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La Wolfsschanze y las FAS españolas (1944-2016)

Fuentes: Rebelión

20 de Julio 1944 A las 12:40 horas la bomba colocada por el coronel Carl von Stanffenberg junto a Hitler en la Wolfsschanze, hizo explosión bajo la mesa en donde Hitler examinaba unos mapas. El autor del atentado que culminaría la Operación Valquiria, junto con varios generales implicados activa o pasivamente en el complot, cayeron […]


20 de Julio 1944

A las 12:40 horas la bomba colocada por el coronel Carl von Stanffenberg junto a Hitler en la Wolfsschanze, hizo explosión bajo la mesa en donde Hitler examinaba unos mapas. El autor del atentado que culminaría la Operación Valquiria, junto con varios generales implicados activa o pasivamente en el complot, cayeron fusilados como represalia aquel mismo día. Mil quinientos generales, jefes y oficiales de la Wehrmacht lo fueron en los cinco meses siguientes, entre ellos el mítico mariscal Rommel, obligado a suicidarse.

Hasta la caída del muro de Berlín en 1989, aquella fecha fue elegida como Día de las FAS alemanas, como expresión de la aversión oficial de la institución militar hacia aquel régimen criminal, convirtiendo este aniversario en un timbre de orgullo con el que intentar lavar su responsabilidad histórica, por haber servido a los planes de quién llevó a Alemania y a Europa a la mayor hecatombe de su historia.

Desde entonces y hasta hoy mismo, en la plaza de armas de la sede del Cuartel General de las FAS alemanas en Berlín, tiene lugar un solemne homenaje presidido por la cúpula militar, y en la edición de esta año, por el propio presidente del Bundesrat (equivalente al Senado español).

ENLACE A LA CONVOCATORIA DEL ACTO DE HOY EN BERLÍN:

http://www.bundesrat.de/…/ter…/DE/praesident/2016-07-20.html

ALEMANIA, HOY. El estado alemán actual, con un gobierno conservador (vulgo: derechista) mantiene una tradición que escenifica la condena institucional del nazismo y su desvinculación total con aquel régimen, asumiendo su responsabilidad histórica por asumir las consecuencias, y comprometerse al lado de las víctimas del nazismo.

Hace cuatro años, con ocasión del 70 aniversario del mortal atentado contra el arquitecto del Holocausto, y responsable de la Gestapo y de las SS. Reinhard Heydrich, llevado a cabo por un comando paracaidista, formado por dos sargentos del Ejército Checo en el exilio entrenados en Inglaterra, tuvo lugar en Praga en el mismo lugar del atentado, la entrega de una condecoración militar alemana a los nietos del sargento Jan Kubis con carácter póstumo. A dicho acto asistió, además del embajador alemán, el jefe de la mejor unidad de élite del Ejército alemán, el Kommando Spezialkräftem (KSK).

Contrastando con Alemania, EL EJÉRCITO ESPAÑOL (Tierra, la Armada y Aire), tienen aún pendiente su transición democrática, como continuadores de una institución estatal de lo que fueron las fuerzas armadas, que parcialmente, se sublevaron en 1936 contra la II República y provocaron una guerra infame, pórtico de una dictadura que duraría cuarenta años. Al igual que sucede con la Guardia Civil y con la Policía.

Consolidado Franco como dictador en 1939, las FAS españolas tienen una cuota de responsabilidad, como ha sucedido en Alemania y en los demás países dominados por regímenes totalitarios en nuestro entorno, que al contrario que en estos países, tienen pendiente de saldar una inmensa con sus víctimas y con la memoria democrática de la nación. Basta revisar los textos de historia que se estudian en las Academias Militares españolas, para darse cuenta del tratamiento que dan al análisis de la Guerra Civil, haciendo breve alusión a elementos tácticos, pero sin entrar para nada en las motivaciones de la misma, ni en los ideología y valores enfrentados, es decir, convirtiendo aquel conflicto en un campo de maniobras de dos ejércitos, de los que no se dice porqué luchaban, y menos aún, se alude al perfil criminal de sus principales protagonistas, especialmente al del general Franco.

Transcurridos cuarenta y un años de la extinción de Su Excremencia, Las FAS españolas siguen instaladas en ser continuadoras institucionales de aquel régimen, al no romper pública y solemnemente su vinculación histórica con las FAS de Franco, ni honrar pública y solemnemente a los miembros del Ejército Popular Republicano (EPR), del que formaron parte las milicias populares, ni de los guerrilleros antifranquistas en España o Francia, o los que combatieron en las filas de los Aliados, instando a su reconocimiento jurídico como excombatientes, como ha sucedido en situaciones similares en los países europeos ya citados, en relación con los que combatieron al totalitarismo. En el organigrama de las FAS de Francia, los excombatientes del Maquis, están ligados a la Secretaría de la Defensa.

Si el Almirante Jefe del EM de la Defensa, Fernando García Sánchez, es incapaz de hacer un homenaje al general republicano Vicente Rojo, Jefe del Estado Mayor, artífice de la estrategia de ofensiva y resistencia del EPR contra el franquismo, el nazismo alemán y el fascismo italiano, ni tienen la valentía de pedir públicamente perdón por la implicación de las FAS en la operación de terror, desarrollada por el franquismo a través de los Consejos de Guerra contra republicanos, nos encontramos ante un universo de impunidades que afecta moral y jurídicamente a toda la estructura física, emocional y filosófica de nuestras Fuerzas Armadas.

Obviamente, no citamos la acreditada complicidad de la figura del Rey con el franquismo, como jefe supremo de las FAS, por tratarse de una figura impuesta por Franco, que no ha estado refrendada por un referéndum libre de la amenaza de las bayonetas.

Por desgracia en España nuestras FAS no tenemos ninguna Wolfsschanze que celebrar, ni ninguna Operación Valquiria que recordar. Pero sí tienen ante sí un largo camino para lavar su dignidad.

¡Qué gran oportunidad perdida por las FAS para haber saldado sus cuentas con la Historia en el 80 Aniversario del comienzo de la Guerra Civil!.

Floren Dimas es Oficial del Ejército del Aire, miembro del Colectivo ANEMOI*

Militares Demócratas Españoles

*ANEMOI (en griego: «Todos los Vientos»)

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.