Ahí está el dilema para los cubanos del sur del Estado de La Florida. No se puede negar que a pesar de que la comunidad cubano-americana asentada en Estados Unidos ha recibido casi todos sus beneficios y privilegios de los distintos presidentes Demócratas que han pasado por la Casa Blanca, desde los primeros años 60 […]
Ahí está el dilema para los cubanos del sur del Estado de La Florida. No se puede negar que a pesar de que la comunidad cubano-americana asentada en Estados Unidos ha recibido casi todos sus beneficios y privilegios de los distintos presidentes Demócratas que han pasado por la Casa Blanca, desde los primeros años 60 hasta ahora, lo cierto es que los cubanos se han inclinado siempre en el orden político electoral por el Partido Republicano.
El Presidente Demócrata John F. Kennedy fue quien les abrió los brazos a los cubanos y estableció el Centro de Refugiados, dando así inicio a unas serie de beneficios sociales exclusivamente para los exilados cubanos como nunca ha tenido en este país otro grupo de desterrados. ¿Alguien puede negarlo? Ni siquiera el «Peter Pan» Mel Martínez que hoy aspira a Senador por el Partido Republicano por La Florida, puede negarlo.
El Presidente Demócrata Lyndon Johnson estableció los llamados «Vuelos de la libertad» gracias a los cuales mas de 300 mil cubanos tuvieron la oportunidad de asentarse en este país para iniciar una nueva vida en Estados Unidos. ¿Alguien puede negarlo?
Gracias al Presidente Demócrata Jimmy Carter se le abrieron las puertas de Estados Unidos a los que arribaron a este país por el llamado Puente de Mariel. ¿Alguien puede negarlo?
Primero había sido «Camarioca», también bajo el periodo presidencial Demócrata de Lyndon Johnson. Y en tiempos mas recientes como los años 90 llegaron a Estados Unidos otros miles de cubanos que emigraron en balsas desde Cuba que fueron admitidos en este país gracias a la política generosa del entonces Presidente Demócrata Bill Clinton. ¿Alguien puede negarlo?
Pero los cubanos, a diferencia de otros hispanos que han emigrado a Estados Unidos, como son los mejicanos, los puertorriqueños, los dominicanos o los colombianos, se sienten muy «Republicanos». Los cubanos en su inmensa mayoría, eran partidarios de Richard Nixon a pesar del escándalo de Watergate. Como votaron por el ultra conservador Ronald Reagan que no les dio nada, solo que les hablaba bonito de su causa política y que vino a la Esquina de Tejas a comer arroz con frijoles y pan con lechón. ¿Alguien puede negarlo?
Después los cubanos votaron por George Bush padre, que tampoco nada les dio como no fueran prebendas para unos cuantos politicastros de Miami. Pero de Cuba, poco o nada hizo por complacer a sus amigos cubanos de la extrema derecha. ¿Alguien puede negarlo?
Ya para las pasadas elecciones presidenciales del año dos mil, el voto cubano americano era de un sólido 80 por ciento al lado de George Bush el actual Presidente de los Estados Unidos y de su Partido Republicano. !Nadie puede negarlo!
¿Pero será así en estos comicios presidenciales de noviembre cuando el Presidente Bush, para complacer a la extrema derecha cubana de Miami dicta esas crueles medidas que afectan los derechos humanos de la familia cubana? Que la política de Bush contra Cuba tiene el rechazo del pueblo de la isla y de gran parte de los cubanos que viven en Estados Unidos, eso tampoco nadie puede negarlo.
El «Republicanismo» o el «Buchismo» de los cubanos es una fiebre que viene de atrás. Algunos la llaman la fiebre de los malagradecidos, porque los Demócratas han hecho mas por los cubanos que todos los gobiernos Republicanos. !Eso nadie puede negarlo!
¿Y ahora qué? El dilema está ahí. !Bush o mi familia primero! Es la hora de la verdad. !Eso tampoco nadie puede negarlo!