Irak, Afganistán y Pakistán (que están en Asia) distan de ser los únicos teatros de operaciones extraterritoriales de Estados Unidos. Para confirmar que los ataques preventivos que tanto gustaban al paladar de George W Bush, Richard Cheney y Donald Rumsfeld están a la orden del día – mientras Barack Obama almorzaba frugalmente con Bill Clinton […]
Irak, Afganistán y Pakistán (que están en Asia) distan de ser los únicos teatros de operaciones extraterritoriales de Estados Unidos.
Para confirmar que los ataques preventivos que tanto gustaban al paladar de George W Bush, Richard Cheney y Donald Rumsfeld están a la orden del día – mientras Barack Obama almorzaba frugalmente con Bill Clinton ayer en Nueva York-, un helicóptero estadounidense bombardeaba Somalia (África) para asesinar a un supuesto dirigente de Al Qaeda (o Al Qaida).
Un cable de la Agencia Francesa de Prensa lo informó de la siguiente manera:
WASHINGTON, 14 septiembre 2009 (AFP)- Un importante militante de Al Qaida, que figura en la lista de los sospechosos de terrorismo más buscados por el FBI, fue muerto el lunes en una incursión militar de Estados Unidos en el sur de Somalia, dijo a la AFP un funcionario norteamericano.
El funcionario, que requirió el anonimato, mencionó al muerto como Saleh Ali Saleh Nabhan, un keniano que era buscado para interrogarlo sobre los ataques de 2002 en un hotel de Mombasa y en una línea aérea israelí.
ABC News y Fox News, citando funcionarios estadounidenses, afirmaron que Nabhan fue muerto cuando por lo menos un helicóptero norteamericano disparó sobre un convoy que transportaba presuntos objetivos de Al Qaida en el sur de Somalia.
Un funcionario estadounidense dijo a ABC que un buque norteamericano había permanecido cerca para monitorear la situación y proporcionar asistencia si fuera necesaria.
Según fuentes de ABC, el cuerpo de la víctima está actualmente bajo custodia estadounidense.
De esta acción se desprende una vez más que la legislación internacional y los principios más elementales que atañen a los derechos humanos no tienen ningún valor para Estados Unidos.
Aquí se violó la soberanía de un país independiente y ni que hablar de la presunción de inocencia del supuesto combatiente de Al Qaeda. Lo más seguro es que junto al keniano hayan muerto otros seres humanos que lo acompañaban, pero esto tampoco tiene ninguna trascendencia.
El mismo cable dice que las autoridades del FBI buscaban al dirigente para interrogarlo. Parece que esa voluntad de establecer justicia no era muy profunda y que si algún ser vivo entra en la categoría de militante de Al Qaeda, este pierde automáticamente su condición humana.
Me pregunto qué ocurriría si un avión ruso de la fuerza aérea venezolana bombardeara el domicilio de Luis Posada Carriles en Miami y en la acción murieran 10 ó 15 estadounidenses más.
Eso seguro que sería noticia, además de justificativo para desatar una nueva matanza de proporciones.
PD: Antes de cerrar esta nota confirmo mis presunciones con otro cable de la agencia EFE, 3 personas acompañaban al dirigente asesinado y también murieron, sus cuerpos fueron secuestrados por soldados estadounidenses, por lo que ademas de violar la soberanía aérea violaron la terrestre.