«Para triunfar tenemos que afrontar el mundo tal y como es… Las cargas de este joven siglo no pueden caer solo sobre las espaldas de Estados Unidos», se lee en la nueva Estrategia de Seguridad Nacional enviada al congreso por el presidente Barack Obama el pasado 26 de mayo. «Nuestro enemigo no es el terrorismo […]
«Para triunfar tenemos que afrontar el mundo tal y como es… Las cargas de este joven siglo no pueden caer solo sobre las espaldas de Estados Unidos», se lee en la nueva Estrategia de Seguridad Nacional enviada al congreso por el presidente Barack Obama el pasado 26 de mayo. «Nuestro enemigo no es el terrorismo porque el terrorismo es una táctica», ha dicho el asesor presidencial sobre seguridad y contraterrorismo John Brennan, y con ese cargo, en ese país, de terrorismo algo debe saber.
Luego de estas palabras, que contienen hasta un cierto halo de humildad, los creyentes en la política del Cambio tenían derecho a esperar que se descontinuara la práctica de hacer listas para calificar -o más bien descalificar- países en el más puro estilo imperial. Pero no, aquí estamos otra vez ante la bifurcación entre las palabras y los hechos que tanto gusta a los críticos de las administraciones del Partido Demócrata.
Quienes confían en sus virtudes dicen que el actual presidente norteamericano es un buen lector. Quizá por ello Chávez se animó a regalarle esa antología poetizada sobre el terrorismo de estado que es Las venas abiertas de América Latina, y Obama le agradeció con una sonrisa pero, a juzgar por los hechos, no con una lectura.
Sin embargo, no debemos darnos por vencidos con alguien tan bien intencionado. Cierta vez escuché al gran escritor español Alfonso Sastre afirmar que existía una inversión semántica entre las palabras Guerra y Terrorismo: se le llama guerra al terrorismo de los poderosos y terrorismo a la guerra de los pobres, decía Sastre. Y creyendo en el bueno de Obama, que tanto periódico americano tiene que leer, el pobre, pensaba yo que más que un libro como Las Venas abiertas… lo que él necesita es un diccionario o una enciclopedia, algo práctico para los que como él tienen poco tiempo y necesitan ir directo al grano. Ustedes seguro ya están pensando en enviarle a Chávez un buen diccionario para cuando lo vuelva a ver, pero les tengo una propuesta mejor y que conociendo lo que le gustan al presidente norteamericano Internet, los «Blackberry» y todo eso, estoy convencido de que nos lo va agradecer. Es que en junio de 2005 se celebró un Encuentro mundial contra el terrorismo en La Habana y los participantes acordaron reunir información para crear una Enciclopedia en línea sobre el terrorismo de estado en inglés y español.
En el encuentro de La Habana estuvieron Javier Couso, hermano del camarógrafo asesinado por las tropas norteamericanas en Iraq; las Madres de la Plaza de Mayo; Martín Almada, el descubridor de los Archivos de la Muerte en Paraguay; los familiares de los asesinados por Posada Carriles; entre muchos otros. No le vamos a pedir a Obama que antes de hacer su próxima lista se reúna con ellos, sería lo más democrático pero él está seguramente muy ocupado con Irán, Afganistán, Corea, el derrame petrolero y todo lo demás, que aunque él no quiera cae «sobre las espaldas de Estados Unidos», pidámosle solamente que haga click en www.terrorfileonline.org .