Decir que la victoria de Zohran Mamdani en las primarias del Partido Demócrata para la alcaldía de Nueva York el 24 de junio fue una completa estupefacción sería quedarse monumentalmente corto. Se impuso oficialmente a su oponente, el ex gobernador de Nueva York Andrew Cuomo, que reconoció su derrota la misma noche de la votación. Aunque es demasiado pronto para evaluar los acontecimientos que se producirán antes de la votación a la alcaldía del 4 de noviembre, hay algunos puntos que sí sabemos y, lo que es más importante, otros que desconocemos.
Lo que sí sabemos es que Mamdani es un musulmán del sur de Asia, nacido en Kampala, Uganda. Su madre es la aclamada directora de cine india Mira Nair. Su padre, Mahmood Mamdani, es un profesor que dio clases en Ciudad del Cabo (Capetown), Sudáfrica, y que ahora enseña en la Universidad de Columbia, en Nueva York.
Mamdani, miembro de la Asamblea del Estado de Nueva York en representación de un distrito de Queens, se presentó con una plataforma de congelación de alquileres y viviendas asequibles, autobuses rápidos y gratuitos, guarderías sin coste y tiendas de comestibles de propiedad municipal. (zohranfornyc.com/es/platform) Es miembro de los Socialistas Democráticos de América, una coalición reformista que suele situarse a la izquierda de la estructura del Partido Demócrata.
Aunque la victoria de Mamdani el 24 de junio entusiasmó a medio millón de residentes sudasiáticos, al parecer junto con muchos votantes jóvenes de la ciudad de Nueva York, suscitó una fuerte condena por parte de Wall Street y las grandes corporaciones inmobiliarias, junto con políticos celosos, de derechas y pro israelíes, que gastaron 25 millones de dólares en la campaña de Cuomo.
Estas fuerzas etiquetaron falsamente a Mamdani de «terrorista» y «antisemita» a pesar de que Mamdani ha declarado que cree que Israel tiene «derecho a existir». De hecho, algunos republicanos han pedido la deportación de Mamdani, que se convirtió en ciudadano estadounidense cuando sus padres emigraron aquí cuando él tenía siete años.
Lo que no sabemos
El Partido Demócrata es un partido pro clase dominante y pro guerra, similar al Partido Republicano, que intentará cooptar a su base de masas utilizando cualquier táctica para ganar las elecciones. Una de sus tácticas más insidiosas es encumbrar a los políticos de color, ya sea un Zohran Mamdani o un Barack Obama. Votar en cualquier elección estadounidense con el objetivo de cambiar fundamentalmente las condiciones de vida de las masas acaba siendo una gran decepción. El dominio de la clase burguesa siempre mantiene su dominación.
Con todo esto en mente, algunas preguntas que quedan por responder en los próximos meses son: ¿Llevará Mamdani su campaña más allá de las limitaciones del ámbito electoral? ¿O cederá su campaña a los ataques derechistas de ambos partidos capitalistas? ¿Conseguirá la campaña de Mamdani implicar directamente a las masas para que apoyen su plataforma de autobuses y guarderías gratuitos y eviten que los caseros suban los alquileres convocando huelgas o acciones directas para sacudir a los poderes fácticos? ¿Conseguirá la intensificación de los ataques islamófobos, xenófobos o racistas o de las denuncias fraudulentas de antisemitismo contra la campaña de Mamdani desencadenar un contraataque masivo entre sus partidarios?
Las respuestas a estas preguntas y a otras más tendrán consecuencias nacionales e internacionales debido a la heroica resistencia al imperialismo en el Sur Global liderada por las fuerzas de Asia Occidental, lo que conducirá al declive permanente del capitalismo global. Y la ciudad de Nueva York sigue siendo el centro del capitalismo financiero global.
Independientemente de cómo se desarrolle la campaña de Mamdani en noviembre, ha llegado el momento de que los antiimperialistas revolucionarios, los socialistas y cualquiera que quiera deshacerse del capitalismo desarrollen un frente unido independiente para forjar la unidad de clase con el fin de lograr este objetivo final.