Los grupos del PP y del PSPV se cogieron de la mano el martes en la junta de portavoces de las Corts valencianas para vetar la tramitación de una proposición no de ley de la diputada de Esquerra Unida en Compromís pel País Valencià Marina Albiol, en la que se solicitaba que la Cámara instara […]
Los grupos del PP y del PSPV se cogieron de la mano el martes en la junta de portavoces de las Corts valencianas para vetar la tramitación de una proposición no de ley de la diputada de Esquerra Unida en Compromís pel País Valencià Marina Albiol, en la que se solicitaba que la Cámara instara al Congreso a despenalizar las injurias al Rey.
La iniciativa iba a debatirse en el pleno de la próxima semana. La sorpresa fue mayúscula ya que el veto partió de los socialistas, al plantear el portavoz adjunto primero, Ángel Luna, el rechazo a la tramitación por razones de «oportunidad política».
Los populares apoyaron el planteamiento, ya que, en palabras de su portavoz adjunto Rafael Maluenda la petición de Compromís «no es competencia» de las Corts Valencianes, sino del Congreso y el Senado.
La síndica de Compromís, Mònica Oltra, defendió con ahínco la iniciativa de Albiol pese al enfrentamiento interno en el partido y tildó de «muy lamentable» que se «obstaculice» el «ejercicio de derechos de los diputados amparados en el artículo 23 de la Constitución».
La posición del PSPV cambia la línea seguida desde 1995 de oponerse al veto de cualquier asunto para hacer primar, se esté a favor o en contra, el derecho al debate. Por este motivo, otros miembros de la dirección socialista se mostraron en contra. Luna, a quien el secretario general del PSPV, Ignasi Pla, dio carta blanca para llevar las riendas del grupo, asumió la responsabilidad de la decisión, que causó malestar en diputados socialistas.
Sin embargo, Luna ejerce el mando, no sólo sin veleidad alguna de tipo nacionalista, sino sin ningún complejo respecto al pasado reciente del grupo. Y así fue meridiano en su planteamiento: El PSPV no va a contribuir, recalcó, a la campaña que, «desde sectores ideológicos y políticos muy diversos -léase republicanos o extremistas del PP- se está orquestando como si estuviera en cuestión la figura de la monarquía o cualquiera de los otros símbolos sobre los que los españoles tenemos básicamente un acuerdo muy mayoritario», con el fin de dar la «falsa sensación de crisis dentro del modelo de Estado». Un debate que el PP está usando como arma de desgaste contra Zapatero.
El PSPV corta así de raíz un debate que podría extenderse a otras cámaras regionales y ayuntamientos. «Jurisprudencia constitucional» Técnicamente, la iniciativa se rechazó, explicó Luna, invocando el artículo 161.2 del reglamento de las Corts, que establece que, cuando las iniciativas afecten a cuestiones que no son competencia de la Generalitat, la Mesa deberá solicitar el acuerdo de la junta de portavoces antes de acordar la admisión. Maluenda defendió que Esquerra Unida puede presentar esta propuesta en el Congreso, por lo que «no hay indefensión».
Sin embargo, Oltra, cuyo grupo recurrirá la decisión, advirtió que «la jurisprudencia constitucional prohíbe expresamente la no tramitación de iniciativas por motivos de oportunidad política». La proposición se presentó para «salvaguardar la libertad de expresión» e «ideológica» de los republicanos, un día después de la quema de fotocopias con imágenes de la familia real al final de la manifestación nacionalista del 9 d’Octubre a cargo de radicales, identificados por la policía.