La guerra nuclear ya comenzó con el Caballo de Troya de las bombas y proyectiles de uranio utilizados en Iraq y Afganistán. Los efectos de la guerra del uranio llegaron a casa en los cuerpos de los veteranos que participaron en la primera guerra del Golfo, quienes transmitieron a sus mujeres los destructivos efectos genéticos […]
La guerra nuclear ya comenzó con el Caballo de Troya de las bombas y proyectiles de uranio utilizados en Iraq y Afganistán. Los efectos de la guerra del uranio llegaron a casa en los cuerpos de los veteranos que participaron en la primera guerra del Golfo, quienes transmitieron a sus mujeres los destructivos efectos genéticos en el «semen ardiente» y éstas los pasaron a hijos que nacieron sin brazos y con otras mutaciones. 240.000 veteranos de la Guerra del Golfo I están en inhabilidad médica permanente y más de 11.000 ya murieron, casi todos «carne de cañón» (o de uranio) pobre, de origen latino, afro-americano o asiático.
Toneladas de uranio han caído sobre Iraq y Afganistán. Los efectos del polvo metálico desplegado por los vientos, las tormentas de arena, el agua, el suelo y los seres vivos afectan también a una amplia región que está respirando partículas de uranio en Irán, Paquistán, Turquía, Turkmenistán, Uzbekistán, Rusia, Georgia, Azerbaiján, Kazakhstán, China, India, Arabia Saudita, Siria, Líbano, Palestina e Israel.
Estados Unidos lanzó mini bombas atómicas experimentales en los alrededores de Kabul, sin que nadie se enterara, salvo las víctimas. Desde hace una década están naciendo niños sin ojos ni encéfalo y con otras horrorosas malformaciones genéticas. El gobierno de Washington y los grandes medios de comunicación mantienen esta tragedia en la oscuridad del secreto. Un puñado de científicos, familiares de veteranos de guerra y gente de prensa lucha desesperadamente por contener la proliferación de la contaminación radioactiva en Euro-Asia.
El cáncer se incrementa en más de 1.000 por ciento.
Todo esto se está conociendo por el estudio anual «Proyecto Censurado» de la Universidad de Sonoma, California, sobre los 25 temas más ocultados por la gran prensa de EE.UU. El mensaje implícito de esta cuarta entrega de los temas más censurados es ¡Hagan algo por parar la criminalidad de George W. Bush! (EC):
Encuentran altos niveles de uranio en tropas y civiles por Bob Nichols, Tedd Weyman, Stephanie Hiller, Juan González, Niloufer Bhagwat J., Jennifer Lillig y Kenny Crosbie
La población civil y las tropas de ocupación de Iraq y Afganistán están contaminadas con niveles asombrosos de radioactividad a causa del uranio empobrecido y no-empobrecido utilizado abundantemente por Estados Unidos después del 11 de septiembre de 2001 en la fabricación de toneladas de municiones. Los investigadores dicen que los países más cercanos también sentirán los efectos.
En 2003, científicos del Centro de Investigación Médica de Uranio (UMRC, en inglés) hicieron análisis de orina de civiles afganos. Hallaron que el 100% de las muestras contenían uranio no-empobrecido(NDU) 4 a 20 veces más que los niveles normales. El equipo de investigación de UMRC estudió seis lugares, dos en Kabul y otros en el área de Jalalabad. Los civiles de Afganistán fueron examinados cuatro meses después de los ataques de Estados Unidos y sus aliados.
El NDU es más radiactivo que el uranio empobrecido (DU, «depleted uranium»). Durante los últimos diez años causó variados tipos de cáncer y severos defectos congénitos en la población infantil. Solamente en 2003, cayeron sobre Iraq cuatro millones de libras de uranio radiactivo (1,84 toneladas). El polvo de uranio permanece en los cuerpos de nuestras fuerzas armadas cuando regresan a casa, según los exámenes a nueve soldados del 442° regimiento de Policía Militar que prestaron servicios en Iraq practicados en diciembre de 2003.
Atendiendo a un requerimiento del diario New York Daily News, el gobierno de EE.UU. estimó prohibitivo el costo del tratamiento de mil dólares por cada soldado afectado, aunque las pruebas establecieron que cuatro de los nueve hombres fueron contaminados con altos niveles del DU, probablemente, por inhalar el polvo de las cáscaras de uranio empobrecido de las municiones de EE.UU. Varios hombres presentaron rastros de U-236, otro isótopo de uranio que sólo aparece en procesos de reacción nuclear.
La mayoría de las armas americanas (cohetes, bombas «elegantes», bombas «mudas», balas, proyectiles de tanques, mísiles de crucero, municiones, etc.) contienen altas cantidades de uranio radiactivo, empobrecido o no-empobrecido. La detonación de estos proyectiles dispersa un polvo radiactivo que tiene un promedio de vida de 4,5 mil millones de años e ingresa a los seres humanos por inhalación, para quedarse en sus cuerpos. Básicamente, es un contaminante que está presente permanentemente en el ambiente, distribuido por las tormentas de polvo o dispersado por cualquier fuente de agua cercana. Una vez ingerido, desarrolla partículas subatómicas que rebanan el ADN.
El equipo de campo de la UMRC encontró a varios cientos de civiles afganos con síntomas agudos de envenenamiento por radiación junto con síntomas crónicos de contaminación interna de uranio, incluyendo problemas congénitos en recién nacidos. Los civiles locales describieron grandes y densas nubes de polvo y de humo originadas en el punto del impacto, con un olor acre y quemante que afectaba a las fosas nasales, la garganta y la zona respiratoria superior.
Los sujetos de todas las locaciones presentaron perfiles y cronologías idénticas del síntoma. Las víctimas reportaron dolores en la columna cervical, en la parte superior de los hombros y en la base del cráneo, además de dolores más bajos detrás de los riñones, debilidad muscular y de articulaciones, dificultades para dormir, dolores de cabeza, problemas de memoria y desorientación.
En la Conferencia de Armas de Uranio llevada a cabo en octubre de 2003 en Hamburgo, Alemania, científicos independientes de todo el mundo atestiguaron un aumento enorme en las deformidades y en los cánceres de nacimiento dondequiera que fueron utilizados el NDU y el DU. El profesor Katsuma Yagasaki, científico de la universidad de Ryukyus, Okinawa, calculó que las 0,800 toneladas de DU arrojadas en Afganistán son el equivalente radiactivo de 83.000 bombas de Nagasaki. La cantidad de DU utilizada en Iraq equivale a 250.000 bombas de Nagasaki.
El oncólogo Dr. Jawad Al-Al-Ali, entrenado en el Reino Unido, mostró a la Conferencia fotografías ilustrando los tipos de deformidades y de tumores de nacimiento que observó en el hospital Saddam Teaching, de Basra, justo antes de la guerra del 2003. Las tasas de cáncer aumentaron dramáticamente sobre los quince años anteriores. En 1989 hubo 11 anormalidades por 100.000 nacimientos, pero en 2001 aumentaron más de 1.000%, con 116 casos por cada 100.000 nacimientos. En 1989 murieron 34 personas por cáncer, pero en 2001 hubo 603 muertes. La guerra de 2003 aumento exponencialmente estas cifras.
En una reunión para Afganistán del Tribunal Penal Internacional, llevada a cabo en Tokio, en diciembre de 2003, EE.UU. fue procesado por múltiples crímenes de guerra en Afganistán, entre ellos el uso de DU. Leuren Moret, presidenta de Científicos para los Pueblos Indígenas y de la Comisión Ambiental de la ciudad de Berkeley, atestiguó que los elementos radiactivos de las armas de uranio dispersados por el despliegue militar de EE.UU. en Afganistán generaron contaminación del aire, del agua y de las fuentes de alimentos, cuyos efectos serán padecidos en Irán, Paquistán, Turquía, Turkmenistán, Uzbekistán, Rusia, Georgia, Azerbaiján, Kazakhstán, China y la India. Los países afectados por el uso de armas de uranio en Iraq incluyen a Arabia Saudita, Siria, Líbano, Palestina, Israel, Turquía e Irán.
Los bombazos de uranio contaminaron el aire, el agua, el suelo y seres vivos y humanos, incluidos los invasores estadounidenses que regresan a casa enfermos.
La gente del mundo se ha familiarizado con la figura del «arma que fuma», tan estimada por los escritores de misterio y asesinato. Muchos piensan que una vez que se descubre el «arma que fuma» en cualquier misterio, llegó la hora para los «tipos malos». Tan sólo son deseos.
Las víctimas de «armas que fuman» son los sargentos Héctor Vega, Ray Ramos, Agustín Matos y el Cpl. Anthony Yonnone, todos de la «Guard Unit» 442° de Nueva York. Son los primeros casos confirmados de exposición a inhalaciones de uranio exudado del conflicto actual en Iraq. El Dr. Asaf Durakovic, profesor de medicina nuclear en el Centro de Investigación Médica de Uranio (http://www.umrc.net/) condujo las pruebas de diagnóstico. La historia fue publicada el 3 de abril de 2004 en el «New York Daily News». No hay tratamiento, ni hay curación. (http://www.nydailynews.com/).
Leuren Moret informó: «En mi investigación sobre el uranio empobrecido durante los últimos 5 años, la información que más perturba se refiere al impacto en los niños no-nacidos y en las generaciones futuras de los soldados de ambos lados que prestan servicio en las guerras de uranio empobrecido, y para los civiles que deben vivir permanentemente en las regiones contaminadas con radiactividad. Hoy, más de 240.000 veteranos de la guerra del Golfo están en inhabilidad médica permanente y más de 11.000 ya murieron. Se les ha denegado asistencia médica, efectuarles pruebas e indemnizarlos por las enfermedades relacionadas con la exposición al uranio empobrecido desde 1991».
Moret continúa: «Trajeron a casa el peor uniforme en sus cuerpos. En algunas familias, los niños nacidos antes de la guerra del Golfo son los únicos miembros sanos. Las esposas y los allegados femeninos de los veteranos de la guerra del Golfo han divulgado una condición conocida como «síndrome ardiente del semen» y ahora padecen internamente contaminación de uranio empobrecido introducido en el semen de los veteranos expuestos. Muchos reportaron enfermedades reproductivas como la endometriosis. En un estudio del gobierno de EE.UU., conducido por el Departamento de Asuntos de Veteranos, en el 67% de los bebés posteriores a la guerra del Golfo se encontraron defectos de nacimiento o enfermedades serias. Nacieron sin ojos (anophthalmos), oídos, o les faltaban órganos, piernas y brazos ausentes, dedos fundidos, daño en las tiroides u otras malformaciones de órganos».
Niño estadounidense nacido sin brazos, recién nacido iraquí sin encéfalo
Moret concluyó: «En Iraq es mucho peor. Incluso allí los bebés nacen sin los cerebros, los órganos está fuera del cuerpo o las mujeres dan a luz pedazos de carne. En los bebés nacidos en Iraq en 2002, la incidencia de anophthalmos fue 250.000 veces mayor (20 casos cada 4.000 nacimientos) que la ocurrencia natural, que es de un caso entre 50 millones de nacimientos. (Fotos en http://www.savewarchildren.org/exhibitPictures.html)».
La UMRC encontró uranio artificial en cráteres de bombas, arroyos circundantes y cuerpos de civiles expuestos al bombardeo de la coalición de los EE.UU. en Afganistán. Los civiles examinados presentaron los síntomas clásicos de contaminación interna por uranio, que comenzó después de la exposición al bombardeo. La presencia de uranio artificial en muestras ambientales y biológicas indica que los núcleos de los cabezales de las bombas «bunker buster» usadas en Afganistán fueron hechas de uranio.
El uranio es un elemento tóxico, radiológica y químicamente. Se ha demostrado clínicamente que causa varios tipos de cáncer y malformaciones congénitas (defectos de nacimiento). La contaminación interna de uranio es responsable de una variedad de problemas sistémicos y orgánicos de los sistemas humanos nunca considerados o estudiados como posible causa de la llamada «Enfermedad de la Guerra del Golfo» por los programas de salud del Departamento de Defensa o de los Veteranos. Los síntomas de contaminación interna por uranio entre civiles de Iraq y Afganistán son idénticos a los síntomas de los veteranos de EE.UU. y de la coalición que padecen la «Enfermedad de la Guerra del Golfo».
El Pentágono, o Departamento de Defensa (DD) interfirió la capacidad de la UMRC para manejar la publicación de sus estudios con un programa progresivo y persistente de falsa información de prensa contra la UMRC, utilizando su control sobre las concesiones de investigación en ciencia para refutar los resultados científicos y destruir la reputación de la UMRC, de su personal científico, de sus médicos y de sus laboratorios. La UMRC fue la primera organización de investigación independiente que encontró uranio empobrecido en los cuerpos de los veteranos de Estados Unidos, del Reino Unido y de Canadá de la Guerra del Golfo I. Posteriormente, después de la «Operation Iraqi Freedom» (Operación Libertad Iraquí), la UMRC encontró uranio empobrecido en el agua, el suelo y la atmósfera de Iraq, así como en las muestras biológicas proporcionadas por civiles iraquíes.
Los Estados Unidos, varios de sus socios de la coalición y sus aliados de la OTAN experimentan en los campos de batalla desde comienzos de los años 70, desplegando metales pesados químicamente tóxicos y radiactivos utilizados en varios tipos de balas, bombas y el núcleo del cabezal de los proyectiles. El polvo de uranio se recicla del tratamiento de nuevo combustible nuclear, después de que se haya mezclado con los residuos del reactor nuclear y el combustible pesado, para proveer a la industria manufacturera de armas no-fisibles.
El uranio es el excedente preferido entre todos los residuos de metales «balísticos» (por ejemplo, plomo, hierro, tungsteno) porque ofrece un conjunto de características metalúrgicas únicas: es un metal extremadamente denso pero dúctil (no frágil); es pirofórico (el polvo de uranio se quema espontáneamente en la temperatura ambiente); y el metal sólido de uranio entra en auto ignición a 76,7° C (170° F). El uranio tiene propiedades muy inusuales que no posee cualquier otro metal; «se afila a sí mismo» («self-sharpening»), o sea, que cuando golpea un blanco a alta velocidad (1 km x segundo o 3.600 km/hora) erosiona y rompe de una manera que «realifla» continuamente su punta -bajo estas condiciones, las puntas o cabezas de proyectiles de todos los demás metales se aplanan rápidamente como hongos.
Estas características otorgar al uranio una eficacia superior como aleación penetrante en el cabezal de los proyectiles, capaz de practicar boquetes a la galvanoplastia de los blindajes más duros y resistentes, reteniendo su capacidad de penetrar a mayores distancias y a bajas velocidades en 15 % más que el metal alternativo más utilizado, el tungsteno. El uranio ardiente es difícil de extinguir y estalla al contacto con el agua.
El uranio mezclado con metales líquidos penetrantes, en las armas clasificadas llamadas «shaped charges» (cargas formadas) y «explosively formed penetrators» (penetradores formados explosivamente), especialmente diseñados para altas velocidades, puede agujerear hasta 6 metros de las estructuras de concreto super reforzado de un bunker. Las características de dureza (densidad), resistencia (ductilidad) y peso (sostenimiento del ímpetu) del uranio también lo hacen óptimo para el núcleo del cabezal de las robustas bombas penetrantes de tierra dirigidas a blancos subterráneos y cuevas.
Los grandes medios de EE.UU. y Canadá no demuestra ningún interés general en esta historia, abandonada al interés investigativo aunque la gran prensa europea muestra más interés en seguir su desarrollo. El NY Daily News del 5 de abril de 2004 cubrió los resultados de los estudios de la UMCR sobre los veteranos de EE.UU. de la Guerra del Golfo II. El DD mintió y engañó al público y a los veteranos en una tentativa de minar la significación de la historia. Hubo cobertura significativa de la prensa alternativa y de los medios de Internet.
La técnica de la cobertura consistió en conducir la historia para promover un debate entre el gobierno y los expertos independientes, donde el interés público fue más estimulado por la polarización de las publicaciones que por la verdad científica y médica. Las publicaciones fueron sistemáticamente confundidas y desinformadas por el gobierno, las agencias reguladoras de Naciones Unidas (WHO, UNEP, IAEA, CDC, DOE, etc.) y el sector defensa (militares, fabricantes y diseñadores de armas).
Esta es una historia impactante, puesto que sugiere que se lanzaron bombas nucleares experimentales alrededor de Kabul hacia el final de la guerra Operación Libertad Duradera. (-Significará «Radiación Duradera»?) -Y qué ha caído sobre Iraq?
La continuación de la investigación demuestra que todos estamos irradiados aquí en Estados Unidos, a un costo enorme para la salud pública. Sólo las tasas de cáncer demuestran que la mutación genética está aumentando rápidamente desde que se probó la primera bomba en Álamo Gordo, Nuevo México, en 1945. !Pero los efectos del bajo nivel de radiación han sido ocultados sistemáticamente a la visión pública!
En abril, después que los veteranos enfermos de la guerra actual no consiguieran ninguna ayuda del Pentágono, la madre de uno de los soldados acudió a los periódicos. Juan González, del New York Daily News, lanzó una investigación. El diario financió los estudios del Dr. Asaf Durakovic sobre nueve hombres, encontrándose que cuatro de ellos estaban contaminados con uranio. El News consiguió la atención de la senadora Hilary Clinton, de Nueva York, quien llevó a cabo una tele conferencia pero …a Durakovic !no le permitieron participar!
Amy Goodman entrevistó más adelante a Durakovic en !Democracy Now!, durante el mismo mes no supo si fue gracias a mi historia. AlterNet rechazó la historia porque Juan Fahey, su fuente sobre el uranio empobrecido, no estuvo de acuerdo con ella. No sé de ningún otro medio importante que haya tomado la historia y no encontré tampoco ninguna referencia a cualquier crónica de González. La BBC y el Seattle Post Intelligencer lo cubrieron antes que yo.
Para aprender más sobre las armas de uranio hay que investigar en la web. Es un gran tema. Comienza con la Conferencia Mundial sobre Armas de Uranio efectuada en octubre pasado en Hamburgo: (http://www.uraniumweaponsconference.de)
La exposición en Power Point del Dr. Ali muestra las consecuencias más cruciales de la guerra Golfo Pérsico Uno – los bebés deformados. !También, el Ensamble WBW!
Women For a Better World (Mujeres por un Mundo Mejor) inició una campaña de información para educar al público sobre el uranio empobrecido, con énfasis en la contaminación de Eurasia central, especialmente a la gente joven que pudo ser llamada a unirse a los militares y a sus familias. Navegadores: Vengan a nuestro sitio web, para más información, y firmen una petición oponiéndose a esta figura por la misma razón (http://www.awakenedwoman.com/wbw.htm).
Fuentes de Proyecto Censurado:
URANIUM MEDICAL RESEARCH CENTER, Enero 2003 Título: «UMRC’s Preliminary Findings from Afghanistan & Operation Enduring Freedom» And «Afghan Field Trip #2 Report: Precision Destruction- Indiscriminate Effects» Autor: Tedd Weyman, UMRC Research Team
AWAKENED WOMAN, Enero 2004 Título: «Scientists Uncover Radioactive Trail in Afghanistan» Autor: Stephanie Hiller
DISSIDENT VOICE, Marzo 2004 Título: «There Are No Words.Radiation in Iraq Equals 250,000 Nagasaki Bombs» Autor: Bob Nichols
NEW YORK DAILY NEWS, Abril 5, 2004 Título: «Poisoned?» Autor: Juan González
INFORMATION CLEARING HOUSE, Marzo 2004 Título: «International Criminal Tribune For Afghanistan At Tokyo, The People vs. George Bush» Autor: Professor Ms Niloufer Bhagwat J.
Evaluador Académico: Jennifer Lillig, Ph.D.
Investigador estudiantil: Kenny Crosbie