El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció la creación de un equipo que el próximo mes deberá presentar alternativas a las leyes de tenencia de armas. El espacio, liderado por su vicepresidente, se encargará de plantear cambios para evitar masacres como la de la semana pasada en Newtown. En declaraciones en la Casa Blanca, […]
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció la creación de un equipo que el próximo mes deberá presentar alternativas a las leyes de tenencia de armas. El espacio, liderado por su vicepresidente, se encargará de plantear cambios para evitar masacres como la de la semana pasada en Newtown. En declaraciones en la Casa Blanca, el mandatario sostuvo que todos los estadounidenses tienen la profunda obligación de tratar de prevenir estos eventos y llamó al Congreso a que actúe y vote medidas que puedan encaminar los esfuerzos para realizar cambios respecto a la posesión de armas.
«Utilizaré todos los poderes de este cargo para ayudar en los esfuerzos dirigidos a prevenir más tragedias como ésta», enfatizó el mandatario en referencia a la masacre del viernes pasado en un colegio de Newtown, Connecticut, donde un joven mató a tiros a 20 niños y seis adultos antes de suicidarse. «Necesitamos trabajar para que el acceso a la salud mental sea por lo menos tan fácil como el acceso a un arma», agregó en conferencia de prensa junto al vicepresidente Joe Biden.
Además, Obama recordó que la mayoría de los estadounidenses está a favor de endurecer las normas para evitar que las armas lleguen a manos de personas que no estén capacitadas o no deberían tener acceso a ellas. Ahora hay un consenso creciente entre la sociedad para generar modificaciones sobre el tema, señaló el presidente, que el domingo pasado visitó Newtown, se reunió con familiares de las víctimas y prometió hacer todo los que esté a su alcance para evitar una recurrencia de estos hechos.
Asimismo, el demócrata mencionó que la mayoría de los estadounidenses que poseen armas son responsables y que las compran legalmente y las utilizan de forma segura. A cinco días de una de las peores masacres de la historia de los Estados Unidos, llevada adelante por el joven de 20 años Adam Lanza, el líder de la Casa Blanca insistió en que el hecho de que este problema es complejo no puede ser más una excusa para no hacer nada.
Luego de que muchos debates sobre la posesión de armas surgieran cada vez que una de estas tragedias golpeaba al país, esta vez las palabras necesitan llevar a la acción, remarcó Obama. Por último, el mandatario mencionó que desde el viernes último, cuando ocurrió la masacre en la escuela de Connecticut, ocho personas más murieron por armas de fuego en el país. «No podemos aceptar como rutina más de 10.000 muertes de estadounidenses cada año por armas de fuego», concluyó, señalando que generar cambios y evitar que esto siga sucediendo requerirá de la ayuda de todos.
Más allá de la posición presidencial, políticos de distinto cuño se mostraron partidarios de reducir las armas de fuego en manos civiles en un país donde más de un millón de personas murieron a tiros en los últimos cuarenta años. Al alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, líder de un grupo de funcionarios opuestos a la posesión de armas de fuego, se sumó la senadora Dianne Feinstein, quien en 1994 introdujo la ley que prohibió durante una década la venta a civiles de fusiles de asalto.
Pero no sólo los demócratas y algunos republicanos alzaron la voz contra el gran negocio de los fabricantes de armas. Incondicionales del mayor lobby de esta industria, la Asociación Nacional del Rifle (NRA), como el senador Joe Machin, se declararon a favor de imponer mayores controles.
Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-210245-2012-12-20.html