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[Crónicas sabatinas] Más acá y por debajo del soberanismo-independentismo

¿Nos seguimos mereciendo el clan familiar del molt ex honorable defraudador, de la ex primera dama del «váyase usted a la mierda» y de «Junior», el que no té ni cinc cèntims?

Fuentes: Rebelión

¡Hay que renovar el aire, huele a muerto! ¡Otra vez se acercan elecciones: ya llueven jamones! El Roto, 25 y 26 de febrero de 2015   Pero sobre todo, lo que me he llamado más la atención son los nombres de algunas empresas del pequeño Oleguer. Con una buena dosis de cinismo, a una empresa […]

¡Hay que renovar el aire, huele a muerto!

¡Otra vez se acercan elecciones: ya llueven jamones!

El Roto, 25 y 26 de febrero de 2015

 

Pero sobre todo, lo que me he llamado más la atención son los nombres de algunas empresas del pequeño Oleguer. Con una buena dosis de cinismo, a una empresa situada en Nassau (Bahamas) la denominó Molamolt Headquarters Corporation y a otra Itaca Investiment Trust, situada en la isla de Jersey. ¿Qué les parece? Se han burlado de todo y de todos.

Joan Boada (2015)

 

Pero Pujol y Ferrusola solamente hablaban para decir que era mentira podrida todo lo que se había contado acerca de ellos en las sesiones anteriores. El ex coronel de la Guardia Civil miente, el ex jefe de prensa del ex presidente también miente… (y es cierto que, desde que se inventó el divorcio, todos los ex mienten). «¡Una locura colectiva!» concluyó Ferrusola. Cuando el diputado de ICV-EUiA le preguntó si se sentía «fracasada como madre cristiana» al ver a seis de sus siete hijos imputados, Marta Ferrusola se mantuvo firme en el registro de folletín, línea Los misterios de Barcelona: «Van con una mano delante y otra detrás», contestó. Al final, el grupo parlamentario convergente le hizo un bonito discurso de despedida y así salió de la sala la mujer del ex presidente en dirección norte, que es como se va a Andorra.

Javier Pérez Andujar (2015)

 

Somos poco útiles si hemos de publicar silencios

David Fernández (2015)

 

Cualquier cosa me parece bien si recuerda que nos estamos cargando las mejoras arduamente conseguidas por la vieja clase obrera. Mejoras que nos han beneficiado a todos, en la sanidad como en la educación, las vacaciones pagadas y las pensiones, fuéramos obreros o no. La clase media también, también se benefició. Mejoras que, precisamente por serlo, cambiaron no sólo la economía doméstica sino las formas de vida, los costumbres ancestrales que ligaban los hijos a sus padres como una propiedad. Cualquier cosa me parece bien si de alguna manera recuerda que el mundo del trabajo de ahora es espantoso. El paro disparado por muchos años, y al parecer nos resignamos. La cultura del oficio, demasiado destruida. Y estas cifras: 5,7 millones de conciudadanos cobran unos 645 euros al mes, darían una pierna por ser mileuristas. Un 19% de diferencia salarial entre hombre y mujer. Un 16% de los asalariados trabajan a tiempo parcial, sin saber qué horario ni qué turno harán mañana, seis días por semana. Bien por el azul obrero. Es un color que da luz.

Mercè Ibarz (2015)

 

[Se trata de] cambiar la dinámica de subordinación a los nacionalismos y regionalismos del lugar, en todas y cada una de las nacionalidades y regiones, poniendo en primer plano las reivindicaciones comunes de los de abajo y acentuando las reivindicaciones de los sectores más desfavorecidos en cada una de ellas.

Francisco Fernández Buey (1996)

 

I. De la comparecencia P-F-J y de vómitos

Como en el otro 23-F, don Jordi estaba tranquil, molt tranquil. Oficio, mucho oficio, y, sobre todo, mucha consciencia de clase. En sí y para sí. Hijo de padre financiero. Enorme seguridad en sí mismo adquirida parcialmente en el colegio alemán. Hybris, mucha hybris. Mucho mando en plaza. El país soy yo. Hombre de Estado (¿y eso qué debe ser realmente?) e incluso, en su momento, mejor español del año (un verdadero insulto si pensamos en tantos héroes y, sobre todo, heroínas anónimas. Les doy un nombre: Mercedes Arnal Mur). Placas -incluso esculturas- en numerosos rincones del país. Su, para algunos que diuen, diuen i diuen, grab obra política de 23 años (y prolongaciones) como tema indiscutible e inmaculado, el nuevo misterio de Santísima Trinidad Patriarca-Madre-Hijo dinamizador.

Acaso Javier Pérez Andujar, en su crónica del pasado martes, haya contado lo esencial del gran patriarca y del clan: «Jordi Pujol es muy bueno creando cortinas de humo, envolviéndose en banderas, utilizando trucos a los que nadie puede resistirse. «Dicen, dicen, dicen…», de Hamlet pasaba a Yorick, se reía de lo que no le gustaba y explicaba que se le había agotado la pila del audífono o se sorprendía de que aún quedase un grupo parlamentario por intervenir: «¡Ah! ¡Falta un grupo, falta un grupo…!». Si en su anterior comparecencia, Pujol había abroncado a los parlamentarios para no tener que decir nada, y así recurrió a la tragedia, en ésta tiró de drama».

Algunas pinceladas sobre la comparecencia parlamentaria de «la familia» -una parte, quedan más, muchos más- el pasado lunes 23F:

La fortuna, no hay enmienda como en la mejor tradición española, es un legado del padre, don Florenci. «No tengo ni he tenido cargos de corrupción y el dinero del legado no procede de la gestión. Lo repito con rotundidad». I els documents senyor Pujol? Un paper, només un paper! Només diu, diu, diu.

En tono chulesco, el de siempre: no iba a contestar a todas las preguntas y no iba a admitir que se hiciera un juicio de su mandato. Mientras tanto, el abogado mercenario de la familia, que jamás defenderá a una familia trabajadora, don Cristóbal Martell, le iba haciendo gestos, como en un colegio de primaria: corta aquí, no sigas, ahora bien, vas por buen camino.

No tiene cuentas en el extranjero por supuesto. Es cosa de otros. El no se encarga de esos temas. El futuro está abierto. Las informaciones también.

¿Y los casos de Lluís Pasqual Estevill y Javier de la Rosa? Insinuaciones, simples insinuaciones. Diuen, diuen, diuen, ni cas, no cal fer ni cas.

Como padre de la Gran Familia del país que ha fet país dejó claro su papel: «yo les puedo hacer advertencias [a sus hijos] pero no puedo entrar en detalles». ¿Alguien se lo cree, alguien en su sano juicio (si la expresión tiene sentido preciso) puede creerse una cosa así? Miente, miente, miente.

¿Y Doña Marta? Admitió que viajó a Andorra como comentó un ex coronel de la Guardia Civil encargado de contactar con el departamento de Interior de la Generalitat para que los Mossos de la escolta pudieran llevar armas. Pero no, claro está, para llevar «sus ahorrillos» -no tenen ni cinc, ni cinc, ni cinc!-. Fue para esquiar. Doña Marta siempre ha sido muy deportista… Pero esquiar en Andorra, en un altre país? ¿Y el patriotismo de doña Ferrusola?

¿Y sus hijos? Con un mano delante y otra detrás, así de claro lo dejó doña Marta. Están a punto de entrar en las estadísticas de las familias desfavorecidas.

En cuanto a la herencia de l’avi Florenci, ella nunca preguntó. Lo expresó así: «Si no quieres que el polvo se levante, más vale callar». Molt catalana, molt prudent!

Y lo dejó claro y lo dijo con toda la rabia, con todo el desprecio del mundo: la comisión -no ella, no la corrupción, no la estafa, no la manipulación, no el robo a la ciudadanía, etc, etc- era una vergonya, una vergüenza, para Cataluña. ¿Para Cataluña? ¿Para qué Cataluña? Efectivamente, para la Cataluña de élites insaciables que ella representa y ha representado durante años aparentado ir de sumisa ama de casa de clase media trabajadora y esforzada.

La estrella: «Junior» aseguró que nunca ha actuado desde paraísos fiscales (está imputado por la Audiencia por blanqueo y fraude fiscal y la jueza andorrana valida que se le investigan delitos de corrupción). Nunca es, en este contexto, seguramente siempre. «Cuando uno va con los ahorros al banco [su banco: BBVA] no pregunta dónde ponen sus depósitos». No hace falta preguntar, desde luego; en casos como el suyo se informa al cliente. Tiene «cultura económico financiera» para entender las «operaciones». Reconoció, eso si, que viajó a Andorra en tres ocasiones. Con su ex novia María Victoria Álvarez. Pero sólo pasó una noche en el país vecino. ¡Qué relevante!

Lo que ha levantado más ampollas en círculos del gobierno neoliberal catalán: «Artur Mas es muy amigo mío y yo a mis amigos no tengo por qué verlos cada día, cenar, esquiar o jugar a la ruleta [¿jugar a la ruleta?]. Es una conexión muy íntima, intelectual y espiritual. Sé que el día que lo necesite lo encontraré. Yo soy una persona independiente y de momento no me faltado nunca». De momento, pues, muy amigos, siguen siendo muy amigos, conexión íntima,… ¿Será, en el fondo, una amenaza velada? ¿Un recuerdo a don Mas que está donde ahora está porque la familia dio el vist i plau y movió en su día los hilos que tocaban mover?

No sólo eso. Junior es muy amigo, desde los cinco años, de Felip Pug, el ex de Interior, el de las pelotas de goma, el de Ester Quintana, el que mintió mil y una vez a la ciudadanía, que el sigue siendo miembro del gobierno Mas.

Comentario de Homs, que nunca dice nada arriesgado que no pase por el control del gran Jefe de la tribu: «Estamos en un parámetro subjetivo que no aporta nada al mundo de los adultos. La última vez que oí algo así era cuando estudiaba EGB. Me resisto a entrar en esa cuestión». ¡Cómo debe haberse puesto doña Marta! ¡Y don Junior! A diferencia del verso de Miguel Hernández, ellos nunca han podido leerle, el odio no se amortigua detrás de las ventanas.

Junior dijo ir de independiente. Añadió: «Si hubiera estado cubierto con un Price WaterhouseCoopers o un Garrigues no habría ningún problema». ¿Queda claro? ¿Nos enteramos bien para qué sirven esos bufetes de abogados y economistas empresariales?

¿Gestionó el fondo-supuesta herencia familiar-no-documentada? Sí. Pero para más detalles: el 25 de marzo en el juzgado, cuando vaya a declarar como imputado. Nada que añadir por el momento. Están preparando la estrategia.

¿Y qué es don Junior? Un dinamizador económico que siempre va a riesgo, nunca a comisión. Sus empresas nunca han cobrado comisiones por trabajar para las Administraciones.

Junior declaró sus ganancias y casi corroboró las palabras de doña Marta: ni un duro, no tienen ni un duro. De 2004 a 2014 declaró ganancias por valor de 22,3 millones de euros (menos 7,5 millones de impuestos). Es decir, 14,8 millones de euros de beneficios netos (con ahorros actuales, declarados, de unos 8 millones). Para que nos hagamos idea: lo mismo que un trabajador/a catalán ganaría, trabajando unos 50 años, viviendo 14 vidas. Ni un cèntim, no tenen ni un cèntim!

La perla para el final: don Júnior nunca ha hecho negocios con las administraciones públicas como se apuntó. Eso sí, admitió, que su parte de su trabajo de dinamizador se asienta el contactos que logra cerrar con gentes de las clases empresariales, en redes que otorga beneficios (nada que ver con las redes que dan libertad de las que nos hablaron hace años Jorge Riechmann y Francisco Fernández Buey). Añadió: «La gran mayoría de mi actividad económica pasa fuera de las fronteras de Cataluña y España. ¿En parte por qué? Por el apellido. Porque esto es un pueblo (sic). No me ha interesado nunca entrar en este juego de la política porque el riesgo era para mi padre y yo no tengo ningún derecho a reventar su legado».

¿Qué legado? ¿Esta forma de hacer política por ejemplo? «CiU frenó una multa contra el hotelero avalado por el hermano de Felip Puig cuyo establecimiento carecía de licencia para actuar como hotel». ¿La omertà catalana?

Lo de nunca me ha interesado entrar en ese juego de la política es el mejor chiste del año. Quin riure, quin riure, quin riure!

II. De jueces

Aparte de numerosas razones democráticas -oportunamente recordadas por Jueces por la Democracia- y las referencias más o menos pertinentes a la libertad de expresión (estamos hablando, recuérdese, de un juez en ejercicio), no parece necesario hacer ningún favor que facilite, entre vítores, aplausos y proclamas tipo «yo he sido expulsado por España, yo he sido maltratado por los jueces españoles», el más que deseado y calculado salto a la arena política institucional del juez Santiago Vidal, el político independentista y prologuista del libro de Rafael Burgos: Crema catalana.

Que se lo monte él solito. Ya está en ello. Veremos cuál es el destino político final de alguien que ha ido de radical y rupturista.

III. De sentencias

Reflexión final de un artículo -«Una sentencia previsible»- del pasado jueves 26 de febrero del profesor y catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Barcelona, Xavier Arbós Marín:

«La decisión del Constitucional era previsible. Eso no consolará a quienes, con buenos argumentos jurídicos, esperaban otra cosa. Sin embargo, tampoco confortará a quienes fuimos escépticos desde el inicio. Como recuerda la misma sentencia, citando la doctrina de la STC 41/2014, «hay problemas que no pueden ser resueltos por este tribunal». Pueden, eso sí, agravarse si el tribunal regresa al tono prepotente de la infausta STC 31/2010. Por suerte no es el caso de la sentencia que ahora se comenta, pero no está de más recordarlo».

Es decir, hay problemas que no son estrictamente jurídicos.

IV. En el Cercle d’Economia

Definitivamente: no les gusta la comisión de investigación parlamentaria sobre la «gran familia». Nada, ni un pelo. Se sacan muchos trapos sucios… ¡y que hay que lavar en casa y en silencio, para que nadie se entere! ¿Qué mitos, qué leyendas nacionalistas podrán contarnos entonces a la ciudadanía? ¿Dónde están esas magníficas, excelentes, patrióticas, imprescindible familias que fan país, que han hecho país? Per cert, quin país?

Artur Mas intervino el pasado miércoles en su ambiente. Entre y para los suyos, en el Círculo de Economía barcelonés. Algunas de sus reflexiones:

1. «[a la política se le pueden pedir] buenas prácticas, transparencia en la actuación y un poco menos de reality show». ¿Sus realitys shows? No, no, el trabajo de una comisión parlamentaria emanada de la soberanía del propio Parlament de Cataluña. ¿Pero no eran partidarios de las instituciones democráticas-parlamentarias? ¿Se imaginan qué harían si tuvieran en sus manos, de eso va el juego, un Estado propio?

1.1 ¿Alguien habló de transparencia? Quin riure!

2. «Y punto final. Ya imagináis que quiero decir en función de los últimos días». ¿Punto final? ¿Por qué final? ¿Qué punto debe ser el final?

3. «Nuestra apuesta era vivir en familia, con tu propia personalidad y tu cuota de libertad, en igualdad de condiciones pero esto es lo que no pasa. Y la única manera que nos dejan de vivir en familia es decirnos «paga, trabaja, no molestes y no te quejes». Y si no lo aceptas tienes un problema». ¿Quién trabaja realmente en esas condiciones? ¿Las 400 familias con mando plaza? ¿Su apuesta fue, alguna vez, vivir fraternalmente en familia con personalidad propia? ¿De verdad de la buena?

4. «[elecciones 27 de septiembre] un camino legal y democrático para darnos una oportunidad de saber si queremos convivir de manera diferente… No se trata de romperlo todo… Los comicios servirán para podernos contar». ¿Y cómo nos contaremos? ¿Con qué criterios? ¿Desde qué perspectiva política? ¿Quiénes contarán? ¿No importa las decisiones en dos con restos?

Preguntas complementarias (de Joan Boada): ¿podemos creer que Mas no sabía nada sobre el dinero que tenía su padre en Liechteinstein, evitando pagar sus impuestos en Cataluña? ¿Es posible que no supiera nada de los trapicheos de Prenafeta, mano derecha de don Jordi, que fue su patrón y mentor durante años? ¿Ni de Jordi Pujol Ferrusola, amigo íntimo suyo, y de su presunta trama de corrupción para enriquecerse y subvencionar a CDC?

V. Una explicación

Hablando de Joan Boada, una observación, también suya, que no deberíamos olvidar. Sabe de lo que está hablando. Estuvo implicado directamente:

«El periodista Ernesto Ekaizer afirmaba que un industrial le había comentado que «si no pagabas, estabas muerto». Una afirmación tan espeluznante, equiparable a la que reconocía un presidente del Gremio de Constructores que participó en la comisión parlamentaria sobre el derrumbamiento del túnel de metro del Carmel, que presidí, afirmó: «Todo el mundo paga el 3% y nadie lo va a denunciar porque si lo hace, no trabajará más en Cataluña».

El círculo se cierra. El juego es entre matones; si no pagas, estás muerto.

Por cierto, ¿para cuando una película sobre el padrino catalán?

VI. Porcentajes ICV

El último barómetro del CEO de 2014 -tomo pie en un artículo (pro ICV independentista) de Jordi Matas Dalmases, «La Cataluña soberana de ICV»- mostraba que un 55% de los ciudadanos que aseguraban que votarían a ICV (supongo que a la coalición ICV-EUiA) en unas elecciones autonómicas eran partidarios de una Cataluña que formara parte de un España federal; un tercio, es decir, un 33% era partidario de una Cataluña independiente (¿equivalente a la formación de un Estado propio y separado de España?).

El 12% restante tal vez no tuviera una decisión tomada pero no parece fácil que todos ellos apuesten en el futuro por la segunda opción.

En síntesis: la opción federalista es ampliamente mayoritaria, como casi todos sabíamos, entre los votantes autonómicos de ICV. ¿No debería tomar nota la dirección de ICV, de la coalición, de esta situación? ¿Quieren o no quieren representar a sus votantes? ¿O tendremos que pensar en otras opciones?

Eso sí: Dalmases, todo un catedrático de Ciencia Política de la UB, asegura que ICV es la única formación política que tiene sus futuros votantes divididos entre esas dos opciones. ¿Divididos…? Tal vez sí, pero en absoluto de forma equivalente: no es una división por 2. 

VII. Amianto

Parece imposible a estas alturas de nuestras vidas y de lo que sabemos. Roza la paradoja de la injusticia en sede la Justicia, pero la CGT denuncia con documentación y fotografías «incompliments de seguretat» en la retirada del amianto en el Palau de la Justicia de Barcelona. La referencia: http://www.btv.cat/btvnoticies/2015/02/24/la-cgt-denuncia-incompliments-de-seguretat-en-la-retirada-damiant-al-palau-de-la-justicia/

Más aún. El Juzgado de Primera Instancia 96 de Madrid ha condenado a la empresa Uralita a pagar más de 700.000 euros a las familias de cuatro mujeres fallecidas «por estar en contacto con el amianto al tener que lavar la ropa de sus padres y maridos, trabajadores de la empresa en Cerdanyola del Vallès (Barcelona)». Según la sentencia, las mujeres murieron por enfermedades provocadas por el contacto con el amianto -asbestosis y mesiotelioma maligno- al incumplir la empresa «con la normativa vigente en materia de protección de la salud de sus trabajadores». La normativa exigía contar con una doble taquilla para separar la ropa de calle con la que estaba en contacto con la sustancia. Además, que la ropa afectada fuera lavada por la empresa. Para el colectivo Ronda, la resolución es un «hecho de gran relevancia jurídica» porque desestima la pretensión de la empresa de considerar los hechos prescritos y acredita la legitimidad de los herederos para exigir responsabilidades. Según el Col·lectiu, «esta sentencia allana el camino para futuras reclamaciones de personas que fueron víctimas del amianto pese a no tener una vinculación laboral con la empresa».

Más aún. Una carta al director, lunes 23 de febrero, de F. Javier Bermúdez: http://www.elperiodico.com/es/cartas/entre-todos/quedan-rastros-amianto-metro-barcelona/121976.shtml

«Soy trabajador de F.C. Metropolitano de Barcelona S.A. desde hace 22 años (desempeño labores de mantenimiento). Al leer el artículo ‘El CSIC medirá la calidad de aire que respiran los usuarios del metro de Barcelona (10 de febrero)’ pensé que los datos de esta colaboración entre TMB y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas debería ser comunicados al comité de empresa y los delegados de prevención y riesgos laborales del metro de Barcelona. El F.C. Metropolitano de Barcelona S.A., al igual que la mayoría de explotaciones ferroviarias, utilizó durante décadas sistemas de frenado, hoy ya prohibidos, basados en el amianto, cuyos efectos nocivos sobre la salud son de sobra conocidos. La situación física del metro, las limitaciones en la renovación del aire y la acumulación de elementos contaminantes, tal y como reconoce TMB en el artículo sobre el proyecto Improve Life, hacen plantearse una preocupante cuestión: ¿Dónde está el amianto utilizado en el metro de Barcelona tras la repetida acción de frenado que se habrá realizado millones de veces en los túneles durante décadas? Sistemas basados en la utilización de amianto, y su consiguiente desgaste por fricción, habrán sido proyectados durante años a lo largo de kilómetros en la red metropolitana de Barcelona, y dudo de que los restos hayan desaparecido por arte de magia, puesto que no se trata de un material biodegradable. Ojalá el CSIC y TMB hagan las medidas de investigación correctas y compartan la información con los principales interesados: los trabajadores del Metro de Barcelona y sus usuarios, porque lo importantes es la salud de todos».

No es un asunto que debamos olvidar. Afecta a millones de personas.

VIII. Recortes y muertes

Más allá de nuestra simpatías por el autor (las mías son nulas) la siguiente es una información de Alfons Quintà, lunes, 23 de febrero de 2015.

«Los recortes matan», señala, fue el eslogan dominante en las primeras manifestaciones contra la destrucción de la sanidad pública por la Generalidad. «Ahora ya no es sólo un eslogan sino una verdad documentada y probada por datos estadísticos y demográficos oficiales, alguno de los cuales la Generalidad esconde. Se tapa lo que es un desastre histórico para Cataluña, además de miles de otros desastres individuales, es decir muertos que podrían estar vivos y pérdidas incalculables en calidad de vida».

Desde 2010, en que comenzaron los recortes, ha habido un aumento continuado de la mortalidad en Cataluña. «Se puede llegar a la inversión de la pirámide poblacional, en el sentido de que el número de defunciones llegue a superar el de los nacimientos».

El primer toque de alarma muy grave fue el aumento de la mortalidad en el año 2012 en un 5,3% respecto al año anterior. Fue una barbaridad sin precedentes, en opinión de Quintà. «El dato fue hecho público por los servicios estadísticos de la Generalidad, Idescat. Iba acompañado de un informe técnico bueno y adecuado. Este informe ha desaparecido de la página web de Idescat, mientras que no ha habido ningún otro informe para los años siguientes, sino una retención ilícita de un dato clave, el del número de defunciones del año 2013».

Ningún medio reprodujo los datos, también oficiales, de 2012. «Sólo quien esto escribe lo ha ido publicando, una docena de veces, precisando su gravedad. Lo efectué en los dos medios en que colaboro, el Diari de Girona y este medio digital. La Generalidad quiso ahogarlos. TV3 y las infinitas radios de propaganda de la Generalidad no dijeron ni una sola palabra. Tampoco se ha referido nunca la subvencionada La Vanguardia, ni su radio, ni su TV». En cambio, señala Quintà, «el boletín del sindicato Metges de Catalunya reprodujo los datos que yo publiqué, usándolos para efectuar una encuesta entre los médicos. Un 78% de los facultativos manifestó que la causa de aquel inmenso aumento de la mortalidad eran los recortes sanitarios».

Hoy puedo afirmar, prosigue Quintà, «en base a datos cien por cien oficiales, que no se trataba de un hecho puntual, debido a un único año, sino de una realidad continuada. Ahora se puede probar que la Generalidad ha sido capaz de dejar de hacer público un dato clave y coincidente, que ya expondré, gracias, ay, a las estadísticas del Estado. Es exacto decir que la Generalidad sabe y esconde».

En la actualidad, pasados catorce meses, la Generalidad aún no ha publicado las defunciones relativas a 2013. «Lo tenía que hacer y lo podía hacer, sin ningún problema, ya que siempre lo había efectuado antes de catorce meses. Su no publicación hay que ubicarla entre una ilicitud y una insolencia radical. En cambio, con descarada intencionalidad preelectoral, la Generalidad acaba de difundir datos sobre el número de extranjeros en Cataluña».

Los datos de las defunciones en 2013 ya las ha publicado, hace cierto tiempo, el INE. «Desde siempre, este tipo de datos son idénticos en todos los organismos de estadística, desde el más local al europeo. Se usan unas mismas fuentes y técnicas idénticas. Nunca ha habido discrepancias numéricas». Lo que es nuevo, insiste Quintà, «es que la Generalidad lo haya escondido».

Los datos: hay que destacar que el índice de mortalidad en Cataluña, sobre el total de la población, en 2010 fue del 0,78%. En 2011 pasó al 0,79. En 2012 al 0,83, y en 2013 al 0,81. La mortalidad, sobre el total de la población de Cataluña, ha aumentado en 0,3 puntos desde 2010 (en torno a un 4%). «Para mayor precisión, menciono el hecho de que en 2010 hubo 59.069 muertes en Cataluña. En 2011, 59.586. En 2012, 62.724, a pesar de que los medios de la Generalidad y los serviles lo pasaran por alto. Finalmente, gracias a los datos del INE (escondidos por Idescat) en 2013 hubo 60.807 defunciones, lo que representó una mejora, pero inferior al empeoramiento de 2012. Nunca se había llegado a 60.000 muertes en un año en Cataluña, y menos en periodo de estancamiento o disminución de la población».

IX. Quin final més cada!

No se lo pierdan. No hay subtítulos pero se entiende bien. Es don Junior quien habla al final, pensando tal vez que el micrófono está cerrado -¡o sin pensarlo: manifestación de la creencia de su victoria en el rudo!-: http://politica.e-noticies.cat/quin-final-mes-caca-92206.html,

El contexto: la intervención del diputado del PPC, Santi Rodríguez, quiso poner el punto y final a la comisión asegurando que «yo también quise mucho a mi padre y no por ello justificaría que él hubiera defraudado nunca a hacienda «.

La valoración de don Junior: «¡Qué final más caca!».

Por cierto, la actuación de los diputados de los diferentes grupos políticos durante la comisión fue criticada, por falta de preparación, incluso por el propio David Fernández.

X. Una carta

México, 4 de agosto de 1983. Un paso de una carta de Manuel Sacristán a Francisco Fernández Buey:

«No tengo ninguna fijación en la «unidad de España’, aunque como he dicho varias veces, incluso en la prensa, sí que creo que hay una nacionalidad española (la mía, dicho sea modestamente), y no precisamente castellana o leonesa, etc. Pero, como también he dicho muchas veces, no me interesa compartir esa nacionalidad con quien quiera tener otra; dicho de otro modo, no me importa nada que vascos o catalanes, o quienes sean, sean o no españoles. Por otra parte, y para lo que sí sea España, pienso que el único marco alternativo posible en el plano político es el federal radical, cosa que también habría que trabajar con cuidado y detalle».

Una segunda carta. De Francisco Fernández Buey, finales de 2007:

«Querido Salva:

Efectivamente, se trata de un párrafo de una carta que me escribió desde México, fechada el 4 de agosto de 1983. Creía haberlo reproducido ya en algún escrito anterior (¿tal vez en el prólogo a la edición de las «Entrevistas» o sólo lo pensé?) mencionando carta y fecha.

Por entonces, y hasta el final, en 1985, Manolo estaba particularmente preocupado por el ascenso de los nacionalismos (de todos los nacionalismos). Lo de trabajar «con cuidado y detalle» el punto de vista «federal radical» (en el plano político) y federalista (en el ámbito cultural) siguió siendo motivo de conversación hasta la última que tuve con él, en agosto del 85, un par de días antes de su muerte.

Por entonces Manolo tenía ideas «curiosas», que no sé si te he contado en algún otro momento. Por ejemplo, viendo cómo estaba creciendo el nacionalismo aquí me dijo varias veces que tendríamos que hacer una revista humorística. Tenía ya nombre (que a mí me gustaba): «El charnego colorao»… Fue una época en la que, a pesar de la enfermedad y de los médicos, Manolo tenía muy buen humor, eso sí, combinado a veces con la idea de que tenía que tomar decisiones drásticas para lo que le quedaba de vida. Por ejemplo: la de irse a vivir a Madrid, que fue una decisión meditada (habló con Muguerza de eso e hizo un viaje para buscar casa allí) y en absoluto ajena a la insatisfacción que le producía el ascenso del nacionalismo aquí. El que al final no lo hiciera, o sea, no se fuera a vivir a Madrid en el 84-85, se debió fundamentalmente a problemas médicos (relacionados con la diálisis, etc.). Muguerza se ha referido a eso en algún momento, creo que en la necrológica que escribió para El País (pero habría que comprobarlo) avanzado una hipótesis especulativa que comparto en gran parte: la de que, siendo como era y pensando lo que pensaba, tampoco se habría encontrado a gusto allí (ni en ninguna otra parte).

Pero, especulaciones aparte, lo que él me dijo, ya casi al final de su vida, fue que renunciaba a irse a Madrid, cosa que le habría gustado, por las complicaciones de las enfermedades.

Reflexión política o político-cultural aparte (o sea, haciendo abstracción de lo del punto de vista federal-radical en lo político y federalista en lo cultural), lo cierto es que en los últimos años le agobiaba cada más el sesgo nacionalista de la mayoría de las personas con las que aquí se había relacionado (y más allá de la coincidencia en otros puntos políticos). Si quieres y te interesa, podemos hablar algún día con más calma sobre esto.

Un abrazo fuerte, Paco

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.