En el día de la fecha, el mundo se vio sacudido por una ola de atentados con características terroristas en distintos países, que ya la prensa global está adjudicando a los grupos extremistas del islam. El primero de los atentados sucedió en Francia, en una planta química en las cercanías de la ciudad de Lyon, […]
En el día de la fecha, el mundo se vio sacudido por una ola de atentados con características terroristas en distintos países, que ya la prensa global está adjudicando a los grupos extremistas del islam.
El primero de los atentados sucedió en Francia, en una planta química en las cercanías de la ciudad de Lyon, donde un hombre apareció decapitado; su cabeza se encontró cubierta y con inscripciones árabes. Hubo más heridos dentro de la planta, mientras que un presunto sospechoso resultó fallecido a balazos por la seguridad local, y otro capturado. El presidente de Francia, François Hollande, declaró que se trataría de un atentado terrorista por parte de grupos radicales musulmanes, decretando el máximo nivel de alerta terrorista en la zona por tres días.
El segundo atentado ocurrió en un país del Golfo, Kuwait, en una mezquita que se encontraba con mucha gente ya que se trataba de la hora habitual del rezo de los viernes. El caso dejó el saldo de casi 30 fallecidos junto a decenas de heridos. Este atentado fue el único del cual el Estado Islámico (EI) se adjudicó las responsabilidades de los hechos mediante su portavoz, Abu Mohamed Al Adnani, quien salió a asumir los hechos, y a la vez mencionar la posibilidad que podrían llegar más acciones contra «los enemigos del islam».
Si bien Kuwait es un país que mantiene cierta calma política y social en comparación del resto de la región, y donde la población se divide de manera bastante pareja entre sunnista y chiítas, habrá que estar atentos del porqué el EI lo eligió como víctima el día de hoy.
En cuanto a Túnez, el tercer lugar de los atentados, hubo un ataque feroz en una playa de un hotel, donde dos hombres armados entraron y dispararon contra las personas que se encontraban en el lugar, causando el fallecimiento de casi 30 personas, cifra no oficial todavía. Recordemos también que Túnez sufrió la brutalidad del EI en Marzo, cuando se llevó a cabo un atentado en el Museo del Bardo, dejando decenas de víctimas fatales y heridos.
Por último al Este africano, más precisamente en Somalia, la agrupación fundamentalista islámica Al Shabab, que se la vincula con Al Qaeda, hizo detonar una coche bomba en una base militar, para después ingresar a la misma y tomar el lugar por asalto. El grupo extremista se adjudicó el episodio, donde al retirarse plantó una bandera de la agrupación dejando destrozos e incendios en la base.
A un año de la declaración del Califato por parte del Estado Islámico, la situación sigue siendo más que delicada en la región y cada vez hay que estar más atento al transcurrir de los hechos en Medio Oriente y cercanías. Recordemos que transcurrimos el mes sagrado de los musulmanes, el Ramadán, lo cual no es de menor importancia para los sucesos ocurridos, y deja entre ver la posibilidad de más atentados durante el mismo.
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