Parece que fuera ayer cuando el bueno de Francis Fukuyama lograra un lugar en el parnaso gringo al cantar loas para la democracia formal, a la que presentaba como el sistema de gobierno óptimo que se impondría quieras que no universalmente después del colapso soviético.Fukuyama, un gringo de pura cepa como tantos otros que han […]
Parece que fuera ayer cuando el bueno de Francis Fukuyama lograra un lugar en el parnaso gringo al cantar loas para la democracia formal, a la que presentaba como el sistema de gobierno óptimo que se impondría quieras que no universalmente después del colapso soviético.
Fukuyama, un gringo de pura cepa como tantos otros que han perdido la cepa de su familia y sus antepasados a cambio de un salario gordo en dólares, hablaba del «fin de la historia» y de la reducción de la peripecia humana en la trágica tarea que está ejecutando el fanático de Bush en Irak, la de enseñar democracia formal a balazo limpio: «O estás conmigo o estás contra mí, musulmano salvaje! ¡Mi dios es más fuerte que tu dios, bleh!» La diabólica broma que Bush está jugando contra su voluntad, contra Irak y contra el mundo cristalizará este 2 de Noviembre de 2004, cuando esa democracia formal que Bush quiere hacer tragar a Irak y al mundo cueste lo que costare reviente en una agonía imperial con las últimas elecciones «democráticas» que USA vaya a ver en su corta vida.
Lo más importante de estas elecciones imperiales no es la identidad del triunfador; después de todo, también esta vez se las arregló el Sistema para presentar candidatos realmente repulsivos (aunque no por las mismas razones) al pobre elector gringo.
No importa si gana Bush, porque USA continuará construyendo sus 14 super-bases en Irak y saldrá de ese lastimado país cuando se enfríe el infierno. No importa si Kerry gana, porque tampoco Kerry va a eliminar la tan temida Ley Patriota que convierte a USA en un estado totalitario ni intenta respetar la Constitución gringa, herida de muerte ya. Lo que importa es que el fanático de Bush y el idiota de Kerry (Bush ganará porque es un fanático cristiano a ultranza; Kerry perderá porque es un idiota de dimensiones titánicas; sólo así se explica su derrota ante Bush, el primer presidente de USA que puede considerarse mentalmente enfermo aunque Fukuyama jamás lo dirá)Š Bush y Kerry se las han arreglado, decíamos, para reventar el Sistema como si fuera un gringo gordo que se ha tragado dos tacos de dinamita.
El Sistema ha reventado ya: cientos, sino miles, de abogados han presentado sus demandas ante cientos de jueces a lo largo y ancho del Imperio para demostrar que estas son las elecciones más sucias que haya visto el mundo, incluidos los primeros griegos.
No sólo acusan Republicanos a Demócratas y Demócratas a Republicanos (izquierda y derecha de la más brutal plutocracia que haya visto la especie) de toda clase de trucos, juegos sucios, zancadillas detestables y trampas feroces, sino que señalan y muestran máquinas «digitales» que no dejan huella en papel de millones de votos (e impiden probar matufias perpetradas con millones de votos) sino que muestran ante el mundo todo que Florida, Texas y California están «arreglados» de manera tal que USA jamás volverá a ver «elecciones limpias» , así sea con comillas.
Ha reventado tan bien el Sistema que las autoridades nacionales de educación distribuyeron esta semana instrucciones para que cada maestro en cada escuelas fuerce a cada alumno a ponerse de rodillas bajo su escritorio y a rezar al dios que mejor le guste cuando estallen «las elecciones» del 2 de Noviembre y no quede otra cosa para maestros y alumnos que esperar de rodillas el fin del mundo. Esas instrucciones se refieren específicamente al 2 de Noviembre de 2004 y a los sucesos que seguirán a ese ejercicio anti-democrático.
Está tan reventado ya el Sistema ya que las fuerzas represivas policía, FBI, Guardia Nacional y cualquier fanático armado hasta los dientes y dispuesto a ejecutar «arrestos civiles» están listas para recibir el amanecer del 3 de Noviembre con la mayor exhibición de fuegos no-artificiales que haya visto la patria de los libres.
¿Qué dimensiones tendrá tal exhibición? Si se considera que la mitad de los estantes y habitantes de USA son tan fanáticos como Bush y están con él hasta que se enfríe el infierno y que la otra mitad está con Kerry y no está dispuesta a dejarse robar las elecciones como se las robara Bush en 2000 y que este es el momento en que más polarizado está el pueblo gringo desde la Guerra de Secesión, puede esperarse que las balas perdidas y las explosiones fortuitas calienten ese amanecer de modo más que espectacular. Aquí es necesario recordar que el libre trafico de armas en USA incluye la libertad de comprar desde pistolas.22 hasta tanques ShermanŠ y que nadie se haría de ascos si se le ofrece una Bomba A de bolsillo de esas que se dice traerán al Imperio los terroristas «de verdad».
Para un observador que se ha gastado los últimos meses en tratar de hacer comprender a sus escasos lectores la realidad sencilla y simple de que USA no es una democracia formal desde el 9/11 a mediodía es más difícil aún el tratar de hacer entender a propios y extraños que estas elecciones malhadadas de 2004 son la bomba política que hizo trizas de la «democracia» de USA y dará un golpe mortal a la democracia, formal o de la otra, sea donde sea que aún exista.
Ello significa: regímenes militares y dictatoriales en el Tercer Mundo (como sucedió en Bolivia, cuando el triunfo de Reagan le pareció una carta blanca al general García Meza, quien liquidó a miles de bolivianos en tres días de «gloria») ; retorno de las guerras intestinas en Africa, Latinoamérica, Las Filipinas y países de atmósfera política similar; posibles guerras locales en Sudamérica; endurecimiento de las relaciones entre USA y la Unión Europea (la Europa «vieja» y la «nueva», dedicadas a aprender a tratar con una dictadura instalada en USA) y, por supuesto, la continuación de la feroz guerra entre fanáticos cristianos y fanáticos musulmanes en todo el mundo.
Algo es ya evidente, hasta para los ciegos: Bush ha logrado tantos objetivos atribuidos a los terroristas musulmanes que bien puede ganar la corona del Mejor Terrorista de la Década aunque no sea agradable el reconocer que es un terrorista cristiano.
Desde el 2 de Noviembre (dentro de siete días) comienza, pues, a despecho de Fukuyama y otros servidores del Sistema ya difunto, el Milenio Chino. Más nos vale aprender a hablar chino con la rapidez con que muchos se dedicaron a aprender inglés hasta ayer mismo. Feliz Navidad.