Mientras la referente conservadora Sarah Palin apoyó a Gingrich en las primarias del sábado en Carolina del Sur, el candidato mormón admitió que paga una tasa muy baja y prometió hacer pública su situación impositiva en abril.
A dos días de las primarias republicanas en Carolina del Sur, los sondeos con vistas a las presidenciales de noviembre revelan un empate entre Barack Obama y el favorito entre los candidatos de la oposición, Mitt Romney, a quien siguen presionado para que divulgue su declaración de impuestos.
Luego de que algunos de los rivales internos de Romney sacaron la cuestión de los impuestos durante el último debate televisivo, ayer fue el turno de uno de sus aliados, Chris Christie, gobernador de Nueva Jersey, quien aconsejó al millonario mormón divulgar su declaración porque, dijo, «es justo hacerlo». «El dijo que lo hará en abril, espero que lo haga», agregó.
Romney, que ganó los caucus de Iowa y las primarias de New Hampshire, por lo que si se adjudica también el sábado Carolina del Sur, la carrera por la nominación podría quedar cerrada, se ha visto acorralado sobre la declaración de impuestos. El martes admitió que paga una tasa muy baja, cercana al 15 por ciento, debido a que sus ingresos provienen de inversiones hechas en el pasado, y afirmó que divulgará la declaración en abril, cuando los ciudadanos las presentan ante el gobierno federal, y cuando él podría tener asegurada su designación. En realidad los candidatos no tienen obligación de publicar sus declaraciones, pero es una tradición hacerlo por transparencia.
En vistas de la cita electoral del sábado, los aspirantes siguen afilando uñas, conscientes de que quizás Palmetto State, como se conoce a Carolina del Sur, sea su última oportunidad. Los sondeos, además, siguen demostrando que, si las presidenciales fueran hoy en lugar del próximo noviembre, Romney estaría empatado con Obama, por lo que cada vez más republicanos se están convenciendo de que el millonario es el candidato con más posibilidades de llevarlos de vuelta a la Casa Blanca.
Por ahora, los otros cuatro aspirantes republicanos, Newt Gingrich, Ron Paul, Rick Perry y Rick Santorum, siguen haciendo campaña. El ex presidente de la Cámara de Representantes obtuvo ayer el respaldo de Sarah Palin, musa del Tea Party, quien en Iowa en cambio había apoyado a Santorum, por lo que cambió de bandera.
La ex gobernadora de Alaska nuevamente está apostando por un débil, cuando le dijo a Sean Hannity del canal de televisión Fox News que ella cree que Newt Gingrich es la mejor elección para los votantes de las primarias de Carolina del Sur. «Si votase en Carolina del Sur, elegiría sostener a New Gingrich», dijo Palin. «Y querría que esto continuara -más debates y un análisis detallado de los políticos en carrera-, porque sabemos que el error hace cuatro años fue el de tener un candidato que no fue examinado como debió haberlo sido, de manera que sepamos quiénes son sus asociaciones y qué representan sus compañeros y en qué piensa», explicó la ex gobernadora.
Parecía que se estaba refiriendo a la candidatura de Barack Obama en 2008. Palin no apoyó todavía a un candidato en la más amplia primaria del Partido Republicano. El mismo día que su ex rival, el senador John McCain, anunció su apoyo al ex gobernador de Massachusetts, Mitt Romney, Palin le dijo a Hannity que todavía estaba tratando de decidir a quién votar. Pero su movida del martes es para mantener su rol como «disidente» del Partido Republicano.
Su respaldo, sin embargo, parece servir de poco: según un sondeo del diario The Washington Post, el 61 por ciento de los partidarios republicanos dijo no estar influenciado por la opinión de Palin.
Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-185756-2012-01-19.html