Recomiendo:
0

El «rescate» o el «préstamo»: un auténtico saqueo… a mano armada

Fuentes: Rebelión

Un análisis somero de los presupuestos generales del Estado nos confirma la definición leninista de éste: «una banda de hombres armados». Las cifras son elocuentes (*): – Educación: 2.230 millones de euros – Sanidad:    3.974 – Seguridad ciudadana e instituciones penitenciarias: 8.000 – Defensa: 7.250  (*) Obsérvese que estas cifras corresponden a gastos de […]

Un análisis somero de los presupuestos generales del Estado nos confirma la definición leninista de éste: «una banda de hombres armados». Las cifras son elocuentes (*):
– Educación: 2.230 millones de euros
– Sanidad:    3.974
– Seguridad ciudadana e instituciones penitenciarias: 8.000
– Defensa: 7.250 
(*) Obsérvese que estas cifras corresponden a gastos de la administración central del Estado y no incluyen los gastos de las comunidades autónomas en educación y sanidad (mucho más importantes que los de la administración central), que corresponden a competencias en gran parte transferidas ni tampoco los gastos de «seguridad ciudadana» correspondientes a competencias transferidas a Cataluña, Euskadi y Navarra. Mantenemos estas cifras como referencia, porque la administración que contrae el préstamo/rescate es la central.

El Estado Español (administración central) se gasta en represión y control de la población unos 15.000 millones de euros, más del doble que en las partidas de educación y sanidad sumadas.

Lo importante es saber para qué sirven estos hombres armados y qué tipo de reparto de la riqueza garantizan en último recurso. Esto también se desprende con claridad de la estructura de los presupuestos del Estado. Si tenemos en cuenta que el Estado Español ha solicitado, para salvar a la banca un préstamo de 100.000 millones de euros, podemos hacer los siguientes cálculos:
100.000 millones son el equivalente de un poco menos del 10% del PIB español (1.062.591 millones de euros) y corresponden a casi un tercio del gasto público español (311.000 millones de euros.
100.000 millones son casi 50 años de presupuesto de educación y 25 de sanidad.

 

En conclusión, para devolver ese préstamo, los gobiernos españoles que acepten la lógica del endeudamiento tendrían que suprimir la educación y la sanidad públicas durante décadas o privatizarlas enteramente. Queda, naturalmente, otra partida de donde se puede transferir riqueza pública a manos privadas: las pensiones. Estas constituyen algo más de la mitad del gasto público: 175.382 millones.  En Rusia, durante la terapia de choque, la brutal reducción de las pensiones o su simple impago causaron una caida vertiginosa en la esperanza de vida, debido a la sobremortalidad de las personas de edad. El pago de la deuda requerirá, por lo tanto una fuerte reducción del gasto en pensiones y, accesoriamente en las partidas cuantitativamente mucho menos importantes, pero decisivas para la vida civilizada de la ciudadanía, que constituyen la sanidad o la educación. Sin olvidar, naturalmente la privatización masiva de patrimonio público.

 

Como vemos, el «préstamo en condiciones favorables» constituye una auténtica transfusión de sangre… hecha por el Conde Drácula a sus víctimas.

Es urgente reaccionar: protegernos con ajos y plantar estacas en el corazón del régimen, centrando todas las reivindicaciones de los movimientos sociales en una sola: el impago inmediato de la deuda odiosa.

(fuente: La información.com: en qué gasta España)

Blog del autor: http://iohannesmaurus.blogspot.be/2012/06/el-rescate-o-el-prestamo-un-autentico.html

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.