Un estudio muestra que el éxito de la campaña de base Fight for $15 ha redundado en un alza salarial de 150.000 millones en 9 años para 26 millones de trabajadores estadounidenses.
La campaña del movimiento sindical
de base por un salario mínimo de 15 dólares la hora (Fight for $15) ha
sido aplaudida por activistas y legisladores progresistas, debido a
sus incansables esfuerzos para garantizar sueldos justos y el derecho
de todos los trabajadores a sindicarse. Este miércoles, un nuevo
estudio ha demostrado lo decisiva que ha sido la campaña para cambiar
la vida a decenas de millones de personas en todo EE UU.
La ONG National Employment Law Project (NELP) ha publicado un informe que muestra cómo desde el inicio del movimiento en noviembre de 2012, con el paro de trabajadores de cadenas de comida rápida en Nueva York, su labor ha resultado en un aumento salarial de 150.000 millones de dólares para 26 millones de trabajadores.
“Fight for $15 ha unido a miles de trabajadores en todo el país, que se han organizado para pedir aumentos de sueldo y derecho a sindicarse”, señala Yannet Lathrop, coautora del informe y jefa del equipo de investigación y analista de políticas de NELP. “El informe cuantifica el impacto de este movimiento en términos del número de trabajadores que se han beneficiado de él y de los aumentos de sueldo que han conseguido”.
Lathrop ha escrito el informe con
T. William Leste, profesor de la UnDesde iversidad de San José, y
Matthew Wilson, estudiante de doctorado de la Universidad de Carolina
del Norte. Los autores han descubierto que con las protestas en todo el
país, otras acciones en el espacio público y la presión para un cambio
legislativo como la Ley de aumento de Salarios, Fight For $15 ha
conseguido presionar a “algunas de las empresas más grandes del mundo
para que suban sus escalas salariales y ha influido en la opinión
pública”.
Desde que se formó el movimiento, decenas de ciudades y condados han subido sus salarios mínimos a 15 dólares la hora, incluyendo Nueva York, Sonoma (California) y Washington. Más de una veintena de ciudades y condados también ajustarán sus salarios mínimos al aumento de la inflación prevista este año.
Once estados también han adoptado medidas para que su salario mínimo tienda a los 15 dólares en los próximos años. En el Estado de Florida, controlado por los republicanos, los votantes aprobaron una enmienda constitucional en noviembre de 2020 que subirá el salario mínimo en este Estado a 15 dólares en 2026.
La campaña también ha hecho que algunos de los principales empleadores, como Amazon, Target y Walmart, hayan subido su salario mínimo a 15 dólares la hora, un resultado que ha tenido “un efecto contagio sobre los salarios en las zonas donde están locoalizados estos centros de trabajo”, según un estudio citado en el informe.
Las victorias logradas por Fight For $15 han sido especialmente decisivas para contribuir que se estrechen las diferencias salariales por género o raza. Cerca de 12 millones de los trabajadores que han ganado aumentos gracias al movimiento son personas de color. 76.000 millones de dólares en aumentos han ido a parar a personas de color y 70.000 millones a mujeres.
“Los trabajadores negros y de color que han liderado la lucha por el salario mínimo y el derecho a sindicarse han transformado heróicamente el discurso público sobre los salarios, el poder de los trabajadores y la democracia en los centros de trabajo al mismo tiempo que conseguían importantes victorias legislativas y se enfrentaban a empresas explotadoras”, señaló la directora ejecutiva de NELP, Rebecca Dixon.
En el estudio, la NELP destaca que
a pesar del muy efectivo trabajo de organización de Fight for $15,
todavía hay 20 estados -incluyendo Alabama, Luisiana, Misisipi,
Carolina del Sur y Tennessee-en los que se usa el salario mínimo
federal de 7,25 dólares la hora o no hay salario mínimo.
«Esto
es estructuralmente racista en su diseño y en sus efectos, ya que la
mayoría de los trabajadores negros de EE UU viven en esos estados”,
señaló la NELP en un comunicado. Para que todos los trabajadores puedan
estar en camino de recibir suelos justos, dice el informe, el Congreso
debe aprobar la Ley de Subida de Salarios de 2021.
“El
éxito del movimiento por la subida de salarios, demostrado claramente
por el impacto de las cifras destacadas en este informe, solo vuelve a
poner de manifiesto que los legisladores del Congreso van muy por
detrás de su electorado, porque siguen negándose a subir el salario
mínimo federal”, dice el informe.
Lathrop destaca que este movimiento dirigido por los trabajadores ha ganado aumentos para millones de personas a pesar de enfrentarse “a todos los obstáculos imaginables, desde un sistema cada vez más amañado en contra de los trabajadores y los sindicatos, hasta las intromisión de algunas de las empresas más perversas, que han desplegado a lobistas bien pagados para luchar con uñas y dientes en contra de una subida de los salarios mínimos”.
“Pero al final ganaron los trabajadores”, señala Lathrop. “Lo que debería indicarnos que cuando los trabajadores se organizan, ganan”.
Sobre este artículo – Artículo original: Grassroots Fight for $15 Movement Has Won $150 Billion in Raises for Millions of Workers, Study Shows.
Traducido para El Salto por Diego Sanz Paratcha.
Fuente: https://www.elsaltodiario.com/laboral/salario-minimo-fight-for-15-dollars