados por el peligro inminente de cambiar la vida o ponerle fin en muchos casos.
Los economistas ambientalistas aseguran que ya no existen recursos renovables, pues todos pueden, según el sobreconsumo, pasar a la otra categoría, e incluso extinguirse para siempre.
Las discusiones sobre si habrá petróleo para terminar el siglo XXI son muy diversas, unos aseguran que quedan reservas para unos pocos años, otros, teniendo en cuenta lo que aún está por descubrirse o los recientes hallazgos, aseguran a esta autora que se morirán nuestros nietos y aun habrá reservas.
¿Pero es eso lo que debe aliviarnos? ¿La certeza de que no dejaremos este mundo sin haber disfrutado todas las bondades de los combustibles y sus industrias en expansión? ¿Acaso no debe importarnos lo que pasará con todas las futuras generaciones, con un planeta que tiene más de cuatro mil 500 millones de años de existencia (según la edad de nuestro sistema solar), y hasta donde creemos, es el único con vida inteligente o quizás, simplemente vida?
Aun siendo egoístas, y pensando solo en nosotros mismos, hijos y nietos, ¿correrán el resto de los recursos la misma suerte del petróleo, en el caso más optimista?
Si ya nos matamos a cañonazos por ese combustible, llamado oro negro, ¿qué haremos, por ejemplo, cuando se nos acabe el agua para beber? El agua, fuente de vida, es hoy un bien preciado, escaso y caro para muchos millones de personas en el globo terráqueo, desafortunadamente los que tienen menos armas para luchar por ella. Pero, ¿y cuando la escasez acose también a los ricos magnates industriales y se vean disminuidas sus reservas? ¿Qué pasará entonces? ¿Qué pasará con los bosques, las plantas, las tierras fértiles? ¿Cómo sustituiremos algo tan básico?
Ecoperiodismo ( www.ecoperiodismo.com ) nace en medio de estos y tantos dilemas: especies desapareciendo, efectos climáticos acabando con las esperanzas de mañana, trasnacionales agotando los recursos vitales (agua, aire, oxígeno), áreas de contaminación irrecuperables y analistas certificando que para el futuro inmediato serán necesarios tres o más planetas Tierra, a fin de satisfacer el creciente e ilimitado consumo humano.
Y es que, tal como lo certificó uno de nuestro colaboradores, Félix Guerra, lo cierto es que tenemos un solo y muy único planeta y si hoy hablamos de muertes, es porque a la corta deberemos hablar también de extinción.
Ninguno de nosotros quisiera escuchar que el ser humano está por extinguirse. Es un titular que sin dudas daría la vuelta al mundo y haría mucho dinero, pero también traería el caos para este orbe, lleno de magias, que apenas logramos controlar.
Lo cierto es que cada día la prensa mundial se hace eco de calamidades ecológicas que acontecen en alguna parte, mientras la realidad supera con creces la información llegada de cualquier latitud. Por ello www.ecoperiodismo.com busca aunar las voces de todo el orbe, los que trabajan por el medio ambiente, los que escriben y luchan por él, los que lo aman y creen que en sus manos está la posibilidad de aportar a esta tarea, que es preservar nuestra propia supervivencia.
Se trata de un proyecto social que intenta comprender el mundo vivo y los grandes dramas de la Tierra, visto desde la mirada de periodistas y especialistas, pero también desde las organizaciones, instituciones o personas comunes. Entre sus grandes desafíos está el de ofrecer una información veraz y amplia sobre los peligros que se ciernen sobre el planeta, así como de las acciones que se realizan para salvarlo.
El portal www.ecoperiodismo.com parte del principio de que todos tenemos responsabilidades con el mundo en que vivimos, y por tanto en el ilimitado camino de socorrer la naturaleza.
Sensibilizar a quienes en sus manos tienen la posibilidad de tomar decisiones estratégicas que contribuyan a revertir los daños ocasionados y evitar que nuevas calamidades hostiguen a nuestros ecosistemas globales, es la mayor aspiración del sitio.
Ha dicho el poeta: «Mi verso es de un verde claro, y de un carmín encendido, mi verso es un ciervo herido, que busca en el monte amparo». Hoy, desde www.ecoperiodismo.com , heridos por los mil arañazos del desarrollo, buscamos amparo para proteger lo que en definitiva, no es más que vida.
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