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Somalilandia: El país que no existe

Fuentes: Recuerdos de Pandora

Somalilandia es un país independiente de facto que se localiza en el Cuerno de África, la región más oriental del continente africano. Sus orígenes datan en el antiguo protectorado británico de Somalilandia, el cual obtuvo la independencia del Imperio Británico el 26 de Junio de 1960, uniéndose a los pocos días a la Somalilandia Italiana […]

Somalilandia es un país independiente de facto que se localiza en el Cuerno de África, la región más oriental del continente africano. Sus orígenes datan en el antiguo protectorado británico de Somalilandia, el cual obtuvo la independencia del Imperio Británico el 26 de Junio de 1960, uniéndose a los pocos días a la Somalilandia Italiana formando Somalia, un nuevo país independiente con capital en Mogadisco.

Durante los 30 años que Somalia se mantuvo unida sufrió fuertes problemas económicos que llevaron a que en 1987 se creara una oposición armada en Somalilandia en contra de la unidad de Somalia. Esta oposición adquirió en tan sólo tres años el control de la mayor parte de Somalilandia proclamando su independencia unilateral en mayo de 1991 bajo el nombre de República de Somalilandia y con capital en Hargeisa.

La declaración de independencia de Somalilandia desencadenó una serie de secesiones en el territorio somalí, dando lugar a la creación de estados autónomos autoproclamados, que si bien nunca buscaron la independencia de la unidad de Somalia, se han mantenido como estados autónomos autoproclamados, siendo los más notables Puntlandia y Jubalandia.

Somalilandia posee a día de hoy moneda y constitución propias, así como un gobierno elegido mediante elecciones democráticas multipartidistas que tuvieron lugar en el año 2005 y a las cuales asistieron observadores de siete países (Canadá, Finlandia, Kenia, Sudáfrica, Reino Unido, Estados Unidos y Zimbabwe) que declararon que las elecciones fueron libres y justas. Pese a esto, Somalilandia sigue siendo un país independiente que no ha sido reconocido por ningún otro país como tal.

La economía del país, pese a estar aún en fase de desarrollo, es mayor y más estable que la del resto de Somalia. El hecho de ser un país no reconocido le impide que su moneda oficial, el chelín somalilandés (regulado por el Bank of Somaliland) tenga una tasa de cambio reconocida para favorecer el comercio. Sus fuentes principales de ingresos son la exportación de ganado y cereales a Oriente Medio y Etiopía.

Recientes investigaciones en Somalilandia muestran grandes yacimientos de petróleo y gas natural. A lo largo de los últimos años se han excavado varios pozos, pero debido a la falta de reconocimiento internacional de la independencia de Somalilandia, las compañías extranjeras no han podido instalarse en el país para ayudar en la explotación de esos pozos.

Según Stefan Simanowitz, la principal razón para que ningún país reconozca la independencia de Somalilandia es que se requiere la aprobación de la Organización para la Unidad Africana. Uno de los principios de esta organización es que las fronteras coloniales de África no deben ser redibujadas, dado que el reconocimiento de un estado separatista como independiente podría suponer una reacción en cadena con decena de regiones autoproclamándose independientes.

En cualquier caso, la Organización para la Unidad Africana ya ha roto ese principio en dos ocasiones a lo largo de las últimas décadas, reconociendo la independencia de la República Árabe Saharaui Democrática en 1984 y la independencia de Eritrea en 1993.